—Yo, Árbol Primigenio Eterno, ¡envíame a la próxima prueba!
En el momento en que las palabras salieron de su boca, Damien sintió que el espacio a su alrededor se distorsionaba. Casi todas las notificaciones que flotaban frente a su rostro desaparecieron, dejando solo una.
[Has superado la Prueba del Ser.]
Prueba del Ser. Era una muy buena manera de describir la prueba anterior.
Aunque en esos momentos finales, había estado observando todo desde el vacío, no había sido así todo el tiempo.
A diferencia del que había creado la prueba de ilusión en el Reino Secreto Eterno, el Árbol Primigenio Eterno era un ser que había alcanzado la Divinidad.
Los Ojos que Todo lo Ven de Damien habían sido completamente suprimidos.
Cuando lloraba en un rincón en su segundo día en la mazmorra. Cuando intentó suicidarse en el tercero, cuando se humilló en el cuarto, cuando enloqueció en el quinto, él había estado allí.
Lo había experimentado todo de nuevo en primera persona.
