Aunque las clases fueron normales, el ambiente entre los estudiantes estaba lleno de tensión, no sabía la causa de esa atmósfera hasta que más tarde me enteré de que algunos de los refuerzos tenían familiares estudiando aquí y les informaron a ellos, de forma general, sobre el ataque hacia nosotras.
En poco tiempo, la noticia llegó a ser conocida por todos en la escuela, causando miedo y desconfianza entre el alumnado, los chismes se propagaban más rápido que un virus y no tardaron en hacerles preguntas a mi amiga sobre el incidente, la cual, ella le respondió con la versión oficial.
Debo decir que las horas de clases se me hicieron más largas de lo habitual por el estresante ambiente y cuando por fin se había acabado la jornada, sentía como si toda mi energía se hubiera ido, estaba totalmente cansada y lo peor aún, había más por hacer en el día, como reunirme con los miembros del club.
Antes de ir a encontrarme con mis amigos, decidí descansar por un momento y recuperar algo de esa energía perdida. Fue en ese momento de tranquilidad, cuando comencé a pensar en algunas cosas que había pasado por alto debido a la estresante situación en la que me encontraba.
Una en particular me llamó poderosamente la atención y es la confesión interrumpida de Sol, ella y yo hemos estado juntas prácticamente desde nuestro nacimiento ya que mi madre era amiga de su padre y ellos querían transmitir su hermosa amistad a la siguiente generación, por lo que nos hacían reunir a menudo con el fin de hacer crecer en nosotras una conmovedora amistad.
Obviamente lo lograron su objetivo, y al crecer juntas, llegamos a conocernos muy bien, conozco sus virtudes, sus defectos, pasatiempos y sus sueños, ella también conoce los míos.
Por lo cual, teniendo en cuenta lo que conozco sobre el carácter de Sol, puedo discernir los dos escenarios en el que ella me ocultaría algo: el primero es que la información concierne a su familia y no puede decírmelo sin su permiso y la segunda opción sería que ella tuviera miedo de perder nuestra amistad al revelarmelo. Si fuera la primera, Sol no me lo confesaría incluso cuando estemos al borde de la muerte, así que por descarte, sería la segunda.
En verdad, tengo curiosidad por saber cuál sería esa información que supuestamente me haría cortar nuestro lazo de amistad. Después de darle vueltas a mis pensamientos por unos minutos, se me ocurre una posibilidad que poco a poco va arraigándose en mí, la cual, cada vez cobra más sentido con el tiempo.
Podría ser... Que Sol tenga una orientación sexual diferente y es por esta razón que ella sea tan pervertida hacia los hombres en sus pensamientos, sin embargo, no quiera interactuar para nada con ellos en la vida real, aparte de nuestros amigos en el club, ¡Es para ocultar su orientación y no hacerme sospechar!
Mientras mi imaginación se vuelve más loca, creando un drama digno de una telenovela mexicana, el tiempo pasa sin que me de cuenta y justo en el momento en que mis pensamientos se vuelven más oscuros y prohibidos, veo venir a la causante de mis fantasías.
Sol se acerca rápidamente a mí con una cara preocupada y me dice "¡Así que estabas en este lugar!, Estuve tan preocupada cuando no te llegaste al club ¡¿Qué pasa Lu?! ¡¿Por qué no te presentaste?!".
"Sol, lo siento tanto, he sido tu amiga durante mucho tiempo y no me he dado cuenta de lo que has estado sufriendo" le digo conmovida casi hasta las lágrimas, ¡Soy tan mala amiga! No me había dado cuenta del dolor y la confusión que debió pasar Sol cuando se enteró de su orientación sexual.
"¿Ah?" Responde ella confundida por mi repentino arrebato.
Yo la miró y le digo " ¿Sabes? No romperé mi amistad por algo como eso, debiste decírmelo antes".
Sol aún sigue confundida y yo al verla tan perdida le aclaró " ya sé cuál es el secreto del que hablabas cuando estábamos siendo atacadas por el sobrenatural"
"¡¿Lo sabes?!" Responde mi amiga sorprendida y claramente alarmada.
Al verla así, puedo confirmar mis anteriores sospechas, así que con una mirada reconfortante le digo "No debes angustiarte con lo que piense los demás, para mí el amor, mientras sea consensuado y haya respeto mutuo, es algo bueno ¡Qué importa si es diferente! Si todos fuéramos iguales, la vida sería demasiado aburrida".
Al terminar mis palabras le doy un abrazo para mostrarle mi apoyo, con mi acción Sol se despierta del aturdimiento producido por mis palabras y me dice"¡No es eso!" Luego me aparta y con un agarre fuerte en mis hombros continúa "¡Escúchame! Yo... No soy del todo humana" confiensa y está vez, soy la que me sorprendo, esas palabras eran algo que no me esperaba para nada.