Benjamin: Claro... pero no quieres ir a descansar, es tarde... mañana si quieres nos reunimos y te cuento.
Sebastian: ¿Donde iras?
Benjamin: No se, pero...
Sebastian: Entonces iras a mi casa, no puedes estar en la calle solo por toda la noche.
Benjamin: Pero... no merezco que me ayudes tanto...
Sebastian: ¿Por que dices eso?
Benjamin: No tengo Alas, solo soy un inutil pedazo de mierda que sirve para ensuciar mi apellido, no merezco nada porque soy un...
Sebastian lo abrazo apretando su espalda con sus brazos y cerro los ojos con enojo, ya que escucharlo decir esas palabras de el mismo solo por una condicion que no es grave realmente.
Sebastian: No vuelvas a decir eso... no importa si tienes Alas o no... lo que importa es lo que tienes dentro... realmente no se que decir, pero no me gusta que digas eso, menos si se trata de ti mismo.
Benjamin: Ensucie mi apellido con mi enfermedad...
Sebastian: No es una enfermedad, solo es una condición... ¿Por que hablas de tu apellido?
Benjamin: Soy Benjamin Ordiz.
Sebastian se sorprendio al escuchar su apellido, ya que las empresas de moda y diseño eran las más conocidas del Mundo actualmente por sus redes sociales, sin mencionar las demas empresas de inmuebles que tienen por todo el Pais.
Sebastian: No ensuciaste nada, tu familia tiene que apoyarte en las buenas y en las malas... siempre deberia ser asi...
Dijo triste y Benjamin entendio que el tampoco tiene una buena relación con su familia, asi que trato de sonreir.
Benjamin: Gracias, Sebas...
Se levanto y abrazo a Sebastian que se tenzo un poco, pero se lo devolvio, sintiendo el calor que transmitia solo con el tacto de su cuerpo.
Sebastian: No es nada, vamos antes de que llegue mi papá a casa.
Benjamin: C-Claro.
Tartamudeo sin darse cuenta que se habia quedado mirando los ojos de Sebastian que tenia unos pequeños lentes cuadrados cubriendo sus hermosos ojos cafe.
Benjamin: Te quedan bien los lentes.
Sebastian: Gracias, jajaja.
Ambos caminaron por aproximadamente 20 minutos hasta que llegaron a la misma plaza donde se conocieron y pasaron dos calles más para llegar al hogar del Villena.
Una vez en la casa entraron y Sebastian lo guio a su habitacion, revisando si la casa aun estaba vacia.
Sebastian: Bien, mi papá no puede enterarse que estas o estuviste aqui, no salgas de la habitación, nunca.
Benjamin: Esta bien, lamento serte tanta molestia...
Sebastian: No es por ti, no te preocupes.
Mostrando una sonrisa algo cuadrada, le enseño algo de su ropa para cambiarse y curarlo luego.
Benjamin: Gracias, me cambiare.
Dijo comenzando a quitarse el pantalon frente a Sebastian que se giro inmediatamente para no molestarlo.
Sebastian: L-La puerta que tienes en frente es un baño...
Benjamin: Que bueno saberlo.
Dijo feliz mientras terminaba de arreglarse, avisandole que ya estaba listo, Benjamin se sento en la cama esperando a Sebastian, quien fue a buscar algunas curitas para colocar encima de las heridas desinfectadas.
Benjamin: Muchas gracias, de verdad... es la primera vez que alguien se esfuerza tanto por mi...
Dijo tapandose la boca con su puño cerrado y comenzando a llorar nuevamente, Sebastian solo le acaricio el cabello suavemente mientras sonreia.
Sebastian: No es nada... verte asi me dan ganas de cuidarte más, jajaja.
Dijo sinceramente, provocando que Benjamin suelte una pequeña risa que lo dejo prendido de el.
Benjamin: Perdon, debes estar cansado... donde dormire...? Tienes una almohada para acostarme en el suelo?
Comenzo a preguntar nervioso y Sebastian solo se levanto tranquilo para ver la hora en su telefono que quedo en su escritorio. Benjamin no habia prestado atencion antes, pero el cuarto de Sebastian se parecia al suyo, solo que más colorido al tener una pared de su cuarto pintada de morado.
Sebastian: Tengo que esperar a que mi Padre venga en 15 minutos, descansa en mi cama hasta entonces.
Benjamin: No puedo dormir en tu cama, menos aun sabiendo que estaras despierto, hablemos.
Sebastian: ¿Sobre que quieres hablar?
Benjamin: No se... ¿Cuantos años tienes? Yo calculo que 17 como yo, porque eres más grande que yo.
Sebastian: ¿En serio? Jajajaja, tengo 15 años, ahora se que tienes 17.
Benjamin: ¡¿15 Años?!¡¿Que te dieron de comer para ser tan grande?!
Grito en un susurro, sorprendido por la revelación, ya que penso que era de su edad o hasta mayor.
Sebastian: Nada en especial... supongo.
Dijo de manera apagada, provocando la curiosidad de Benjamin, quien decidio que lo mejor era no preguntar cosas muy personales.
Benjamin: ¿Que te gusta? A mi me gusta mucho el Volleyball... aunque nunca me dejaron practicarlo.
Sebastian: Me gusta... el Rugby, me gusta mucho.
Benjamin: Yo tambien miro Rugby, jajaja.
Iban a seguir hablando, pero se escucho la puerta del frente y Sebastian le dijo que se escondiera detras de la puerta por si acaso.
Bautista: ¿Sebastian? ¿Estas despierto bebe?
Sebastian: P-Padre.
Salio de la habitacion y cerro la puerta asustando al Ordiz, que estaba confundido, ya que creyo que tenian una mala relación, pero su Padre le hablo muy cariñoso.
Bautista: Hola querido~ ¿Como has estado?
Sebastian: B-Bien.
Bautista: Vamos, ven a saludar a tu Padre~.
Sebastian: S-S-Si...
Benjamin no supo que hacer al ver al Villena temblando mientras caminaba hacia su Padre, que era casi igual a el, aunque puso sus manos en su boca sorprendido al ver como ambos se besaban introduciendo su lengua en la boca del menor.
Bautista: Estoy algo estresado, Hijo... ¿Me podrias ayudar~?
Dijo apretando el trasero de este que solo estaba callado, hasta que se separo un poco de el.
Sebastian: P-Por favor no... e-estoy muy cansado...
Bautista: Bien, pero sabes que mañana tienes que ayudarme sin excusas.
Dijo tocando un enorme bulto en sus pantalones, Sebastian quedo parado mientras el se iba por una puerta, cuando no se vio más corrio a su habitacion empujando a Benjamin junto a su puerta y se encerro al baño.
Benjamin cerro lentamente la puerta y fue al baño para saber si estaba bien, escuchando la ducha, entro como si nada, viendolo en la ducha, con sus piernas cubriendo su rostro y sus pies cubriendo su entrepierna.
Benjamin se quito la ropa, quedandose en boxers y entro con el, asustandolo, pero lo calmo abrazandolo y diciendole palabras reconfortantes.
El Ordiz noto una gran cantidad de cicatrices en su espalda, contó al menos 10 de gran tamaño, pero no iba a preguntar nada en ese momento, solo se quedo en cuclillas junto a Sebastian que lloraba y respiraba agitado debajo de las gotas de agua que caian a gran velocidad.
Luego de una larga ducha en silencio mutuo, Benjamin se quedo en ella para que Sebastian se pueda cambiar en paz y luego el se secaria y volveria a poner la ropa dada por el castaño.
Ambos estando en silencio, se sentaron en la cama con sus cabellos aun mojados, causando que gotas caigan sobre sus rostros.
Benjamin: ¿Estas bien...?
Pregunto tocando su hombro y este lo miro con mucho nerviosismo, dandose cuenta de que estaba detras de la puerta viendo todo.
Sebastian: Yo...
Benjamin: Esta bien si no quieres decrir nada, no te sientas presionado.
Sebastian: P-Puedo decirtelo... no siento que sea un problema...
Benjamin: Bien, te escucho.
Sebastian: Mis Padres se divorciaron cuando yo tenia 5 años, en ese entonces mi papá tenia mucho poder politico y prohibio a mi Madre verme, ella se suicido no mucho tiempo despues...
Benjamin: Lo siento...
Sebastian: Gracias. A partir de mis 6 años mi Padre comenzo a tocarme por todo mi cuerpo cuando el queria...
Su tono se fue quebrando mientras recordaba cada una de las veces que pidio por favor que no y fue ignorado, Benjamin no sabia que decir, solo sabia que debia ayudarlo de algun modo.
Sebastian: ese mismo año hizo que nuestro saludo sea... el que viste hace un momento. Solo me toco hasta los 10 años, a partir de ese momento me obligo a tener relaciones sexuales con el...
Benjamin: Cuanto lo siento...
Dijo tapando sus ojos con sus manos, notandose las lagrimas gotear de sus mejillas, imaginarse a Sebastian sufrir de esa manera y que fuera la gran persona que es hoy en día, realmente le hace pensar en lo poco que paso el a comparación.
Sebastian: M-Me haras llorar a mi...
Dijo y Benjamin quito sus manos de su rostro viendo la sonrisa de Sebastian junto a sus ojos rojo y lagrimas ya caidas.
Benjamin: Lo siento...
Sebastian: No es nada.
Benjamin: ¿Y-Y como te hiciste esas cicatrices...?
Dijo apuntando a su espalda y Sebastian se puso serio en ese momento, Benjamin se recrimino por preguntar algo que no debia.
Sebastian: Mi Padre me a vendido aproximadamente 14 veces, cada una aun Hombre diferente... desde los 11 no solo fui tomado por mi Padre, sino que Hombres totalmente desconocidos que le pagaban a mi Padre por mi cuerpo...
Ahí Benjami se levanto en silencio y fue del lado del Villena, quien recibio con gusto el gran abrazo que le dio el Chico que conocio hace 2 día y que sabe más de el que cualquiera.
Benjamin: ¿Por que...?
Sebastian: ¿Por que... que?
Benjamin: ¿No odias a los Hombres? ¿Como puedes ser tan buena persona habiendo pasado por tanto...?
Sebastian: A mi Madre le gustaria que fuera alguien que ayude a los demas... no puedo sentir odio por los Hombres, solo por mi Padre y los que me tocaron...
Benjamin: ¿Nunca pensaste en denunciarlo?
Sebastian: Claro... pero el es quien me mantiene... mi trabajo apenas me dá para comprarme algo de ropa al mes... no puedo hacer nada sin el...
Benjamin: Yo te ayudare, mañana ire a mi casa y...
Sebastian: No. Por favor no hagas ninguna locura...
Benjamin: Le pedire a mi abuelo que te ayude, mi Padre no lo haria... menos por mi...