Dyon sonrió al escuchar este nombre —Alejandría... ¿así que de ahí viene Ri? Aun así te seguiré llamando fuego hielo —dijo guiñando un ojo.
Dyon iba a girarse hacia la multitud cuando de repente recordó algo —oh sí... ¿cómo es que ustedes dos de alguna manera piensan que yo podría saber que Aeson iba a morir, y aún así no lo salvé? ¿Qué soy para ustedes, algún tipo de animal? —Dyon fingió un aspecto herido, llevando su mano a su pecho.
Ri y Primavera levantaron la vista, atónitas.
Pero antes de que pudieran preguntar, Dyon respondió —Puse decenas de arreglos de transferencia espacial en él... Supongo que si esa persona hubiera revisado dos veces, se habría dado cuenta de que él se desmayó debido a la conmoción y probablemente pérdida de sangre... pero el cuerpo de un artista marcial es más fuerte que eso... probablemente está por aquí cerca...