"Gracias por tú ayuda... Por cierto ¿Cúal es tú nombre?" (Alban)
Mirándome a través del cristal que era lo suficientemente duro para romper concreto, Alban me pregunta por mi nombre. Seria lo normal preguntarle el nombre a quien le confías un favor. Sobre todo si tiene algo que ver con tú propia hija.
"Cierto, perdón la tardía introducción, me llamo Blath, Blath Vetner." (Blath)
Dije sonriendo. Una buena presentación es importante. Aunque la situación no es la adecuada, los modales siempre deben mantenerse.
"Blath. Como ves la situación es complicada. Te mandare una localización a ese telefono, ahi es donde nos encontraremos. Las calles por donde llegamos estan todas cortadas, todo es un caos en este momento" (Alban)
Con una expresión severa Alban me iba contando su plan. Bueno viendo la enorme grieta arriba, me sorprendería que no afectara a una gran parte de esta zona.
"Cuida bien de mi hija Blath, buena suerte..."
Mientras me preparaba para despedirme y ponerme en marcha. Alban dijo la ultima frase, y tal vez la más significativa en este momento.
"Una cosa más. Ten cuidado con las personas..." (Alban)
Esta vez sus palabras fueron más fuertes y llenas de urgencia. Así que es así... Dándole un asentimiento diciendo que entendía. Alban se despidió y volvió a su coche.
Pude ver una mujer en la puerta esperando con una mirada ansiosa, estaba mirando hacia acá, mas específicamente a la niña en mis brazos. Ella debe ser su madre.
Alban se acercó y le dijo unas cuantas palabras, la mujer seguía desconfiada y ansiosa mirando hacia mi constantemente. Alban parecia que la persuadió y la mujer entro al coche. Alban se volteo a mirarme una ultima vez y tambien entro al coche.
El teléfono en mi mano vibro con un sonido, era la ubicación en la que se supones que nos encontraremos.
Levantando mi vista el coche ya se había metido en la calle por donde vino. Entonces... es hora de ponerse en marcha.
Hmm? Notando el movimiento en mis brazos observo a la niña, antes no tuve tiempo de observarla bien, pero es mucho mas pequeña de lo que creí, incluso su peso no es un obstacúlo. ¿Te alimentas bien?
Baje a la niña al suelo y la observe a los ojos directamente. Increíble, un par de ojos heterocromaticos.
Con el ojo izquierdo siendo un color verde esmeralda intenso, y el derecho un azul marino con matices dorados ¿Acaso es eso posible eso? Incluso su rostro es como el de una muñeca, labios rojos, pestañas largas, su pequeña nariz formando un perfecto puente.
Piel blanca que acentúa con su Vestido de Lolita de una sola pieza. ¿Acaso eres humana? Prácticamente si no se moviera la confundiría con una muñeca de gran tamaño.
Sus lagrimas ya habían secado, dejandolos un poco rojos. Nuestra lucha de miradas duro unos cuantos segundos. Bueno ¿supongo que tengo que conocer un poco a la persona con la que estaré en esta corta aventura no?
-Hola niña ¿cúal es tú nombre?
Con una voz lo más amigable posible y una sonrisa, fui el primero en hablar. Si, Las buenas presentaciones son importantes.
_Zand_