Cada persona tiene una historia que contar, la decisión de una sola puede provocar un gran cambio para los demás. En una sociedad donde la belleza, el dinero y el poder es todo, definiendo a las personas que pueden gobernar sobre otras y que es para la mayoría una meta que alcanzar, pero pocas personas llegan a lograrlo. Siendo por suerte, trabajo o influencia externa es lo que ampara el futuro de uno. Un ejemplo es la Ciudad de Cargil ubicada en una de las provincias de China. Era bien conocido que la ciudad la gobernaba dos lados, una parte era el gobierno oficial en el cual incluía al alcalde, secretario y entre otros funcionarios, del otro lado estaban las grandes familias que representaban mayor parte de la economía de la ciudad con sus grandes empresas y negocios. Estas se dividían en 4 la Familia Lin, Ye, Wan y Chen. Para resumir el estilo de vida en la Ciudad de Cargil seria "Si no tienes poder, mejor quédate callado". En otras palabras, con dinero podrías comprar todo, desde riquezas invaluables, el corazón de una mujer o hasta el respeto de la gente.
¡En este mundo, solo sobreviven los fuertes y los poderosos!
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A inicios de primavera, donde cada flor sale a relucir su esplendor al son de los rayos del sol en el basto cielo azul, acompañado del ruido de la megalópolis en movimiento. Donde personas dirigiéndose a sus trabajos, llevando a lo niños a la escuela, el sonido de los automóviles pitando
en el largo tráfico, gente entrando y saliendo de los grandes edificios de concreto, es una imagen que se puede observar todos los días como un interminable ciclo que inicia desde la mañana, incluyendo a personas que inician su día antes de que salga el sol y terminando cuando el cielo oscurece dando como señal el fin de del mismo, esperando dar bienvenida al próximo en puerta.
En el edifico principal de la Universidad, Edrea estaba reposado sobre la paleta de la butaca en la clase de Matemáticas, luchando por tratar de estar despierto. Debido a que estuvo doblando tiempo extra para poder ganar un dinero mas para poder cubrir los gastos del mes. Tratando de colocarse recto y mirar al pizarrón, la cabeza de Edrea empezó a imitar los movimientos de un sube y baja.
Arriba... Abajo... Arriba.. Abajo...
Cuando de repente, la traicionera gravedad hizo que su cabeza terminara golpeando la paleta de su butaca.
¡PA!
El golpe interrumpió la explicación que estaba dando el profesor, provocando que toda la atención de la clase se colocara sobre el, al sentir las miradas de burla y desdén empezó a sentirse incomodo deseando en ese mismo momento que la tierra lo tragara vivo.
"Otra vez durmiendo en mi clase, es la tercera vez en la semana si realmente no te interesa no ingreses, no habría diferencia si lo hicieras un bastardo como tu no tiene futuro así que da igual, toma tus cosas y sal de mi clase no quiero que nos quites tiempo "Dijo el profesor con un tono de desprecio.
"No profesor, lo siento, no se volverá repetir así que déjeme quedar en la clase realmente me interesa prometo que no volverá a suceder, por favor". Dijo Edrea un poco impaciente.
Todos en el salón empezaron a murmurar en voz baja pero se lograba escuchar en ocasiones una serie de pequeñas risas dirigidas a Edrea, de cierta manera ya era normal para el pero aun así no podría dejar de sentirse muy impotente. Todos los días era igual, si no eran burlas, eran los insultos o llegando al extremo de golpearlo y sin tener la mínima oportunidad de defenderse. Agregando que al principio de todo esto considero realizar una queja a la Comisión de Disciplina de la escuela, pero para su mala fortuna hicieron de la vista gorda como si en realidad nada pasara dejándolo asi solo teniendo que lidiar con este abuso desde que ingreso a la universidad. Esto era el resultado del mal trato que su familia tiene hacia el.
"Deberías de largarte, un pobre como tu tiene no tiene oportunidad en el futuro de hacer grandes cosas. Deberías de renunciar y ser realista, una oveja negra de la familia nunca dejara de hacerlo" Dijo un compañero de clase, que era conocido por ser el mejor atleta del salón, Zhang Tie
"Con cuerdo con lo que dijo Zhang tie, no deberíamos que estar lidiando con el idiota y estar perdiendo el tiempo" Dijo uno los lacayos de Zhan Tie.
"Así es, deberías ya dejar la escuela...."
"Yo también..."
En un momento, la mayoría de la clase expreso su descontento aprovechando la oportunidad de humillar a alguien. En la sociedad, las personas que no tienen algún poder optan por aprovecharse de otras personas, porque prefieren hacerlo para sentirse la sensación de ser una persona superior a los demás, que ser esa persona a la que estén insultando.
Apretando los dientes, y los puños hasta no mas poder, Edrea empezó a respirar para controlar su enojo y hacer de lado todos los comentarios de los demás. Este fue su mejor manera de lidiar hasta el día de hoy todos los problemas, haciendo de cuenta que el no escucho nada.
"Es como escuchas, los demás votan por que te vayas, así mejor salte para no perder más tiempo" Dijo el profesor con indiferencia de lo que había dicho antes Edrea.
"Entonces también tendré que salirme con el" De repente, una chica se levanta haciendo la acción de guardar sus cosas en su mochila y preparándose para irse junto con Edrea.
Al ver a la chica, Edrea se sintió conmovido en su corazón ya que aquella persona era de las pocas que mostraban su intención de apoyarlo, su primera amiga que hizo al entrar a la universidad. Esta chica era hermosa, en todo sentido de la palabra. Un cuerpo esculpido por los dioses, con una vista de perfil a su cuerpo se vería de manera "S", su retaguardia grande y firme, mientras que su delantera deja mucho a la fantasía de uno, era Jia Li.
"Srtia. Jia Li, no entiendo el motivo por el cual está diciendo que también tiene que salir" Dijo el profesor.
"No se me hace justo que saquen a Edrea, el tiene todo el derecho de estar en la clase como todos nosotros, por eso digo que si le indican que salga de la clase yo misma lo acompañare" Dijo Jia Li con un tono de molestia.
Edrea volteo a ver a su lado izquierdo y derecho de su asiento, en el lado de izquierdo se encontraba el que era antes su mejor amigo de la infancia de Edrea, Wan Kang. Y a su derecha, una chica que en un principio era su futura prometida pero debido al escándalo ella decido terminar esta propuesta, ella era Jue Ru. Al ver que Edrea los miraba, inconscientemente desviaron la mirada sin nada más que decir. Al ver esto, Edrea solo soltó un suspiro. Tomo sus cosas, se colocó su mochila pero antes de salir le mando una mira a Jia Li para indicarle que no era necesario que saliera ella también, al ver la mirada de Edrea ella vacilo pero al ver la última sonrisa sincera marcada en su rostro, eligió quedarse en el salón porque ella quería respetar la decisión de Edrea.
Saliendo del salón, Edrea solamente regreso la mirada a todo a la entrada del salón recordando a cada uno de los compañeros que lo empezaron a humillar y un pensamiento salió en su mente.
"Si tan solo fuera lo suficientemente fuerte, haría callar a todos ustedes". Sin nada mas que decir se dirigió a la salida de la universidad.