Eran las 7:00 AM de aquel día gris, la alarma sonaba, extendí mi mano hacia la mesa de luz y aún con los ojos cerrados la silencié.
<< ¡Si tan solo pudiese quedarme en cama por un día…! >> - Pensé.
Hice mi mayor esfuerzo y logré levantarme, la mañana estaba fresca, así que me apresuré en buscar la vestimenta que usaría. Abrí el armario y note algo extraño, algo faltaba pero no lograba descifrar qué.
- Quizá sólo es mi sensación - dije mientras agarraba un jean, una camisa bordó que me encantaba y un abrigo.
Ahí fue cuando lo noté,
- ¿Y mi vestido negro? - me pregunté en voz alta.
Estaba segura de haberlo visto el día anterior colgado junto al abrigo. ¿Como es posible que no esté? Hacia mucho no lo usaba.
Busqué entre la ropa y no pude encontrarlo, me giré hacia la derecha y vi el reloj.
-¡Carajo! 7:30 AM , llegaré tarde al trabajo.
Debía estar allí a las 8:00, dos cuadras me alejaban de la parada del autobús y tenía treinta minutos de viaje hasta allá.
Me apresuré en alistarme, tomé mi bolso, sali de casa, me aseguré de cerrar la puerta con llave y comencé a caminar. Al llegar a la esquina observé un auto color negro estacionando allí, me pareció raro ya que jamás lo había visto por el vecindario.
Cuando solo me faltaba media cuadra vi frenar el autobús.
- ¡ Vaya suerte ! Que mal empecé el día - decía mientras corría intentando alcanzarlo.
Subí y aunque sólo había corrido media cuadra me sentía exhausta. Sin duda no estaba en uno de mis mejores días, me senté , respire profundo y mire por la ventanilla. El bus emprendió viaje nuevamente y mientras pasaba la esquina de casa me sorprendí al ver una persona salir de aquel auto negro, no logre verla bien porque en cuestión de segundos el bus se alejaba de allí. Solo alcancé a deducir por su silueta que era un hombre , llevaba puesto un abrigo y algo parecido a un gorro o capucha.
<< ¡ Que raro ! >> - pensaba mientras veía pasar las casas por la ventanilla - No recuerdo haber visto a nadie dentro del auto.
Me sentía bastante confundida, primero el vestido, luego aquel auto y el hombre extraño.
<< Quizá sólo estoy un poco paranoica, después de quedar sola en casa es algo lógico>> - pensaba mientras apoyaba mi cabeza en el asiento.
Hacía una semana mi madre se había mudado, mi padre había fallecido hace diez años en un accidente de tránsito, fue el momento más trágico en mi vida. En ese entonces tenía 16 años de edad, luego de tan grande pérdida nuestra unión con mamá se afianzó aún más.
Hace un tiempo conoció a Eloy, de quien no tengo queja alguna, después de tres años de noviazgo decidieron juntarse. Estaba feliz de que mi madre hubiese encontrado ese ser especial que tan feliz la hacía, pero también sentía miedo, no por ella, sino por mi, sabía que se me haría difícil adaptarme a vivir sola. Pero intente no dar rienda suelta a mis miedos e inseguridades y continuar mi vida normal.
(El sonido del celular me hizo volver a la realidad)
EVELYN BRENNER : ¿JANICE VIENES EN CAMINO? ¿ESTAS BIEN?
Era la señora Brenner, la madre del niño que cuido hace un año, estaba preocupada y era lógico , jamás me había retrasado en llegar al trabajo. Tenía tantos pensamientos en la mente que había olvidado avisarle que llegaría unos minutos tarde.
Mire la hora, 08:00 AM, iban veinte minutos de viaje, llegaría diez minutos tarde, no era mucho, pero soy muy exigente conmigo misma ,así que diez minutos para mi ya era demasiado.
-MIL DISCULPAS POR LA TARDANZA, NO EMPECÉ BIEN EL DÍA. EN DIEZ MINUTOS ESTOY ALLÍ. - Fue mi respuesta
Apoyé nuevamente mi cabeza sobre el asiento y suspiré…
-Muy bien Janice, a despejar la mente y a trabajar..! - me dije a mi misma.