Ser un guarda espaldas, seguramente es una profesión aburrida, sobre todo horas cuando a quien protege, puede cuidarse solo, lo que convierte a tu profesión en una broma de mal gusto, en el que estarás de pie durante siguiendo a alguien sin que nada pase. .
Y aunque es importante que nada le pase a tu empleadores es realmente aburrido, seguir a alguien sin poder hacer o decir nada, solamente permaneciendo de pie detrás de tu jefe.
También entiendo que ser un guarda espaldas no es simplemente seguir a alguien, también es seguir un conjunto estricto de protocolos que se suponen, garantizaran que el individuo a proteger está seguro, y no hay nada que amenace su vida o integridad física o mental en su entorno.
Pero en esta ocasión realmente estoy aburrido por haber tenido que seguir a alguien, pues realmente creía que cuando Tres me pidió que lo acompañara a resolver unos asuntos antes de ir a celebrar, iba a pasar algo divertido.
Que haríamos algunas acciones clandestinas, cobramos tarifas de protección, amenazaríamos a unas cuantas personas y le daríamos una lección a un subordinado que se había vuelto rebelde y deseaba la posición de su antiguo jefe.
Pero en esta ocasión esto no paso, solo fue un tour por el bajo mundo, durante el cual conocimos lugares clandestinos y vimos a Tres saludando, charlando, inspeccionando instalaciones y negociando de forma civilizada con otras organizaciones.
Algo que no debería sorprenderme que son un ejemplo de libro de texto de lo que es el crimen organizado, lo cual es casi como cualquier negocio, pero se dedican a realizar actividades más cuestionables, y principalmente actuando por ganancias y beneficios.
Lo que hace que estas organizaciones sean algo casi imposible de tratar para las fuerzas de la ley, pues están organizados de tal forma que ningún crimen se comete por capricho o por impulso, y cuando se comete uno hay toda una comunidad que se coordina para hacer parecer que nada paso y que jamás se encontrarán pruebas.
Esto muchas veces es lo que diferencia a la mafia de las simples pandillas, y es que están organizadas de una forma extremadamente eficiente, y aunque se sepa que son los culpables casi siempre pueden caminar libres, ya que es imposible conseguir pruebas para arrestarlos, además de que usan la violencia de forma selectiva, prefiriendo recurrir a contratos, estafas y tratos bajo la mesa.
***
– en fin realmente no sé por qué tuve que acompañarte, pudiste haber hecho todo esto solo, pero insististe en arrastrarnos a lo que en esencia fue un paseo demasiado largo y aburrido.
Realmente no es algo tan significativo, pero realmente quiero quejarme por ser un simple espectador, que lo siguió mientras él presumía, abusaba verbalmente de varas personas o se le insinuaba sexualmente a cualquiera que considerara atractivo.
Y aunque fue divertido y bastante interesante al principio, la verdad todo se volvió aburrido después de la sexta ocasión, pues básicamente estábamos siguiendo a Tres mientras él hacía su trabajo, después de haber estado trabajando de forma remota durante el último año.
— no tienes que estar tan molesto, después de todo solo eras un invitado y aunque quisiera no podría involucrarte mis asuntos.
Ya lo sabía, de hecho Tres ya estaba yendo demasiado lejos al permitirnos acompañarlo durante casi todo el día, pues con solo acompañarlo, ahora sabemos la identidad de muchos miembros de la mafia, sus pociones y la ubicación de varias bases importantes.
— por ahora solo olvídate de tus problemas y disfruta del momento.
Tres nos insta a beber y disfrutar de su fiesta de regreso.
Aunque él desde hace mucho Tres sabe que yo no bebo ninguna forma de bebida alcohólica, no fumo ni tengo ninguna forma de vicio.
Algo que hay en abundancia en este lugar, pues es bastante obvio que en un bar la mayoría de personas están bebiendo, pero también tiene su segunda zona de fumadores en el piso, que es bastante grande y visible gracias al diseño abierto del lugar, y De hecho estoy seguro de que en algún sitio de este bar hay un sitio donde se están consumiendo sustancias prohibidas.
Volviendo al tema, la razón por la que solo estoy bebiendo una limonada, mientras todos a mi alrededor consumen bebidas alcohólicas, es debido a mis propias habilidades, las cuales solo funcionan correctamente cuando estoy en pleno uso de mis facultades mentales.
— si Kaden, relájate y disfruta un poco del momento, deja de sentarte en una esquina esperando con esa cara de aburrimiento, mientras esperas desaparecer en el aire para no tener que interactuar con los desconocidos.
Mientras Anna intenta forzarme a interactuar con los desconocidos que son considerados los viejos amigos de Tres, con los que estoy seguro, no tengo nada en común, pero que de alguna forma ahora también son amigos de Anna, yo tan solo quisiera estar en un lugar más tranquilo.
— no estoy evitando a nadie, solo estoy un poco cansado, dame unos minutos y eventualmente volveré a ser mi encantador yo y será el alma de la fiesta.
Intento parecer seguro y alegre mientras le respondo a Anna, la cual en algún momento volvió a estar sentada junto a mí.
— no recuerdo que hayas sido el ama de la fiesta en algún momento.
— …
Sé que es verdad, pero seguro está mal recordarle a un amigo su triste realidad.
Y aun así, su afirmación no es del todo cierto.
Pues si mal no recuerdo al principio de la fiesta todos estábamos en la misma mesa, y por lo menos me tomé la molestia de ser cortes, saludar y charlar con personas cuya existencia no me interesa y con las cuales jamás tendré una relación cercana y tampoco tendrán un impacto significativo en mi vida, pero a mitad de la fiesta Anna se fue por su cuenta con unos nuevos amigos que consiguió y estuvo socializando al otro lado del bar, dejándonos a Tres ya mí solos.
Lo que terminó cuando los conocidos de Tres empezaron a rodearlo, y lo que al principio era un pequeño grupo de amigos cercanos el cual podía tolerar, se convirtió en una multitud demasiado grande, como para que me interese socializar, pues estoy seguro de que con Tantas personas, sería imposible conocerlos adecuadamente, y solo terminaría con un montón de conocidos, con los que solo actuaríamos de forma hipócrita fin, y yo de forma silenciosa decidí marcharme, ya que no estaba del todo cómodo en esa situación.
Pero con la llegada de la media noche el grupo empezó a reunirse nuevamente, pero esta vez estaban invadiendo la pequeña esquina, donde estaba tranquilamente evitando el caos mientras disfrutaba observarlo sin involucrarme.
Lo que nos llevó al principio de la conversación, que comenzó con Tres presumiendo de su trabajo, y de que era una especie de viaje de placer dónde podía hacer lo que quisiera cuando quisiera, a cambio de una mínima de trabajo, que se resume. en socializar y mantener una buena relación con sus compañeros.
A lo cual yo terminé quejándome de que eso era realmente aburrido, lo que desembocó en una conversación ida y vuelta entre los dos, y mientras la charla continua al grupo empezó a reunirse a nuestro al rededor, Y el comienzo de esto estuvo marcado por el regreso de Anna.
***
En fin esa situación fue demasiado molesta para alguien como yo, así que estuve obligado a seguir la corriente por un tiempo, antes de decir salir a tomar un poco de aire a la terraza, que en esta época del año está vacía, pues aunque aún no ha comenzado a nevar el frío del invierno ya llegó y se hace notar con fuerza, por lo cual casi nadie elige estar en una terraza es puesta a esta hora y con este clima ventoso que empeora la sensación de frío.
Pero realmente se siente bien estar tranquilo, alejado del caos, el cual es interesante de ver, pero es una molestia cuando tú eres el sentido de ese caos.
Y este ambiente despejado en el cual no hay nadie al rededor y lo único que se escucha es el sonido apagado de gente celebrando en el piso inferior, algo bastante interesante, pues este lugar se encuentra en una zona rosa, por lo cual no debería haber Hay mucho problema con el ruido, pero estoy en la azotea del lugar en cuestión apenas y puedo escuchar la actitud que hay dentro del sitio.
Por cierto, una zona rosa suele ser una zona de la ciudad donde se concentran una gran cantidad de bares, clubes, restaurantes, sex shops y todo tipo de sitios de entretenimiento nocturno, en resumen son una zona de la ciudad dedicada a la vida nocturna.
— en este tipo de situaciones realmente quisiera poder fumar.
Suspiro ante lo extraña que ha llegado a ser mi vida.
– pues se supone que es una especie de estereotipo, que alguien que se va de una fiesta a tomar aire, decide ponerse a fumar mientras piensa en su vida.
Sé que parece que estoy hablando solo, pero estoy bastante seguro de que alguien me siguió hasta este lugar.
— no lo cree Anna, pero por alguna razón yo solo estoy pensando en cosas aleatorias y no siquiera estoy fumando.
— podrías hacer eso último si quisieras.
Anna responde mientras intenta ofrecerme uno de sus cigarros.
Lo que aún me sigue pareciendo extraño, aunque según ella, ella ha fumado desde hace mucho, casi desde antes de ser mayor de edad.
Aunque afirma no ser adicta a fumar como la mayoría, algo en lo que elijo creerle, pues desde que regresa esta es la segunda vez que la veo tocar un cigarro.
Para mí lo que realmente tiene ella es un problema con el alcohol, aunque hasta donde vi lo tiene bajo control, pues su estilo de vida no se ve afectado por beber demasiado, además de que aparentemente intenta no beber hasta perder el control de sí misma.
Pero talvez debería dejar de pensar estupideces, volver a prestar atención a nuestra conversación y de paso responder a su oferta.
— no gracias, sabes que prefiero no consumir algo relacionado con una de las peores enfermedades conocidas por la humanidad.
Respondo con un tono un tanto alegre, burlándome de cierto producto.
— no te hagas el gracioso Kaden, ambos sabemos, que desde hace años existen tratamientos para el cáncer, así que eso no debería impedirte fumar uno.
Oh, sí, el proverbial tratamiento para el cáncer, algo que se implementó hace año, pero que no fue pensado para eso en un principio.
Si mal no recuerdo se descubrieron varios métodos para lidiar con la radiación, pero de forma estúpida fue usado durante bastante tiempo con multas militares, y no fue hasta casi una década después de su descubrimiento, que se les ocurrió usar dicho método para hacer que la quimio terapia no deje medio muertos a los pacientes.
Lo cual eventualmente permitió tratar el cáncer casi sin ninguna consecuencia, y apoyándose en dichas investigaciones se crearon formas de tratar con el cáncer maligno, que supuestamente era inevitable, ya que siempre regresaba.
Creo que quien dirigió esa investigación se ganó un premio nivel en medicina el año en que comprobó que su tratamiento no solo era efectivo, sino que era una especie de cura definitiva para la enfermedad.
Así que actualmente morir de cáncer es una cuestión de dinero y de mala suerte, pues se pueden decir muchas cosas buenas del tratamiento pero una de ellas no es que sea barato o accesible, además de que la enfermedad puede matar al paciente antes de que lo diagnosticar.
Pero incluso hoy en día muchas personas mueren por esta enfermedad.
Creo que ciertamente debo dejar de distraerme, algún día alguien terminará notando que no les estoy prestando atención, por más rápido que sean mis pensamientos.
— en eso tienes razón, solo te estaba molestando con lo de la enfermedad, lo que molesta es que ese tipo de cosa, nublan mi mente y realmente se siente incómodo tener la mente nublada.
Creo que ya es hora de explicarle esto a Anna, ya que es una molestia intentar mantener esto oculto, y es mejor que ella sepa en qué se está involucrando si sigue a nuestro lado.
— siempre he sabido que eres abstemio, pero nunca te tomaste la molestia de explicarte, pues no parece que este muy en contra de la bebida o que te disguste, ya que no te molestan mucho las fiestas ni que beban a tu alrededores.
Bueno, creo que no existe mejor momento que el ahora parara explicar estás cosas.
— Anna, sabes que Tres y yo tenis un vínculo bastante especial.
— tranquilo, si estás a punto de confesar tu relación homosexual, no tienes que preocuparte porque ya la noté desde hace mucho.
Me quedo mirando a Anna como si esperase que lo que acaba de decir fuera una broma.
— ….
— ….
Tras un intercambio de miradas estoy seguro de que ella está diciendo eso en serio.
—qué carajo, no, definitivamente no es eso.…
Maldición, Anna ya deja de mirarme con esa cara de sospecha e incredulidad.
— no es eso definitivamente, la razón por la que solo tan cercanos es porque somos el mismo tipo persona, pues ya deberías haber notado que Tres ex alguien bastante especial a su manera y que cuando regresa con cierta confianza de que podía lidiar con toda un criminal rojo.
— no diría que es muy especial, pero seguro que es alguien cuánto menos interesante, y en cuanto a tu confianza realmente estaba esperando que me lo contarás por tu cuenta.
Oigo como Anna responde como si esperara esta conversación desde hace un tiempo.
Y ya que es así, solo me queda continuar.
— sabes, estaba planeando contarte la verdad y luego ver cómo debería seguir, pero ahora creo que sería mejor mostrártelo directamente.
Con eso, dicho y antes de que ella reaccione, el abrazo desde la espalda.
— ¿cómo?
Anna pregunta con un evidente tono de consternación y sorpresa.
Pues hace un instante estábamos hablando frente a frente y en el siguiente momento yo estaba en su espalda sin que ella pudiera reaccionar, aunque estábamos frente a frente sí que nada obstaculizara su vista.
— a esto es a lo que me refiero, tanto tres como yo somos como decirlo especiales.
Me tomo un momento para respirar, pera poder hacer correctamente lo siguiente, para que no queden dudas al final esto.
— Ahora estás y ahora ya no estas.
Murmuró para mí mismo, mientras pienso en el lugar al cual quiero llegar, donde quiero estar en este momento pero sin tener que viajar.
— ….
— ….
Y cuando recupero la vista estoy en lugar completamente distinto, con Anna aún entre mis brazos, mirándome con aún más sorpresa que antes.
Para ser exactos estamos en el techo de un edificio cercano al bar, en el cual previamente comprobé que no había cámaras.
—Creo que eso será suficiente prueba.
Mientras digo esas palabras, sujeto con fuerza a Anna y pienso en regresar al lugar en la terraza en el que estábamos al principio.
— ¿Entiendes qué piensas?
Le pregunto a Anna, mientras espero que reaccioné, pues ha estado callada y sumida en sus pensamientos desde que regresamos.
— dame un momento, déjame ver si entiendo correctamente esta situación, tu tienes superpoderes, y tu eres alguien capaz de teletransportarse o moverte muy rápido, y por lo que dijiste Tres también es como tu…
Anna habla con el tono, de alguien que aún no a procesado completamente lo que acaba de descubrir, pues estoy seguro de que no todos los días descubres que algo que solo pertenece a la fantasía pertenece a tu realidad.
— más o menos sí, pero las habilidades de Tres son muy diferentes a las mías, y la razón por la que te estoy contando esto es para que puedas decir si realmente quieres involucrarte en esto, sabiendo realmente en lo que te estás metiendo.