Chapter 4 - IV

Mirando la gran casa frente a ellos, los hermanos Son se miraron y sonrieron, cada uno con pensamientos diferentes, hasta que Daiko habló.

"Oye Goten, quieres entrenar?"

"¿Eh?" Goten se aturdió unos segundos por la inesperada invitación de su hermano.

"Pero como?" Al recuperarse, preguntó.

"Bueno, el señor Vegeta siempre entrena en una cosa llamada-"

"Maquina de Gravedad" Una voz inmadura interrumpió.

Los dos hermanos miraron hacia adelante para ver a Trunks, quien se acercaba a ellos con una sonrisa.

"¡Trunks!" Goten corrió y saludó con entusiasmo.

Mirando a su boleto de entrada, los ojos de Daiko brillaron. Comenzó a acercarse hacia el dúo de mejores amigos, ignorando a su madre quien estaba escuchando todo con una vena palpitante en la sien, claramente molesta por todo esto.

"Oye Trunks, ¿alguna vez has entrenado en la máquina de gravedad con tu padre?" preguntó Daiko.

"Si, pero-" Trunks iba a responder, pero la voz furiosa de Chi-Chi le impidió continuar.

"¿¡Que planes crees que estás haciendo, muchachito?!"

"Hii" Goten se escondió detrás de Trunks para evitar que fuera objetivo de la ira de su madre.

Daiko frunció el ceño. Aunque la relación con su madre es neutra, no niega que le molesta cuando chilla como una perra. Se volteó dejando que su madre viera la insatisfacción en su rostro.

"¿Que pasa, madre?"

"¡No puedes entrenar, estás castigado!" dijo ella, señalando a Daiko con un dedo acusador. "No creas que me he olvidado que escapaste de la casa sin permiso"

'¿Que rayos le pasa a esta mujer? Cuando salimos de la casa estaba sonriendo' El ceño de Daiko se profundizó. Definitivamente se inclina al hecho de que su madre tiene doble personalidad. Y si no es eso, entonces ella padece de bipolaridad. 'Supongo que queda usar la carta de niño bueno' Suspiró internamente y comenzó.

"Lo siento, madre", dijo Daiko en un tono apenado. "No quise hacerte preocupar, pero necesitaba salir y entrenar".

"Eso no es una excusa", dijo Chi-Chi en un tono desafiante. "Tienes que aprender a ser responsable y respetar las reglas de la casa".

Al ver que la situación no era buena, Trunks y Goten escaparon.

"Lo sé, lo sé", dijo Daiko, frustrado. "Pero no puedo estar encerrado en la casa todo el tiempo. Necesito entrenar para ser más fuerte".

"¡Eso no es excusa para escapar como lo hiciste!" replicó Chi-Chi, su voz elevándose en tono. "No puedo confiar en ti si continúas comportándote de esta manera".

Mientras madre e hijo discutían, Trunks y Goten, aunque escaparon, fueron en busca de Bulma, la única persona capaz de calmar la situación. En ningún momento se les pasó por la cabeza en pedir ayuda a Vegeta. Después de todo, el seria muy feroz, y probablemente expulsaría a Chi-Chi y Daiko del lugar.

Por parte de Bulma, esta se encontraba emocionada, había organizado una fiesta de té con sus amigas en su casa. Había preparado todo con esmero, las tazas estaban limpias y brillantes, los pasteles recién horneados y las flores frescas adornaban la mesa.

Se sentó tranquilamente en una de las sillas y miró por la ventana como Trunks y Goten venían corriendo con cara preocupada.

"¡Mamá, esto es malo!" Al llegar, Trunks habló mientras señalaba el lugar en donde Daiko y su madre comenzaron a discutir. "Daiko y su madre comenzaron a pelear"

"¡Pelear!" Bulma se asustó, pensando en que Daiko estaba golpeando a su mejor amiga, por lo que se apresuro a la escena.

Mientras se acercaba, los gritos se hacían cada vez más fuertes.

"Bueno, esto no suena bien", murmuró para sí misma, acercándose cada vez más.

Al llegar, Bulma encontró a Chi-Chi y Daiko discutiendo acaloradamente, y rápidamente se dio cuenta de que la situación estaba fuera de control mientras suspiraba aliviada por no ver la escena que se estaba imaginando. Entendió que su hijo se expresó mal, y decidió que le daría una nalgada luego de resolver todo esto.

Trunks, que estaba con Goten atrás del todo, le dio un escalofrió sin saber por que.

"Chi-Chi, ¿qué está pasando?" preguntó Bulma, en un tono calmado pero firme.

Chi-Chi se dio vuelta, claramente molesta por la intervención de Bulma.

"Daiko ha estado comportándose de manera irresponsable", dijo Chi-Chi, señalando a su hijo. "Escapó de la casa sin permiso"

Bulma asintió con la cabeza, entendiendo la preocupación de Chi-Chi, pero sabía que la situación tenía que ser manejada con calma.

"Entiendo que estés preocupada, Chi-Chi", dijo Bulma, acercándose a ella. "Pero necesitas calmarte. ¿Por qué no vienes conmigo a tomar un té y hablamos de esto con calma?"

Chi-Chi parecía renuente al principio, pero finalmente cedió y siguió a Bulma a la cocina. Mientras caminaban, Bulma siguió diciendo: "Por que no hablas de esto con nuestras amigas también? Después de todo, también son madres y juntas podemos darte un buen consejo"

"Me parece bien..." Un poco más calmada, Chi-Chi asintió.

"Oh, ¡Vegeta estás aquí!" Bulma exclamó al ver a su esposo tomar algo de la nevera.

"No es para tanto, mujer" Vegeta dijo con tono aburrido, y entonces vio a Chi-Chi al lado de su esposa. Mirandola, preguntó.

"¿Que pasa?, ¿qué hace aquí?"

"No es problema tuyo, así que vete, shu-shu" Bulma empujó a su esposo a fuera de la cocina mientras este resoplaba.

"¡Humph!, de todos modos no me importa" Sin decir nada mas, el príncipe de los Saiyan se fue molesto.

...

En el patio de la casa, Daiko observaba como Trunks y Goten jugaban entre ellos. Cuando dice "jugar" se refiere a puños y patadas que los dos se lanzan cada segundo.

'Se puede considerar como algo de entrenamiento' Pensó para si mismo, y luego preguntó en voz alta: "¡Oigan!, ¿vamos a la maquina de Gravedad o no?" No admitiría que se sentía excluido, así que propuso el plan de antes.

Trunks y Goten se miraron entre sí, parecían indecisos.

"No estoy seguro de si estaría listo para ese tipo de entrenamiento", dijo Trunks.

"Sí, suena un poco intimidante", dijo Goten, con un tono de incertidumbre.

"No se preocupen, estaré allí para guiarlos y asegurarme de que estén seguros", aseguró Daiko, pero en eso una voz se hizo cargo.

"¿Tú, un mocoso, quiere hacerse cargo de la situación? Risible" Vegeta se acercó mientras le dedicaba a Daiko una sonrisa arrogante.

"Es cierto, soy un mocoso, así que hazte cargo de nosotros, por favor" Daiko no se vio afectado por la burla de Vegeta, sino que respondió astutamente.

Al momento siguiente, exactamente como lo planeo, Trunks y Goten se animaron.

"¿Papá nos va a ayudar a entrenar? ¡Genial!" Trunks saltó de alegría. El tiempo que pasa con su padre es casi nulo, así que podía aprovechar esta oportunidad.

"¿El señor Vegeta también estará? ¡Que bien!" Goten también se entusiasmó.

Al ver como la situación se volvió fácilmente en su contra, Vegeta gruñó. "Maldita sea, ¡hagan lo que quieran! No quiero que supliquen piedad después" Con una mirada dura hacia Daiko, Vegeta caminó hacia la maquina de la gravedad.

Mirándose entre si por unos momentos, los tres pequeños guerreros Saiyajin se dirigieron a la máquina de entrenamiento de gravedad, una enorme estructura metálica con una puerta de entrada en la parte delantera.

Escuchando los pasos que se detenían justo detrás de el, Vegeta suspiró con molestia y declaró: "Están avisados, no quiero llorones aquí"

"Comprendido, señor Vegeta" Daiko sonrió.