Karin cocinaba algo sencillo para su hermano menor, la rutina del día a día, teniendo una sonrisa amable en cara, era un día donde descansaban de la academia, haciendo que su hermano durmiese más gustoso.
Ella se movía agilmente, igual mente, lo que estaba cocinando era algo sencillo, cocino algo de pescado, el favorito de su hermano menor, frotó su frente con calma para suspirar ahora más relajada, aunque su sonrisa demostró cariño, fue directo a la habitacion de ambos, allí miro a Yūji, una risa quiso brotar por ver una imagen que le hacia sentirse feliz y algo graciosa.
" Yūji, vamos, es hora de despertar " hablo con calma la niña meneando a su hermano menor que tenia un pequeño hilo de saliva casi cayendo de su boca, sus ojos se entrecerraron parpadeando queriendo acostumbrarse.
" un momento hermana... " hablo adormilado el pequeño niño, dandose la vuelta y tapándose con esa pequeña frazada, Karin volvió a negar con esa sonrisa divertida
" Yūji, vamos, tienes que levantar te y desayunar " volvio a menear a su pequeño hermano, viendo como Yūji apenas con su fuerza de voluntad se levantó, su cuerpo totalmente flojo y con un gesto dormido, parecia mas perdido qué despierto.
Karin ya no pudo aguantar, las risas salieron de su boca divertida negando con emoción, esta vez se levanto para ir directo a la cocina, una pequeña cocina cabe aclarar.
El niño pelirrojo con sus ojos achinados apenas estaba ubicandose, aunque sollozo dramáticamente cuando su hermana se fue.
" agh... estaba soñando qué comia el delicioso postre de tres leches, ese pastel dan delicioso con fresas y durazno... extraño tanto ese suave dulce " se lamentaba Yūji, ya que sí, aparte de su vida avanzada anterior en Japón, lo que más extrañaba sin duda era la comida, mas los dulces qué parecían no existir en Amegakure.
Su boca llena de saliva la paso en un trago amargo para levantarse en calma, a pasos dormilados fue a la cocina donde se encontró con su hermana, vio en la mesa, aunque era lo más rico que su hermana a cocinado y se lo agradece de todo corazón, ver el pescado allí lo hacia llorar más fuerte internamente.
" gracias por el desayuno hermana Karin, te quiero mucho " hablo con una voz temblorosa el niño sentándose para ver como su hermana le pasaba el plato.
" no es nada Yūji, vamos tienes que comer bien para que tengas energia " hablo con calma la niña, frotando su mano en la cabeza de Yūji, aunque cuando ella se sentó para comer, en medio del silencio qué se formó, Karin se quedo analizando algo como si quisiera recordar, hasta que lo hizo; " oh, quiero decirte que Konan-sensei paso aquí para decirte que fueras al área donde entrenamos, solo que un poco más lejo, donde esta el gran rio de las orillas qué se forma por la lluvia " hablo Karin con calma soltando el comentario.
Yūji con sus mejillas llenas de comida miro a su hermana expectante, aunque esta vez al pasar la volvio a sonreir alegre " me parece bien, ¿pero sabes porque Konan-sensei quiere verme? "
Karin pensó un poco " uhm... realmente no tengo ninguna conocimiento de eso Yūji, lo siento, pero posiblemente se trate sobre el qué te ayudara entrenar tu naturaleza de fuego " hablo con calma la chica, viendo como su hermano casi terminando de comer se pone a pensar.
" puede que tengas razon... " Yūji volvio a comer en silencio, aunque en esta manera al terminar se muestra bastante feliz, es lo que más estaba esperando, donde tendra qué aprender a utilizar ninjutsu y ya no depender solo de pelear a golpes.
Cuando terminó de comer, el niño con alegria se levanta ayuda a su hermana a juntar sus trastes sucios y los lava con el agua que salia infinitamente por la tubería " iré ahora mismo al lugar, estoy muy emocionado de que me enseñarán hoy Konan-sensei, ¡tengo veré en un momento Karin! " hablo Yūji con alegría, al momento de abrir la puerta se sorprende al darse cuenta que este día no estaba lloviendo.
Se sorprende de este hecho ya que en el tiempo que llevaba siempre estaba lloviendo, pero ver que aun el cielo se mostraba grisaceo no le importo.
Básicamente para Amegakure, era un buen clima hoy.
Yūji salio corriendo con rapidez, escuchando como su hermana le decía que tuviera mucho cuidado.
Yūji con su gran y enorme sonrisa corría, escuchandose cada paso que brindaba y el charco qué sonaba, mirar las calles urbanas, llenos de grandes rascacielos, la aldea de Amegakure realmente era muy exótica, calles estrechas donde apenas cabían pocas personas.
Con sus movimientos agudos al pasar por esos angostos callejones, Yūji logra ver a unos ancianos qué parecían batallar en mover algo pesado, con una rapidez aguda Yūji corre directo ayudarles, al momento de hacerlo la pareja de ancianos se sorprende pero sonrien con cariño al ver que se trataba del pequeño sol de la aldea de la lluvia.
" ¡Yūji! Qué bueno que estaba por aquí, aunque ya te molestamos en tus cosas " hablaba el agradecido anciano, viendo como el niño lo movía con bastante facilidad.
" no se preocupe señor Shunno, señora Nana, si yo logro pasar con ustedes los ayudare sin ningun costo " hablo con alegría el niño, viendo como los ancianos le dedicaban una mirada agradecida.
" ¡tengo que irme de nuevo! Tengan bonito día, qué hoy el día es muy lindo " hablo el pequeño pelirrojo reanudan do su carrera, la pareja de ancianos se despidió del niño con alegria marcada en su rostro, a diferencia del clima atípico
Yūji corría con rapidez entre los callejones, daba varios saltos para pasar entre los tubos que se atravesaba, agil de naturaleza, hay algunas partes qué los pequeños callejones se hacian más grande, allí veia varias personas.
La mayoría de la aldea lo conocía, puesto que cada descanso Yūji corría fuera y entrenaba su pequeño cuerpo, y con cada persona que se encontraba el niño ayudaba sin ningun costo.
Y todos los aldeanos al reconocer el cabello vibrante rojizo de Yūji, pero lo que más demostraba y contagiaba era su personalidad graciosa junto a su reluciente sonrisa.
Por ello, Yūji ya era conocido como " el sol de Amegakure ", siempre estaba lloviendo y muy poco podían apreciar el verdadero sol.
Es por ello, que donde pasara el niño, la calidez qué irradiaba siempre estaba, tal cual como un pequeño sol.
Casi a las afueras de lo urbano, Yūji miro como estaban caminando tranquilamente varios compañeros de la academia, quienes al verle sonrieron y le saludaban, el niño sonrio por igual " ¡Ajisai! ¡Fuyō! ¡Nobumi! ¡hola! " saludo con euforia el niño, siguiendo su camino sin detenerse.
Ajisai sonrio burlona " ese mocoso si que no se detiene " la niña tenia ocho años y Fuyō igual, la única que era menor era Nobumi qué sonreia feliz de ver tan activamente a Yūji
" el siempre tiene cosas que hacer, todos los aldeanos están encantados con el " hablo con serenidad Fuyō, mostrandose calma con sus ojos adormilados aunque con una sonrisa aflojerada
" bueno, es un sol andante, si no tiene energia para algo es el fin del mundo " burlo Nobumi siguiendo su andar en el barrio de parte de ellos.
Yūji por fin habia salido de la aldea, alejándose del área rocoso qué siempre utilizaba con Konan-sensei, tenia que dirigirse al área donde siempre estaba llenándose de agua, a los alrededores de Amegakure, allí Yūji paso de pisar tierra a pasar entre el agua.
" si Nobara viera lo que hiciera en este mundo, estaría celosa de que sea como un dios, solo falta que parta un mar " hablaba solo el mismo, aun feliz de ver que podia caminar en el agua, despues de tanto meditar y practicar ya era muy bueno manipulando su chakra, era muchisimo mas fácil que manipular su energia maldita
" hablando de energía maldita, por estar emocionado de experimentar chakra, no he estado en contacto y en busca de como hacer que mi CE se trate bien con mi chakra " gruño de frustración el niño.
Corriendo en una inclinación anormal del cuerpo, seguia pensando un poco aunque paso unos pocos segundos qué se dijo eso a el mismo que un ojo se abrió paso debajo de su ojo izquierdo.
' aun esta en estado de espera mi- ¡hey! '
Yūji ni se lo pensó, se golpeó con dureza su mejilla donde estaba ese ojo burlon y sonsacador de Sukuna, haciendo que ya no lo volviera abrir.
" callate porquería, estaba muy feliz sin tu presencia, ya te dije que no así que quedate allí dentro " hablo el niño con terquedad.
Solo escucho el gruñido de Sukuna antes de volver a desaparecer nuevamente.
El camino fue silencioso despues de eso, aunque con curiosidad vio que allí se encontraba su sensei Konan, pero habia una persona extraña a su costado, se veía alto y un llamativo cabello naranja.
Que extraño.
" ¡Konan-sensei, llegue! ¡logre llegar a tiempo! " hablo feliz el niño dandole un fuerte abrazo a Konan, algo que ni siquiera la peli lila se lo espero, su sonrisa se marcó más por el nervio de sentirse abrazada, hasta sus ojos emitian ese brillo qué habia perdido en sus ojos.
Algo que sin duda la persona que estaba a costado de Konan le mirara furtiva.
" ¿quien es esta persona Konan-sensei? " se separo el niño para ver con curiosidad a ese hombre, portaba la misma tunica de nubes rojas con bordado blanco, cierre rojo, aunque no tenia nada en frente, solo su largo cabello naranja.
Pero lo más llamativo para el fueron esos ojos.
Ver esos ojos en espirales de color algo morado, su cabeza le dolió agudamente, algo que ni siquiera se lo espero, sostuvo su cabeza, pero no queria evidenciar su malestar.
Konan no contesto lo que le pregunto Yūji, solo dejando a Pain frente a Yūji, donde Yūji le miraba con curiosidad.
Fue un silencio incomodo, donde el hombre no mostraba una expresión alguna, estaba estoico frente al niño.
Al menos así fue hasta que la pregunta que se estaba guardando la sacó; " ¿tienes miedo de mis ojos...? "
La expresión de Pain al decirlo era una neutral, mirando de forma inquisidor al niño.
Pero su respuesta lo hizo sorprenderse y mostrarse confundido, una expresión qué realmente pudo hacerle.
Yūji con su rostro ilusionado y su sonrisa enorme miro al pelinaranja frente suyo, hasta brillos parecían salir de el " ¡tienes unos ojos unicos! ... ¡tu también eres una persona única! Son los ojos más geniales qué he visto hasta ahora hermano mayor " hablo con grata ilusion, pero sin ninguna mentira de por medio.
" huh... " Pain se habia quedado en silencio, hasta la pequeña mueca de extrañeza y sorpresa estaba presente en su rostro.
No logrando ver como Konan los miraba con una sonrisa ahora natural.
" ¿cual es tu nombre hermano? ¿Tu me vas a entrenar con mi elemento fuego? " pregunto con emoción Yūji, Pain salio de sus pensamientos para carraspear.
" ejem, si, yi te entrenare con tu afinidad de fuego, tengo muchos ninjutsus que podrían ser te útiles "
Quiso desviar el hecho de que su gélido desdén fue flaqueado por la respuesta natural de ese niño, Yūji volvio a mostrarse emocionado, dando pequeños saltos frente al pelinaranja
" y yo te mostraré los de las otras afinidades, te ayudaremos a enseñarte buenos ninjutsus así que no debes preocuparte "
Hablo Konan ya acercando se a ese dúo, viendo como el niño estaba decidido aprender, por lo que se quedo quieto en espera qué el pelinaranja hablara.
" por cierto hermano mayor, ¿cual es tu nombre? " la curiosidad del niño fue vista en ese momento, en lo que Pain volvio su mirada al niño.
" mi nombre es Pain "
" Pain... " claro que reconoció la palabra, aunque para el era una palabra muy rara para ser un nombre, pero no juzgaba, a lo que solo asintio con calma y una sonrisa emocionada.
" bien, basta de charlas, te enseñaré varios ninjutsus de tipo fuego, para hacerte fuerte tendrás que hacer de los que estén mayores niveles más alto, con eso me daré cuenta de tu fuerza y si realmente eres un prodigio como me dijo Konan " hablo con calma y esa voz gutural hacia el niño, quien Yūji se mostro avergonzado.
Frotando su nuca y con esa mirada abochornada, entre risas tímidas el niño habló; " yo realmente no me considero un prodigio, simplemente es que Konan-sensei explica muy bien paso a paso para alguien tan lento como yo "
Yūji no mentía, Konan era mil veces que su profesor albino qué solo le decía que maldiciones matar y solo tener hacerlo rápido.
Desde allí le mandaba su rabia a su sensei donde quiera que este, aunque seguro este se burlaban sacando su lengua y enseñando sus dos dedos en una seña de amor y paz.
Pain no dedico más tiempo " presta atención a los sellos qué voy a utilizar, lo haré solo una vez y con lentitud para que puedas ejecutarlo bien " Pain ni siquiera le dijo la clasificación del jutsu, solo quería ver si realmente el niño era bueno, tan bueno, que aunque proveniera de otro lugar, queria tener esperanzas de que ese niño podria ser bueno para Amegakure.
Con ello, Pain inicio hacer los sellos a una velocidad accesible, sin apartar la mirada del niño.
Serpiente → Dragón → Conejo → Tigre
" ¡Estilo de Fuego: Jutsu Flama de Dragón! "
El pecho de Pain se infló bastante y se logra ver como una llamarada tan enorme que parecia iluminar y deshacer el agua abundante de la estancia evaporadores, Yūji vio eso con los ojos bastante grandes, aunque no se dio cuenta como Sukuna también entre abría sus ojos con curiosidad al ver una técnica con fuego.
Algo de lo que el realmente era muy bueno con la tecnicas malditas.
' entonces esto es como se utiliza el chakra... es tan, destructivo y abundante ' pensó con sudor frío el niño aun teniendo su gesto sorprendido
Las llamas eran tan enormes como lo urbano de Amegakure, Pain volteo a mirar al niño con calma y sin mostrar un gesto.
" ahora, quiero ver que hagas este Jutsu "
Le hablo con calma el hombre al pequeño niño que aun seguia conmocionado, pero salio rápidamente de su mente, para suspirar profundamente tensando su cuerpo.
Recuerda bien los sellos, pero tenia que hacerlo lento para poder emularlo, es la primera vez que utilizaba el chakra en algo que no sea refuerzo de su cuerpo, por lo que comenzo hacer los sellos que claramente son visibles.
Serpiente → Dragón → Conejo → Tigre
Al hacerlo con lentitud, podia sentir como su chakra parecia cambiar de naturaleza, se sentia más ardiente.
Algo demasiado caliente se abrumo en su pecho, inhalo con fuerza para colocar su mano frente a su boca con dos dedos extendidos.
Pero a diferencia de Pain, el niño no dijo su jutsu, al contrario, le parecia contraproducente, ¿porque gritería al aire su tecnica para que todos supieran qué utilizaria?
Prefería decirlo en su mente
' ¡Estilo de Fuego: Jutsu Flama de Dragón! '
Lo dijo con fuerza en su mente, su mirada tierna paso agudizada, y exhalo con todas sus fuerzas.
Para sorpresa del Pain, el niño en el primer intento extendió una llamarada muy potente, tan potente qué tuvo que sostenerse al agua con chakra, lo mismo con Konan.
Konan sabia que el niño tenia demasiado chakra, pero realmente no espero que fuera tanta, sin duda fue una sorpresa enorme.
La llamarada salida de su boca no se detuvo, solo cuando fue abundante y se comieron la primera llamas de Pain, el niño teniendo sangre en sus labios por forzar se se mostro con una gran sonrisa vencedora.
" ¿esto cumplió tus expectativas, hermano Pain? "
Pain con sus ojos muy abiertos vio como ese niño, que no tiene más de cuatro años, lo habia vencido con ese jutsu, que aunque fuera un jutsu muy básico de clase C, que el niño lo aprendiera es otra cosa, el realmente no espero que ganara y que aparte se comiera su llamas.
Tiene reservas aterradoras, mas que las suyas.
Pain miro al niño con calma, viendo como se reflejaban las llamas en su mirar, pero lo que Yūji noto fue la leve y solemne sonrisa de Pain " si, lo hizo, te voy a entrenar con el elemento fuego, pequeño, no espere que me lograrás vencer... lo mereces "
El niño se emociono demasiado qué comenzo a saltar con rapidez, dando pequeñas vueltas
Konan solo veia esa escena muy divertida, sabia que Pain no se decepcionara de ese niño.
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[Ilustracion del día de hoy! ♡
— Imagen ]
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