Después de una rápida mirada hacia Xia Zhi, ella asintió.
Él sonrió y dijo: —¡Es una maravillosa noticia! ¡Es genial que hayas recuperado tu memoria! ¡Vamos a olvidarnos del pasado y a empezar de nuevo! Hermanita, después de graduarme este año, prometo que trabajaré muy duro para apoyar a nuestra familia. Tu cuerpo todavía está débil, así que quédate en casa y descansa. ¡Déjame todo a mí, traeré a casa un montón de dinero para apoyarnos a nosotros tres!
Xinghe respondió con una sonrisa: —Te creo, pero, por favor, deja de preocuparte por mí, ¡te aseguro que estoy bien!
Xinghe vio a través de las palabras de Xia Zhi y captó la preocupación que sentía por ella.
—Hermanita, después de todo, eres humana, así que, ¿cómo podrías estar bien con cambios tan drásticos? Eras una estudiante estrella en la Academia S, y hubieras tenido un futuro brillante si no hubiese sido por ese bendito accidente.
Si alguien más hubiera experimentado el accidente de Xinghe, lo hubiera encontrado extremadamente desalentador.
Cualquiera se sentiría frustrado si su brillante futuro fuese arrebatado así.
No obstante, Xia Xinghe no era cualquiera. Ella creía que su habilidad no era definida por un certificado de la Academia S.
Ya no tenía miedo de las cosas que una vez la inmovilizaron. Iba a reclamar su vida y esta vez nada ni nadie lo podría impedir.
—Realmente estoy bien, ¿no tienes fe en tu hermana? Por cierto, ¿qué tipo de trabajo estás buscando? —preguntó Xinghe para cambiar de tema.
—Mi título es de informática, así que planeo unirme a una compañía de internet, pero no te preocupes, no será el Imperio Xi —dijo Xia Zhi con algo de emoción.
El imperio Xi era, en su país, la compañía de internet más famosa de Hwa Xia, y en esta época, el negocio en línea era todo un revuelo.
El Imperio Xi solía limitar sus negocios a hoteles y bienes raíces, pero Mubai había visto de antemano cuán lucrativo se volvería el negocio en línea.
Bajo su experto liderazgo, el Imperio Xi de hoy era la compañía más grande de Hwa Xia, y Mubai había entrado varias veces en la lista de Forbes de "las 10 Personas más ricas del Mundo".
Xinghe dijo amablemente: —El Imperio Xi tiene la mejor tecnología, buena administración y buenos beneficios, es una plataforma ideal para los aspirantes a programadores como tú. Deberías ir.
Xia Zhi respondió firmemente: —¡Sobre mi cadáver! ¡Ellos te trataron muy mal, y no podría trabajar para ellos!
—Está bien, no te obligaré si no quieres. En un futuro, tendremos nuestra propia compañía de internet.
—Ese siempre ha sido mi plan. Hermanita, créeme, ¡te haré sentir orgullosa! —dijo Xia Zhi con mucho entusiasmo.
Con el potencial de Xia Zhi, Xinghe creía que su primo en realidad podría triunfar en el mundo.
No era que lo necesitara, pero, si sucedía lo peor, él aún la tenía para apoyarse.
Mientras Xinghe estaba hablando con Xia Zhi, Mubai estaba allí afuera buscándola. Había estado buscándola por 2 horas, pero fue en vano.
Solo se dio cuenta de lo ridículo que estaba actuando cuando Tianxin lo llamó.
—Mubai, ¿estás acostado?
Era costumbre de Tianxin llamarlo todas las noches.
Honestamente, Mubai no tenía muchos temas en común con ella, y no tenía interés en escucharla recapitular su vida diaria. Así que las llamadas nocturnas raramente iban más allá de un superficial "hola" y "buenas noches".
—Todavía estoy despierto, ¿quieres discutir algo? ¿Hay algo de lo que quieras hablar? —preguntó Mubai a madias.
—¿Cómo está Xin Lin? No se veía muy bien durante la cena —preguntó Tianxin cautelosamente.
Ella sabía que Xin Lin estaba renuente a su presencia, no obstante, para preservar su imagen, tenía que fingir que no se daba cuenta.
—Él está bien. Está durmiendo ahora.