Me sente en un asiento de terciopelo rojo donde en el medio habia una mesa de madera oscura, la gente que estaba sentada llevaba ropas normales y no relucían demasiado , al sentarme empece a estar intraquilo no conocia a nadie de ahi excepto la persona que estaba en el otro lado de la mesa. Ellos tampoco dijeron nada solo me miraron con cara rara y seguian a lo suyo, un camarero entro en la habitacion viendo el panorama intranquilo. Cogio unas cartas que agarraba en su antebrazo, y nos las dio a todos una yo mire lo que estaba escrito y todo parecia normal al empecar a leer la carta me empezo a dar hambre y ya que no habia otra opcion pedi chuleton, ellos mientras hablaban entre ellos yo le hacía señales a Ioritz cuando terminamos de pedir el sorprendido empezó a hablar "siento por no presentaros antes este de aquí es Pagetos Aftrokatoras"dijo señalandome cuando escuché el nombre me sorprendió pensaba que iba a presentarme como Alain pero parecía que no el nombre pagetos aftrokatoras viene del nombre que puse a mi personaje en el juego, tarde tres minutos en ponerlo viene del griego emperador de escarcha. Ahora no sabía cómo llamarlo se me había olvidado el nombre de su personaje en el juego. "este de aquí es Alphonse esta es Leyna y el rechoncho August" al oír mi nombre ellos dieron la vuelta normalmente y creo saber por qué parecía que en este mundo mi personaje era real desde hace tiempo....
Empezaron a susurrarse mientras me miraban cada vez era más incómodo así que tenía que hablar, además Ioritz se estaba riendo de mí y no me iba a ayudar esta vez "bueno buenas tardes" dije sin más se notaba a la distancia que no estaba acostumbrado a hablar con desconocidos, sin que dejasen responder el camarero entro en la habitación con grandes platos de comida, yo cada vez con más hambre y cuando salió el camarero empezé a engullir la comida. Al minuto me termine la comida y me acababa de acordar de que no sabía que íbamos a hacer ellos seguían cuchicheando entre ellos así que les pregunte "así que vamos a hacer todavía no me has contado" después de un segundo se puso serio y empezó a hablar "es complicado de decir todo lo que a pasado pero para resumir" empezó a sacar un mapa en la mesa "en este edificio de aquí han llevado varios ciudadanos arrestados"decía con gestos en los dedos de Comillas" uno de esos es el hermano pequeño de August" al oír eso August cambio de ánimo y se puso serio como Ioritz "además de varios otros ciudadanos, hemos decidido ir lo antes posible allí pero no teníamos gente suficiente ahí entras tu, entendido" "entendido..." era bastante más serio de lo que creía pero sabía que él no haría algo así sin ningún motivo y le crei. "y que tengo que hacer yo?" me vino la pregunta" ya que eres un criminal en la ciudad tu ve a la puerta y entra directamente haciendo una conmoción nosotros entraremos después por la parte trasera para rescatar a los ciudadanos" no sabía de donde salía tanta convicción aunque ahora teníamos habilidades que ni pensábamos tener en nuestro mundo se le veía decidido y que sabía lo que hacía "ya que e aceptado", después de la explicación Alphonse que estaba en la parte derecha de mi lado me empezó a hablar "bueno el jefe te lo ha explicado ya, pero yo soy Alphonse solo te quería decir gracias, y me gustaría también saber si es verdad lo que dice" lo decía alegremente y borracho mientras me agarraba por la espalda y balanceaba su jarra de cerveza "sobre si soy Pagetos" "si" los otros dos empezaron escuchar con atención desde ese momento "si..." "jajaja eres famoso" empezó a reírse los otros dos también empezaron a hacer preguntas y Ioritz se reía de mi por inabilidad en encuentros sociales.
Luego de varias largas horas y de que Alphonse vomita varias veces Ioritz me llevo a su casa o la casa del personaje, era una casa bastante normal con tejado rojo y de ladrillos tenía 3 habitaciones, un baño que era lo más sorprendente por el avance tecnologíco de ese mundo, una cocina y por último una gran biblioteca con chimenea y dos sillones el me dijo que durmiera ya que mañana prepararíamos todo, ya que en la siguiente noche iríamos a salvarlos, entre en la habitación que me había dicho era una habitación simple con un escritorio y una cama individual me senté en la cama me tumbe y rápidamente cogí el sueño.
Pronto se hizo de día y la luz del sol entraba por segunda vez, dentro de mis ojos me desperté y me levanté, al oír varios ruidos provenientes de fuera de la habitación, perdido abrí la puerta y vi a Ioritz ponerse una armadura de cuero con varias placas de metal debajo de estas, parecía que se estaba preparando, así que hice lo mismo.
Antes de que yo me terminara de preparar poniéndome mi armadura, los compañeros de Ioritz llegaron a su casa y empezaron a hablar otra vez de cada punto del plan con bastante esmero y dedicación. Me di más prisa al oírles y rápidamente después de haberme preparado salí de mi habitación, ellos al verme me dijeron hola y yo les respondí con lo mismo, ya que salí bastante grande Ioritz se enfado conmigo y siguió con las explicaciones, diciendo exactamente las patrullas de los guardias, la localización de los prisioneros y varios datos útiles más ya pronto se hizo de noche preparando las últimas preparaciones. Nos despedimos y me dirigí a la zona objetivo.
Llegue y rápidamente para llamar la atención saque mi espada del inventario, lanzándola con bastante fuerza no confiaba darle a alguien pero confiaba que al menos atraería la atención. Luego de eso empezaron a oírse gritos por dentro del edificio, yo posteriormente del mismo inventario saque una espada larga. Al mirarla me dio una sensación de poder controlarla a la perfección, no sabía mis límites y tampoco quería matar a nadie así que intentaré poder distraerlos. Cada vez había más ruidos ya me cansé y grite "salid aquí panda de inútiles". Unos segundos de silencio y de pronto empezaron a rodearme los guardias, después de salir del edificio claro, parecía emocionarme era una sensación rara pero energizante," deje el arma, quedas arrestado", lo digo la misma persona que la última vez el pensaba que haría lo mismo que la otra vez, y lo hice, pero al intentar ponerme unas esposas, le di un codazo a la persona que lo hacía incrustando lo en una pared, y perdiendo la conciencia.
Un momento de silencio ocurrió y yo sonreí, puse la espada en mi hombro y de pronto una niebla helada transportaba por mi piel haciendo congelar el suelo del lugar y la espada, rápidamente ellos se pusieron en guardia cuando sin darme cuenta unos arqueros escondidos en los tejados empezaron a lanzar flechas, sin saber cómo yo salte y golpe el aire lanzando el hielo incrustado en la espada dándole a los arqueros boqueando los en el acto, no pasó ni un segundo del aterrizaje cuando hice otro salto al capitán de los guardias, con su brazo izquierdo balanceo rápidamente en la dirección en la que estaba mientras el sonreía, cuando salte en la espada rompiéndola, viviendo a una postura recta volví a abalancarme hacia el golpeándole con la parte llana de la espada y resistiendolo aunque rodando en el suelo, no tardó mucho en levantarse e intentar contratacar cuando yo cargué mi espada con frío y atacandolo con las mismas picas de hielo de los arqueros, yo no me di cuenta que los demás iban detrás mío cuando era demasiado tarde haciéndome una herida en la parte trasera de la pierna derecha, tuve que dirigir la carga hacia ellos después de recibir el daño y girar, haciendo que se noquearan.
Solo quedábamos lo que parecía el capitán y yo, aunque yo había sufrido leves daño no estaba acostumbrado al dolor haciendo estarme más débil. Los dos sonreímos y volvimos al ataque, mientras yo esquivaba el intentaba bloquear mis bloques haciendo que su resistencia cada vez bajase más, al final los dos quedamos exhaustos el tenía la habilidad y yo la fuerza así que estábamos empatados, lo positivo es que tenía una forma fácil de girar las tornas no lo hice desde el principio para ver mis límites ahora que sabía que estábamos igual invoque al mamut enfrente de el, cuando vio al mamut se cayó del susto aprovechando esa oportunidad me subí a el, le dirigí que le golpease al capitán haciendo que se noqueara.
Cancele la invocación y me tumbe en el suelo de lo exhausto que estaba ahora solo faltaba que los demás hagan los suyo.
En el mismo momento que salieron los guardias, Ioritz y los demás entraron sigilosamente por si quedaba alguno dentro, pasaron varios pasillos llegando a unas escaleras.
Las escaleras se dirigían al piso inferior donde se oían personas llorando y lamentándose, bajaron rápidamente donde las paredes estaban echas de piedras oscuras y húmedas que brillaban con la luz de las antorchas que iluminaban aquel largo pasillo con rejillas a los dos lados poco a poco avanzaban donde podían ver gente de todo tipo hasta llegar a la gente que buscaban, habían 35 personas en una celda había gente de todas las edades, sin pensarlo ni un momento ellos abrieron la celda después de darles la instrucción de que no se fuesen corriendo mientras los demás estaban intentando entrar en razón con ellos Ioritz estaba al lado de una puerta donde un viejo sin dientes y con una larga barba gris, además de una bola de cristal por ojo. El se empezó a acariciar la barba mientras el miraba riéndose a Ioritz."jo jo jo tu no eres aquí" el miró un momento al viejo mientras el siguió al viejo "usted no llamarse ploterisus si mi ojo no falla" el siguió riéndose cada vez tenía más atención con el viejo "dile a tu amigo que valla al norte en el oeste todavía no está lo que busca, al menos encontrará lo mejor para su destino jo jo jo" el no dijo nada mientras del inventario le dio comida y agua al viejo sin que los demás lo vieran además de un papel que decía que luego le iba a sacar para más explicaciones, abrieron la puerta de la otra celda y salieron rápidamente de alli, pasaron los pasillos sin ningún problema. Salieron y vieron la especie de masacre que había echo yo estaba en medio de ellos sin poderme mover, mirando el cielo estrellado vi a los demás y grite"me podéis ayudar no me puedo mover" me estaba riendo ni tampoco estaba viendo lo que pasaba, los compañeros de Ioritz me agarraron y me llevaron a el mismo sitio donde nos conocimos, Ioritz por su parte sin que los demás se diesen cuenta volvieron para ayudar a aquel viejo.