Hasta que comprobaron que tomé mis medicamentos mis amigos se marcharon, como me sentía mal decidí tomar un baño antes de dormirme. Al salir de la ducha me sequé mi cabello, mi amiga que estaba a punto de bañarse se asomó antes.
- Se me olvidaba... El jefe te llamó mientras estaba en consulta. Deberías llamarle por que estaba que se moría de la preocupación.- Dijo con tranquilidad mientras cerraba la puerta del baño.
Arrojé la toalla y corrí hacia la cama, desbloqué mi teléfono después de casi un día sin ely vi que mi buzón estaba lleno de mensajes y llamadas perdidas, marqué su número sin pensarlo veces, después de un tiempo alguien contestó.
- ¿Hola?. - La voz que me respondió no era la de Louis, era de la de otro hombre...
- Hola, soy Sasha.- Dije presentandome con aquel desconocido.
- ... Hola, soy Joseph.- Dijo cambiando su tono a uno más amigable.
- ¿Está Louis?. - Dije intentando sonar casual.
- Esta en una reunión...- Justo cuando iba a decir que le llamaría después él continuo hablando. - Al parecer no esta de buen humor, la junta en la que está lleva casi 5 horas y no han terminado, todas las propuestas las rechaza con indiferencia, no me ha hablado desde la tarde... No se que pasa hoy, es raro que este así.-
- Ya veo.- Solté al azar sin saber que responderle.
- Deja le digo que le llamas, tal vez así nos libere a todos...- Escuché que salía de un lugar, justo en el fondo se oían pasos de personas corriendo, y uno que otro teléfono sonando.
Después de unos segundos se escuchó como se abría una puerta que daba a algún lugar, en la sala algunas personas que estaban hanlando se callaron.
-Te llaman.- Dijo Joseph.
- Estoy ocupado.- Dijo una voz extremadamente gélida.
- Oh... Lo siento Sash al parecer no tiene tiempo.-
- ¿Es Sasha?. - Dijo rápidamente Louis mientras se oía que una silla se movía bruscamente.
- ¿La cuñada?. - Dijo con indiferencia Joseph. "¿Yo era la cuñada?" Pensé con las mejillas rojas. "¿Acaso no recordaba que estaba escuchandole?". - Si es ella, pero ya le dije que no tienes tiempo para hablar con ella.- Dijo fingiendo inocencia mientras le agregaba sal a la herida.
- ¿De que hablas? Dame el teléfono.- Se escuchó como Joseph forcejeaba por mantener el celular consigo.
- ¿No deberías terminar primero la junta?.- Dijo con dificultad el hermano pequeño dando unos leves jadeos de cansancio.
- Terminemos por hoy. Mañana continuamos con la reunión.- Dijo con impaciencia. - Dámelo.- Poco después se escucho como cerraban una puerta y al fin habló aquel hombre que tanto esperaba oír. - ¿Sash?¿Sigues ahí?.- Dijo Louis con preocupación.
- Si, aquí estoy.- Dije intentando no reírme por haber oído su pequeña pelea con su hermano.
- Intente contactarte toda la tarde pero no me contestabas, y cuando por fin alguien me respondió me dijeron que estabas en el hospital. ¿Estas bien?.-
- Si, estoy bien.-
- La señorita Smith me dijo que te estaban haciendo unos estudios.- "¿Qué tanto había dicho Ash?" miré la puerta del baño que seguía cerrada.
- Si, es que últimamente me he sentido mal... Pero estoy bien. Creo que lo de mañana tendremos que posponerlo..- Dije moviendo mis dedos en círculos sobre la manta de la cama.
- ¿Mañana? ¿Porque?.-
- Mañana debo ir al doctor nuevamente.-
- Oh... ¿Por qué no te acompaño? Podemos ir juntos después de la junta en la empresa.-
- ¿Seguro?.- Dije dudosa porque sabía que él tenia muchas cosas por hacer, pero era algo que ya estaba planeado.
- Si, bueno... si quieres.-
- Vale. Me parece bien.- Una sonrisa se dibujo en mi rostro al ver que mis planes con él seguían en pie.
- Entonces nos vemos mañana.- Dijo tranquilamente.
- Si. Nos vemos. Descansa.- Cuando colgó me levanté de la cama feliz, termine de secar mi cabello y mi amiga apareció ya vestida con su pijama.
-Parece que estas de buen humor.- Dijo cepillando su cabello.
- Mañana tendré una cita con Louis.- Dije intentando disimular mi emoción.
- Entonces tendré que arreglarte para la ocasión.- Dijo dando brinquitos de la emoción.
- Pero que sea algo discreto porque iré a la empresa, después al doctor y ya por ultimo a mi casa.- Ash estaba tomando agua pero al oírme la termino escupiendo.
- ¿A tu casa?.- Dijo con la boca abierta.
- Si, ¿por?.- Dije haciéndome una coleta.
- Ustedes son muy... van muy bien, pensé que serían de los que se toman de la mano cuando nadie les ve pero al parecer ustedes hacen más que eso.-
- ¡Ashley!... Solo vamos a comer.- Dije con el rostro enrojecido.
- Y no lo dudo pero deben cuidarse...-
- ¡Oye! ¡No me estas escuchando!.- Dije arrojándole una almohada.
- JAJAJAJA Amo tomarte el pelo.- Dijo riéndose mientras se sentaba a mi lado. - Sea lo que sea que hagan ya son mayores... y bastante. - Le di un codazo haciendo que ella me abrazara como señal de disculpa.
- Vamos a dormir ya.- Dije metiéndome a las cobijas cubriéndome hasta la cabeza con ellas.
- A ver si mañana dices eso.- Volvió a reírse y apagó las luces para después lanzarse hacia la cama.