Una gran araña venia de camino a la escuela. En su tronco tenía grandes cicatrices que revelaban que esta no iba a ser su primer combate, su forma de pisar con sus largas y escamosas patas, demostraban un aire de superioridad, su boca salía chorros de esa sustancia negra y viscosa. Cuando la ví estaba reflejado en sus miles de ojos de color rubí y en un movimiento muy rápido fue capaz de dar un salto y aterrizar al frente mío.
Salí corriendo, pero se movía con una gracia que resultaba aterradora. Decidí buscar refugio en un lugar donde ella no pudiera acceder, así que fui a los pasillos.
-Twist, ¡necesito de tu ayuda ahora más que nunca! - estaba sentado con la respiración acelerada, sentía como mi estómago se contraía. - por favor dime que conoces una forma de acabar con esta monstruosidad.
-Creo saber una, -Esta vez esta alertado, veía como tenía sus ojos como platos y sus pupilas totalmente dilatadas, aun así, dijo con una voz firme- debemos actuar rápido antes de que decida demoler el edificio, yo lo distraeré y tu busca insecticida.
En ese momento vi como Twist se convertía en una bola rojiza chispeante y salía disparado hacia esa criatura. Me levanté y corrí hacia el cuarto de limpieza, pero mientras pasaba por los pasillos pensaba que como era posible que un insecticida que solamente mata a insectos pequeños me pueda ayudar.
A esa hora el día estaba nublado, solo faltaba diez minutos para que se acabaran las clases y todos vieran que en la parte trasera hay una criatura de unos 3 metro de ancho y 2 de alto en la parte trasera del colegio. Mi corazón latía cien por hora y tenía los pies hirviendo cuando llegue a la habitación. Cuando entre empecé a esculcar todos los estantes, a destapar todos los frascos y a revisar todas las esquinas como un loco, y en ese momento encuentro detrás del curazao morado del conserje.
Regrese lo más rápido que pude, el cansancio no era una opción para mi misión. mientras me desplazaba rápidamente por los pasillos del colegio, vi como una puerta se abría de par en par y me daba de pleno en toda mi cara. Atontado caí al suelo y sentí como una mano firme me levantaba del suelo, me estaban hablando, pero no lograba percibir quien era solamente tenía en mente en misión, cuando de repente reconozco una palabra "tarántula" y sentí como volvía en sí, solté las manos y fui retome mi rumbo. Me costaba seguir de píe, pero cada vez que resonaba la palabra "tarántula" en mi mente, mi cuerpo se revitalizaba.
En el patio trasero, Twist estaba moviéndose alrededor de la araña y Arremetiendo feroz mente con su pico en el cuerpo de ella. Twist tenia a la bestia totalmente distraída, pero ella cambio toda su atención cuando logro verme. Ella empezó a moverse hacia mí, sin importar que ignorando completamente a Twist. -Pequeño chino, me encargare de ti primero- veía en sus ojos rojos, daban en mí una vista horrenda, pude ver a través de ellos como mi cuerpo estaba cubierto de sangre y a punto de morir. - luego disfrutare quitándole cada pequeña parte del cuerpo a esa diminuta y escurridiza mascota tuya.
-Rocíala!-grito Twist.
Frente a ella, estaba paralizado del miedo, mi mano temblaba fuerte me, sentía como si ella fuera de alguien más y no mía. Era mi momento, vi delante de mis ojos toda mi vida, sentía como era de feliz cuando mi padre, mi madre y yo estábamos juntos, sentí lo distante que se fueron las cosas después de su partida y como yo y mi madre vivimos hasta hoy, Reviví todas esas pesadillas que últimamente he tenido y por fin comprendí que aquello que las provocaba eran las ganas de volver con mi padre. Las estaciones del tren el lugar donde el pasaba su vida, la sala era el lugar donde es paso paralitico sus últimos días se su vida, el bar el lugar al que él siempre iba con sus amigos y que ya no volverá más...
También pude conmemorar el sueño que había tenido ayer, desearía haberme preparado mucho mejor para esta ocasión y conocer más sobre ese maravilloso y tenebroso mundo, Quisiera conocer más sobre las historias de Carter y Twist. Quisiera seguir con vida. En ese momento entendí lo que dijo aquella persona que abrió la puerta. -Debes conocer el nombre real de los monstruos para hacerlos más débiles, ella es Tarantul cazadora de recompensas de los dioses. Al recordarlo mi mente volvió a la realidad, y mis brazos estaban completamente extendidos hacia ella.
-Tarantul!-grite con todas las fuerzas mientras apretaba el botón del rociador.