Chereads / Mi amado Demonio / Chapter 5 - Capítulo 4

Chapter 5 - Capítulo 4

Los gritos y golpes en la puerta se calmaron afuera reinaba la tranquilidad, en la mano del bebé y de Aron se encontraban dos fragmentos de un dije en forma de estrella la cual, se fue apagando con forme pasaban los segundos Akela le dio el bebé a Alistar y comenzó a tender a Marina.

- No salgan aun asta que yo les indique dejemos que la gente calme su euforia Anna ayúdeme a esterilizar la aguja –

- Si muchacha –

Después de que termino de atender a Marina esta comenzó a tomar conciencia

- Donde está mi bebé –

- Señora Ama, lo tiene el Señor amo, usted lo ha hecho bien –

- Que le paso a Aron donde está mi hijo –

- Aquí estoy madre me encuentro bien –

- Hijo acércate, le paso algo a tu cara –

- Estoy bien madre –

- Señora Ama, ayúdeme a no moverse podría ser arriesgado en unos minutos terminare –

- ¿Quién eres tú? –

- Cariño ella es Akela la sirviente de tu hijo ella nos ayudó –

- ¡oh! Cariño tuve un sueño horrible –

Alistar se levanta y se acerca a Marina

- Cariño todo paso mira lo hermosa y fuerte que es tu bebé –

- ¡oh! Mi pequeña bebita –

- Termine, señora Anna ayúdeme a colocar a colocarla en una posición más cómoda –

Aron se levanto y beso a su madre en la frente

- Hijo mío como te sientes que es eso rojo en las vendas –

- Es un remedio de mi pueblo, joven amo tiene que descansar y dejar descansar a su madre-

- Hijo estoy bien ve descansa y mañana nos veremos –

- Si madre estaremos bien –

Los dos salieron de su cuarto estaba vacío no había nadie afuera, Akela detuvo el andar del Aron

- Príncipe el rey está en el recibidor, no debe ver mi sangre necesita lavarse primero –

- Pero necesitamos pasar –

- Lo sacare por la ventana –

- Akela el sol –

- Regresemos a la recamara de su madre ocuparemos el agua que está ahí –

- Claro –

Entraron al cuarto y rápidamente Akela coloco la cubeta detrás del sillón

- Padre el rey esta abajo no puede verme así, no debemos dar explicación de esto –

- Bien, Anna ayúdame con la bebe y yo llevare a Marina salgamos y vallamos a la habitación principal, llamare al rey a mi cuarto y ustedes pueden moverse libre mente –

- Cariño que pasa –

- Cuando termine todo te explicaremos todo por ahora no digamos nada –

- Claro lo que tu digas –

- Madre en un rato iré a visitarte –

- Te estaré esperando –

Alistar cargo muy amablemente a su mujer y Anna estaba enamorada de la niña, después de un rato Anna llego y les indico que estaban listos para salir.

Mientras en la habitación con el rey

- Mira que hermosa niña es tan exquisita y hermosa como su madre, mis ojos no me engañan, pero es rubia –

- En mi familia mi madre que este en el cielo era rubia con ojos azules –

- Eres la mujer perfecta Marina, tu decendencia es tan peculiar –

- ¡oh! Mi rey sus palabras –

- No, Marina no mal interpretes mis palabras me refiero que es hermosa como tu –

- Muchas gracias por sus halagos no los merezco –

- Pero a todo esto donde esta Sir Aron –

- De la emoción no previo el peligro y tubo un accidente en la mañana –

- ¡Dios! Estas seguro que se encuentra bien Alistar –

- Si mi rey el aparenta ser débil, pero es muy fuerte, estará con nosotros en un tiempo –

- Bien no podre irme asta que no verifique que se encuentra bien –

Algunos minutos después el aron llega acompañado de Akela, guardando el decoro toca la puerta

- Madre podemos entrar –

- Pasa cariño –

- Sir Aron ¿cómo estas? –

- Rey, no sabía que usted se encontraba aquí hubiera llegado antes –

- Me dijeron que tuviste un accidente, pero te veo muy bien eso me tranquiliza –

- Error deje caer unas cajas, pero nada grave –

- Quien esta mujer que llega contigo –

- Ella es Akela la contrate para ser mi sirviente personal –

- Si necesitabas a alguien podrías a verme dicho –

- Es una exótica adquisición me jarto de decir que la encontré en el mercado y pude comprarla –

- Me imagino que vienes de tierras lejanas –

Akela no contesto

- Acaso será mudo –

- No, Akela contéstale al rey –

- Rey de los hombres, mi nombre es Akela, desconozco de donde soy, estoy al servicio del joven amo –

- Que peculiar criatura, llama mucho la atención con ese aspecto, siempre eh sabido de tu gusto particular y creo que esta adquisición lo confirma –

- Gracias Rey sus palabras llenan de alegría mi corazón –

- Eres tan pulcro para todo Sir Aron –

- Pero que descortesía, Akela trae el servicio de té para el rey pídele a Anna que atienda a los invitados que están abajo –

- En seguida Joven amo –

Akela hace una reverencia y sale de la habitación

- Que embriagadora es esa criatura lastima que no sabe nada de su proceder –

- Puedo ver a mi hermana –

- Claro hijo acércate –

- Tan hermosa como usted madre creo que la combinación mis padres hace que hayamos nacido de colores tan peculiares, solo espero que mi hermana no tenga la misma condición –

- Que tu pecho no guarde temor hijo, tu hermana veraz que crecerá sana –

- Que los dioses oigan nuestras plegarias –

Llamaron a la puerta para el servicio de té

La visita del rey fue larga pero no duro toda la tarde, se despidió de la familia y regreso al palacio, todos en la casa estaban conmocionados las heridas de Aron había desaparecido como magia ni un rasguño de ese evento o alguno anterior.

- Hijo ¿estás bien?, que les paso a tus cicatrices –

- Señora ama, el joven amo tuvo un sueño y en ese los dioses le dijeron que le ayudarían eliminando la maldición que lo tenía poseído, ahora el joven está curado –

- ¿Eso es verdad hijo? –

- Si madre yo salí al sol –

- Mis rezos fueron escuchados –

- Hijo dejemos descansar a tu madre salgamos, Anna hágase cargo de todo-

- Si Señor –

- Madre duerme vendremos para la cena –

- Si cariño –

Salieron de la recamara y una doncella entro para ayudar

- Es verdad que puedes salir al sol –

- Debido al dije de protección y el vínculo que han creado los príncipes está protegido mientras lo lleve consigo –

- Esto es un milagro –

- Akela, quiero regresar a mi recamara me siento un poco débil –

- Si príncipe –

- Me disculpo padre –

- No te sientas mal yo también regresare con tu madre necesito descansar esto de verdad debilita mi espíritu –

Aron y Akela regresaron a la habitación

- Príncipe necesitamos irnos a la zona norte tendrá usted su ingreso al reino de místico –

- Quieres decir que despejare todas mis dudas –

- Si príncipe, pero no debe ser interrumpido y nadie tiene que saberlo podríamos ser atacados por demonios –

- Pediré a mi padre que tenga listo todo para la noche –

- Bien –

Después de hablar con su padre tuvieron la autorización para ir ala zona norte, solo unos pequeños detalles faltaban, pero en si el edificio estaba listo tenía tiempo.

- Después de que regrese de su regreso traeré gente de mi confianza para que se haga cargo de usted –

- Apreciaría que las personas que trajeras su apariencia fueran más comunes y que se pudieran confundir con plebeyos de esta nación el rey es muy sensible con estas cosas, no quiero ser cuestionado –

- Entiendo Príncipe solucionare su preocupación –

- Dejo esa tarea a tu cargo, tomare una siesta mientras encárgate de lo demás, toma esta insignia es de mi familia y me representa habla con Anna y dile que necesito dejar para hoy habitable este lugar –

- Yo me encargare de eso no tiene que preocuparse por nada –

Aron se acostó en la cama, estaba tan cansado que se quedo dormid casi de inmediato.

Akela camino asta la pueta que daba al patio trasero y se quitó la ropa, convirtiéndose en el enorme lobo corrió al bosque como un rayo negro que dejaba solo el viento a su camino.

Al llegar asta lo profundo del bosque en un manantial se encontraba unas pequeñas y juguetonas ninfas, el lobo se detuvo y se transformo en humano gritando a todo pulmón en una lengua extraña dijo lo siguiente.

- Hoy será el despertar de nuestro príncipe y necesitará que lo atiendan quien estén dispuestos a dejar sus vidas para servirlo, los recibirá en su castillo, necesitan poseer poderes mágicos para guardar sus identidades, que viva el nuevo príncipe –

Después de ese discurso un joven elfo camino asta donde estaba la chica

- El rey me envió para administrar el palacio del príncipe –

- Vamos, te llevare al palacio –

Los dos desaparecieron en una ráfaga de viento

Al llegar al palacio Aron caminaba por el jardín Delois se detiene a las orillas del jardín Akela camina asta la entrada se convierte en mujer y se coloca el vestido

- Príncipe, ¿se siente bien? ¿su descanso no fue muy largo? –

- La habitación es calurosa necesitamos hacer algo con eso –

- Lo arreglare, quiero presentarle a alguien si el príncipe está de acuerdo el se encargar de la administración del castillo –

- Claro dile que pase –

Delois apareció en la orilla del jardín con su túnica blanco con bies azul con un cabello largo y color miel

- Príncipe, permítame presentarme soy Delois príncipe segundo al trono del reino de los elfos hijo de Tarot Rey de las tierras del norte hermano del gran Príncipe Dorley futuro rey, fui enviado por el Glorioso emperador de los bosques para servirle –

- Bienvenido –

- Honor y gloria al príncipe heredero –

- Honor y gloria –

- Solo tengo una petición sobre tu aspecto podría ser –

- Mi rey para los ojos de los humanos no me veo diferente a ellos –

- Me tranquiliza escuchar esas palabras –

- Iré a ver a mi hermana termine los preparativos mañana tenemos la vistitas me gusta cumplir mi palabra, Akela cuando termines te espero en la recamara de mis padres –

Delios se inclina para despedir al príncipe, este se da la vuelta y se retira.

- Delios puedes encargarte de la servidumbre, habla con las ninfas de las flores que hagan la habitación del príncipe mas fresca, nadie a visitado este lugar entonces podemos hacer las modificaciones al gusto del rey –

- Cuente conmigo –

- Una cosa más el príncipe es muy sensible a los baños podrías ayudarme para que el agua sea siempre tibia en su baño –

- Claro descuida me encargare de todo –

- Dejo en tus manos necesito vigilar al príncipe –

- Honor y gloria al príncipe heredero –

- Honor y gloria –

Akela se despide y se dirige directamente al edificio principal antes de salir, unos caballeros de armadura reluciente lo intersecan

- No dejen entrar a nadie y no sean vistos por los hombres debemos seguir el reglamento del príncipe –

- Honor y gloria al príncipe heredero –

- Honor y gloria –

Mientras los pendientes de la nueva residencia estaban siendo resueltos Aron y su familia tomaban la cena en la recamara principal

- Cariño necesitamos encontrarle una nodriza para nuestra hija –

- Mañana enviare a Anna para que se encargue de eso –

- Aron cariño, como te sientes, mejor puedo cargar a mi hermana –

- Esta en su cuna –

- Madre es hermosa, como la llamaremos –

- Estuvimos pensando en nombres, pero creímos que sería varón –

- Madre me gusta el nombre de Elina –

- Que hermoso nombre, que te parece cariño –

- Es dulce y delicado como ella –

- Entonces la llamaremos Elina -

- Pequeña Elina, soy Aron tu apuesto hermano –

Akela llama a la puerta

- Pase –

- Príncipe los preparativos están casi listos –

- Me alegra escucharlo –

- Que preparativos son hijo –

- La servidumbre que ocupare en mi nueva residencia –

- No quieres que envié a gente de confianza –

- No padre el chico que trajo Akela, el me está ayudando con todo –

- Me alegra escucharlo –

- Hijo, pero no te debes de fiar de gente que acabas de conocer si tratan de hacerte algo –

- Entiendo tu preocupación madre, pero el es un conocido de tiempo, en mis salidas el me ayudado con algunos pedidos, además tengo Akela nada me pasara –

- Te conuco y confió en tu prudente juicio –

Aron coloca al bebe en la cuna y se despide

- Madre, padre, fue agradable la cena, me retiro que descansen –

- Descansa tú también hijo –

- Recibiré a Sir Walter en mi residencia a partir de hoy –

Da una reverencia y sale de la habitación

- No tomare las clases hoy, pero si recibiré a Sir Walter, dale un recado al mayordomo para que lo escolten al edificio norte –

- Si joven amo –

Se va y se dirige a su residencia, al llegar una fila de soldados custodian la entrada

- Pasa algo príncipe –

- Que hace toda esta gente aquí –

- Es la escolta del castillo elfos que sirven al rey, no se debe de preocupar no son visibles para el hombre –

- Entiendo –

- Vallamos a la sala a esperar a Sir Walter, quiero tomar té y galletas -