Realmente no esperaba esto, pero en este momento me siento entumecido. He estado de pie de forma espeluznante frente a su casa, por más tiempo del que me gustaría admitir. Al principio creía que llegaría de forma normal, tocaría la puerta, saludaría, vería su cara sorprendida y recibiría un cálido abrazo dándome la bienvenida, y tras unas cuantas formalidades empezaríamos a hablar sobre el pasado.
Pero en cuanto me bajé del taxi, las dudas que creí que había callado volvieron, y entonces todas las dudas y el miedo volvieron de golpe, en cuanto estuve de pie frente a la casa, pero lo que realmente me resulta divertido es que en algún punto de mi vida creí que ya me había deshecho de esta falla, esta estúpida debilidad que hace que dude y me paralice en momentos de crisis.
y hasta cierto punto, creo que ese problema desapareció, después de todo fui un soldado durante años, se lo que es estar al borde de la muerte, con tu cuerpo enfriándose, cuando sientes que es muy probable que mueras, que esta vez no vas a poder escaparte, y a tu mente solo vuelven los pensamientos de todo aquello que no hicistes o dijistes, se lo que es haber matado a otro ser humano sabiendo que aunque enemigos probablemente estaba acabando con hijo hermano o padre, causando las lágrimas de toda una familia, después de todo todos son buenos después de su muerte.,se lo que es perder amigos, compañeros, personas por las cuales habría dado mi vida, tan solo para perderlas de forma intespectiva sin que pudiera hacer nada para evitarlo.
Lo que me condujo a pensar que había superado este fallo en mi naturaleza, pero en cuanto estuve ante la puerta, supe que algo estaba mal, algo se sentía fuera de lugar. Toda la confianza que pensé que tenía se desvaneció en el aire, dejándome solo con las dudas que creí haber controlado, solo para descubrir que ahora son las dudas las que me controlan.
Maldición, solo son unos pasos, solo es llamar a la puerta y hablar con una persona, no es tan aterrador.
"Entonces, ¿por carajos sigues dudando? ¿Por qué te quedas paralizado como un idiota? Solo son un par de pasos y hablar".
Maldigo para mí mismo de forma silenciosa, en un intento de recuperar el valor que creí que tenía cuando llegué a este lugar, creyendo que sería fácil volver como si nada cuando en el pasado huí como un cobarde, para no enfrentar este tipo de situaciones.
*Uuuuuf*, respira, solo respira, deja de pensar y solo actúa; no arreglas nada quedándote aquí parado.
Mientras intento calmarme, aprieto fuertemente los puños mientras camino lentamente hacia la puerta, con las piernas entumecidas por el miedo y ansiosas por sacarme corriendo de este lugar, pero hago todo lo posible para ignorar aquel sentimiento, y al estar a unos centímetros de la puerta, tomo la pequeña aldaba y llamo a la puerta.
*toc* *toc*, *toc*, *toc*.
El sonido de los golpes rompe el silencio ensordecedor, que se extiende por toda la calle, que parece completamente desierta, pero aun así no escucho ninguna reacción en la casa.
"Quizás esté durmiendo, quizás debería dar una vuelta por la zona y volver más tarde".
Mientras intento encontrar una excusa para mi cobardía e intento escapar de este lugar, mientras intento darme la vuelta para seguir con mi plan, en una esquina de mi visión noto cómo la puerta se abre lentamente, como si el dueño de la casa supiera que quien tocaba a su puerta es un conocido.
Con la puerta abierta de par en par, puedo ver, con su cabello largo y ondulado, en un estado desordenado, mirándome fijamente como si hubiese visto un fantasma, mientras los primeros rayos de sol de la mañana iluminaban su rostro cansado, pero ya que ella ya está aquí, no tengo más opción que hablar.
Hey, ha pasado un tiempo, ¿cómo has…?
*¡Pum!*
*¡Argh!*
Carajo, no me esperaba eso; habría esperado una bofetada, gritos o algunos insultos por aparecer de la nada en su vida después de haberme marchado de forma caprichosa sin dar explicaciones y años de fingir que todo seguía siendo normal entre nosotros, pero realmente no esperaba un golpe directo a mi rostro, y tengo que admitir que es capaz de dar un muy buen derechazo.
Supongo que me lo merezco un poco, pero por el hecho de que solo fue un golpe, supongo que sí soy bienvenido.
Mientras hablo, estoy casi seguro de que la vi apretando los puños, suspirando con exasperación, pero ignoraremos eso, porque sé que en el fondo está feliz de verme; de lo contrario, me habría dado una paliza por actuar como un cretino.
Kaden, maldito idiota, sabes que solo sigue; hablaremos adentro, es demasiado temprano para que tengamos una pelea en la calle.
Mientras pienso que solo ella fue la que atacó, y probablemente esperaba una pelea, elijo seguir silenciosamente al interior de su casa, cuya decoración ha cambiado bastante desde la última vez que estuve aquí.
Finalmente nos detenemos en la cocina de la casa. Mientras yo me quedo sentado, ella se dirige hacia una cafetera y empieza a prepararse un café, aunque mientras lo preparaba, me ofreció uno y lo rechacé.
Pues siempre recordaré que desde que la conozco ella tiene un grave problema con su café y el azúcar, pues siempre hace su café demasiado dulce, y la verdad dudo que su gusto por el café haya cambiado durante los años de nuestro distanciamiento.
Mientras escucho el sonido amortiguado de sus pantuflas acercándose a mí con su café en una taza con dibujos incomprensibles de una banda de pop, pienso que aquella taza probablemente fue un regalo de algún conocido,ya que ella no solía hablar mucho de sus gustos musicales, por lo cual el regalo debió dárselo alguien que la conociera lo suficiente, o quizás su personalidad ha cambiado en este periodo de tiempo y fue un regalo de un casual o ella la compró para sí misma.
Mientras pienso sobre el origen de una taza de café, ella se sienta frente a mí, al otro lado de la barra, y me observa con una mirada tranquila, casi escrutadora, como si intentara averiguar por qué estoy aquí, con tan solo mirarme fijamente, o tal vez solo pretende que me sienta incómodo con su mirada y lo explique por mi cuenta, pero si elijo hablar, ¿cómo explico?, ¿cuánto digo? o ¿con qué parte empiezo?
Mientras yo caía en la incertidumbre de comenzar una conversación, es ella la que decide hablar primero.
Entonces, Kaden, bienvenido de regreso; siempre es bueno cuando un amigo como tú regresa a nuestras vidas.
Es fácil notar que se está tomando un momento para respirar y pensar qué es lo próximo que debe decir, pues aunque fuimos cercanos, no hemos hablado frente a frente en un muy largo tiempo, y es obvio que ninguno de nosotros es el mismo tipo de persona que fuimos hace años.
por lo cual es probable que esté evaluando subconscientemente nuestro tipo de relación, pues aunque fuimos inseparables hace años, el tiempo ha cambiado muchas cosas y la distancia no ha ayudado en esto, por lo cual hay una sensación de incongruencia de cómo deberíamos comportarnos entre nosotros.
como las mismas personas que éramos hace años, como conocidos cordiales o como amigos distantes que pueden salir y divertirse entre ellos, pero jamás serán confidentes.
Pero la verdad es que esa pregunta es inútil, pues desde el momento en que la tuve en frente lo supe, que aunque ya no somos las mismas personas que fuimos hace años, nuestra relación sigue siendo casi la misma que tuvimos hace años, aunque sea difícil de procesar para ella.
Lo supe desde el momento que lanzó ese derechazo hacia mi rostro y lo confirmé con aquel suspiro de exasperación, pues ella siempre fue así, como una hermana mayor que nunca tuve, la cual se molestaba y se ponía violenta cuando hacía alguna estupidez, pero después de algunos suspiros y murmullos me perdonaría y me ayudaría a solucionar el problema en el cual me involucré.
Y aunque pasó tanto tiempo, su reacción fue básicamente la misma que tenía hace años cuando yo hacía algo estúpido y empeoraba el problema al intentar arreglarlo por mi cuenta, y al final tenía que pedirle ayuda para solucionarlo, y aunque no siempre hubo una buena solución o resultado final, al final del día podía contar con ella, pues siempre intentó velar por mi bien, intentando que no cometiera tantas estupices.
Entonces, Kaden, dime qué pasó y por qué estas aquí, porque después de tanto tiempo y de que no te hubiera golpeado y echado, creo que merezco una explicación.
Mientras la escucho interrogarme, no puedo evitar pensar que la dinámica de nuestra relación es bastante extraña, pues ella se comporta como si fuera alguien mayor que yo, pero nuestra diferencia de edad es de apenas un año y unos meses. Ella se comporta como si yo fuera una especie de niño problemático, al que tiene que vigilar para que no se lastime a sí mismo o a otras personas.
*Uuuuuf* , está bien, pero promete que no te enojarás.
Digo con voz baja, porque estoy casi seguro de que ella se enojará y mucho después de que le cuente mis razones y justificaciones para todo lo que hice y no hice.
No puedo prometer nada, pero te daré el beneficio de la duda.
Ella responde con el tono más calmado que le he oído en todo este día, aunque no hemos hablado mucho.
¿Entonces por qué parte quieres que empiece? ¿Y qué parte quieres que te cuente primero?
Creo que ya es momento de hablar de este tema aparentemente tabú, y qué mejor que hablarlo con alguien en quien siento que puedo confiar.
Empieza por el principio, por qué te largaste sin dar explicaciones, y decidiste joder a tantas personas en tu vida mientras te largabas, y si es posible, dame una versión corta.
bueno, eso lo hace mucho más simple, solo que tengo que contar las cosas en el orden en que sucedieron y como las recuerdo.
Antes de empezar, ¿me podrías dar un poco de té? Recuerdo que siempre tenías un poco para tus visitantes.
Mientras ella se movía hacia los cajones de su cocina en busca del té, yo intenté calmarme, para ser lo más coherente posible con lo que estoy a punto de explicar.
No quiero admitirlo, pero estoy más nervioso de lo que esperaba, pero creo que todo está bajo control. Después de todo, sabía que cuando volviera tendría que dar muchas explicaciones, por lo cual estoy preparado para esto.
Aunque estar preparado no lo hace más fácil, pues sigo pensando que pasará lo mismo, cuando se lo dije a otras personas y nuestras relaciones se acaban rompiendo, y muy en el fondo tengo miedo de que ella sea igual que todos los demás, que no entienda, que me critique, me odie y me abandone después de que le cuente la verdad.
Y aunque he pensado en maquillar un poco la verdad, para que no me vea de mala manera, la realidad es que sé que ella se daría cuenta si le miento, y aunque no fuera así, realmente no quiero mentirle. Quiero que ella me escuche, que escuche mi versión de la historia, y decida si realmente quiere que esté presente en su vida, porque siento que ella es una de las pocas personas que podría aceptarse después de todo lo que he hecho,y aunque sé que algo se rompería en mí si ella me rechaza, no quiero negarle la opción de elegir.
Pero realmente tengo que recordarme a mí mismo que no estoy aquí en busca de un final feliz o arreglar mi pasado; lo único que espero es hacer las paces con mi pasado. Simplemente quiero finalmente estar en paz conmigo mismo después de tanto tiempo, pues desde hace mucho he estado atormentado por fantasmas del pasado, que constantemente me recuerdan que nunca solucioné mis problemas y simplemente escapé de mis problemas y mi pasado, y por eso estoy aquí, para demostrarme a mí mismo que no le temo a mi pasado y recuperar la paz que perdí hace tanto tiempo.
Mientras me intento armar de valor, Anna finalmente regresa de la cocina con el té, el cual me entrega, y después de soplarlo para enfriarlo un poco, tomo un sorbo y me dispongo a comenzar mi narración.
Recuerdas hace 6 años cuando mi padre aún estaba vivo, antes de que todo colapsara.
Con eso comienza una historia llena de dolor y rencores, una historia que marcó el pasado y el de muchas personas, pero que aun así jamás pensé volver a contarla; después de todo, esta historia fue el final de la forma de vida que siempre había conocido.
Mientras la narración comienza, mi mente regresa a aquel momento antes de que todo cambiara, antes de que los hipócritas se quitaran sus máscaras de amabilidad y amistad para mostrar sus repugnantes rostros llenos de engaños y traición.