—Así como Emily preguntó, las orejas de Stella no pudieron evitar sobresalir...
Nunca había estado clara acerca de los pensamientos de Adrián.
Aunque esperaba que el pequeñín no quisiera a RK, después de todo, ese hombre... Era imposible entre ellos.
Además, RK era el hombre que también tenía un hijo. Y más aún, el próximo mes él se casaría pronto con Sofía.
Por lo tanto, en este momento, ese hombre no puede darle a Adrián amor paternal, especialmente cuando este hombre no le gustaba Adrián...
De lo contrario, ¿por qué no quiso al niño en aquel entonces?
—¡Con tal de que a Cariño le guste, a mí me gusta! —dijo Adrián con mucho ánimo.
Parecía que había pensado en esta pregunta hace mucho tiempo, así que cuando la respondió, ni siquiera necesitó pensar en ello.
—¡Stella, míralo a Adrián, cada vez habla mejor! —Emily escuchó esto y no pudo evitar reírse de este niño.
Después de pensar un poco el pequeño preguntó: