En el recorrido más cercano a NANEKI se encuentra la mayor concentración de malignos y seres mutados, así que, deben decidir si se desvían por un camino menos peligroso que les llevaría algunos meses mas o tomar el camino de la batalla.
Es una decisión unánime, todos desean acabar con esto lo más pronto posible.
Todos llevan una carga de su pasado que va unido a AISU de alguna manera y con la maldad del mundo.
No desean seguir postergándolo, si bien, no están seguros si van a poder lograrlo, por lo menos lo intentarán, es un viaje de ida sin retorno aparente.
En el pasar de las montañas en las cuáles, cada vez hay menos vegetación, aparecen mutaciones de animales comunes que han sido infectados por un poder aparentemente maligno y atacan con ferocidad en diversos lugares.
Incluso violan sus costumbres.
Los nocturnos ahora son capaces de salir de día, añadiendo peligro a la travesía.
Llevan días luchando, los malignos ya no son mercenarios, conforme avanzan entre las montañas, los grupos que los enfrentan poseen conocimientos mágicos con el uso de los elementos.
Algunas de las veces tienen dificultades para frenar los ataques de los elementos.
Esto los ha obligado a que WAPURO, ESU Y KEKI sean las principales en crear escudos o terminar con un poderoso hechizo que las deja agotadas... han notado algo alarmante... KEKI ha ido cultivando su poder a un nivel peligroso.
Cuando rebasa lo que su misma conciencia le permite controlar.
El poder se descontrola y el ataque se dispersa en un radio más grande.
También lo preocupante es que, consume demasiada energía.
Lo que no saben, excepto WAPURO, es que, es la vida de KEKI que escapa de sus manos.
Tal consternación de WAPURO ha sembrado duda en INKU quien, trata en lo posible de que KEKI se vea forzada a utilizar su magia.
No sabe el motivo, solo sabe que WAPURO no se tomaría algo a la ligera.
Planea preguntarle en cuanto tenga la oportunidad.
El poder de los malignos ha ido incrementándose conforme avanzan, aunque la cantidad va escaseando.
Al pasar por la barrera de malignos, llegan a una nueva barrera compuesta por hechiceros.
Aquí es donde KEKI hace un terrible descubrimiento.
Esta barrera está compuesta por hechiceros de CHOSEN, controlados por AISU.
Todos y cada uno de ellos, son los que por cientos de años marcharon a luchar contra AISU, muchos de ellos, KEKI los conoce.
Ella los vió partir desde que era una niña, sin retorno.
El grupo está preocupado, no han tenido tiempo de descansar adecuadamente por mas de dos horas seguidas.
Están cansados.
Es un grupo numeroso el que los rodea.
El grupo voltea en todas direcciones para cubrirse las espaldas.
Está anocheciendo.
Todos con sus diversas preocupaciones.
Todos son atacados por diversas formas de poder.
Algunos físicos, otros de los elementos.
UISUKII Y KIRO están preocupados por la seguridad de las princesas.
NAIFU Y NEMU, están listas para enfrentar lo que les depare el destino, no hay miedo en su corazón.
WAPURO está muy tensa, sabe el secreto de KEKI.
Ella sabe que hoy es el último día que KEKI posea su enorme poder, el cuál la está matando.
Si bien, su apariencia se ve normal, aunque un poco deteriorada.
El interior de su cuerpo está hecho pedazos por la cantidad de poder que ha dejado salir.
El envase es demasiado pequeño para el contenido.
ESU, que ha superado sus miedos, lucha por tratar de salvar a sus amigos, esforzándose, aunque sienta que sus huesos están a punto de romperse y su sangre le queme.
OKE, no teme a la muerte, ella solo desea acabar con toda la maldad que la ha lastimado toda su vida y la que le quitó a su padre.
Se esfuerza por proteger a INKU lo mejor que puede, perdió a su padre, no desea perderlo a él también.
INKU está presionado por la seguridad de KEKI, ESU Y OKE. Sabe que WAPURO y los demás están en mejores condiciones.
Sabe que él es fuerte, pero, siente la desventaja de cubrir en ocasiones a ESU, quien no tiene demasiada experiencia en batalla.
OKE, es muy ágil y fuerte, sabe que, sin él, ella sale victoriosa de muchas dificultades, es solo que... le importa, le importa mucho.
Y KEKI, hay algo extraño con ella estos últimos 14 días.
Su poder, parece romper límites y con ello su cuerpo.
No sabe si alguien más se ha dado cuenta, pero, la ha visto escupir sangre algunas veces después de un ataque descontrolado.
Como cuando el cañón de un arma se fractura al salir una bala que no es para esa arma.
TOIRE, siente la responsabilidad de cuidar a todo el grupo.
Así que, se acerca a quien tiene menos defensa, se queda junto a ESU, aliviando así la carga a INKU.
Están tan casados que, no es mucho lo que pueden resistir.
De entre todos los hechiceros, hay uno especialmente fuerte, yacen en el suelo... INKU, KIRO, OKE, NEMU, NAIFU, UISUKII, WAPURO Y está agrediendo a ESU mientras lucha contra TOIRE. KEKI, quien está siendo cazada por malignos, trata de seguir esquivando los ataques, su cuerpo se mueve torpemente por al agotamiento y termina cayendo de rodillas.
A estas horas hace 14 días.
Ella perdió su estrella al aceptar el amor que ella siente por TOIRE, lo cuál va en contra de su naturaleza de nacimiento.
La sensación de fatiga, frío y sed invade el cuerpo de KEKI, ella comienza a toser, no puede evitar escupir sangre frente a los demás, ellos se ven muy impactados por este descubrimiento, KEKI siente cómo se le nubla la vista y al abandonarla sus fuerzas, no puede evitar caer al suelo.
KEKI sabe que ya no tiene poder.
La regla de CHOSEN es que ningún hechicero que posea una estrella debe enamorarse nunca.
Su religión le exigía entrega total.
Como ella tenía 14 años, al aceptar el amor de TOIRE, perdió su estrella en 14 días.
La batalla continúa, con TOIRE luchando, los demás tratando de levantarse y tratar de llegar hasta KEKI, quien yace en el suelo, inmóvil, viendo todo, llena de impotencia.
TOIRE, no sabe lo que está pasando con KEKI, pero, si sabe una cosa, de alguna manera, es su culpa.
Poco a poco las lágrimas se van colando por sus pupilas, su corazón se acelera, esto es todo lo que escucha, ya no escucha los gritos ni la pelea.
Su vista está nublada.
Al poco rato, el hechicero más fuerte, siente una fuerte presencia, proviene del cuerpo de KEKI. Es una presencia abrumadora que le causa temor y no solo a él.
Todos los presentes, incluso los que no son susceptibles a percibir, lo pueden sentir.
FIN DE CAPITULO 49