La mano de Gu Qiaoqiao se tensó alrededor del auricular y al otro lado, parecía como si alguien estuviera esperando en silencio a que ella hablara.
Unos momentos después, Gu Qiaoqiao volvió a la realidad y preguntó —¿Llamaste por algún motivo específico?
—¿Está todo bien en casa? —preguntó Qin Yize indiferentemente.
—Sí, todo está bastante bien.
—¿Y tú? —La voz clara de Qin Yize comenzó a flotar alrededor de su oído.
Gu Qiaoqiao se sobresaltó y no sabía cómo responder.
Qin Yize permaneció en silencio, aparentemente esperando con calma su respuesta.
—Yo también estoy bastante bien —Después de unos momentos, Gu Qiaoqiao respondió suavemente.
—Hmm —Qin Yize también respondió suavemente. Había que decirlo, su voz era verdaderamente agradable de escuchar.
Especialmente cuando se transmitía a través de la línea telefónica, su tono era increíblemente tentador.
Gu Qiaoqiao sintió cosquillas en sus oídos.