CAPÍTULO 5- Últimos días de vacaciones.
(Pov- Saik.)
Han pasado casi dos meses desde que comencé a vivir con Yuki, y debo aceptar que lo estoy disfrutando más de lo que creí.
Mis padres ya no están más conmigo, y posiblemente nunca vuelva a verlos, ni siquiera en el otro mundo. Mantengo la esperanza de irme al paraíso, pero cargo conmigo muchísimos pecados. Ser capaz de verlos, solo dependerá de la voluntad de Dios.
Es por eso que trataré de disfrutar de mi vida lo más que pueda.
—¡Ahhhhhhhh! ¡Estaba a punto de ganar! ¡No es justo!
—La vida no es justa, mi pequeña perdedora.
—¡Exijo la revancha!
—Está bien, vayamos por tu derrota número 35 del día.
—¡¿Las estás contando?! ¡Eres un maldito!
Yuki sonrió e infló el pecho con orgullo, o fingiendo orgullo, mientras yo ponía de nuevo una nueva partida, en este juego de carreras.
Tener dinero me permitió darme muchos lujos. Bueno, "lujos" es una manera de decirlo. Como antes mi familia era millonaria, estos lujos eran normales para mí, así que no los considero tan lujosos por haber crecido con este estilo de vida. Pero ahora que mi dinero es muy limitado, creo que ahora sí son lujos.
Varias consolas de videojuegos, videojuegos en sus cajas en lugar de digitales (por colección), muchas figuras de anime que Yuki me pidió, pues yo no consumo anime, mangas (de Yuki), novelas (mías), televisión gigante y una mesa para jugar ping-pong.
Yuki es una otaku y yo soy más estilo gamer y adicto a la lectura. Mis padres me educaron con el hábito de leer un libro al mes si quería recibir regalos sorpresas, y comencé a leer un libro cada semana, para recibir 4 regalos al mes. Me gustó tanto leer que simplemente se volvió una adicción.
Me encantan las novelas de misterio, y odio las novelas de fantasía. No lo sé, me parecen algo repetitivas, aunque acepto que algunas me gustan, las que son de comedia principalmente.
—Fufu. Plebeyo, tuviste suerte de que la gran y hermosa Yuki tuviera compasión de ti y te permitiera ganar, ¡pero esa compasión acaba de terminar! ¡Prepárate para perder, mortal! ¡Muahahahaha!- Dijo, con una risa diabólica al final.
—¿A poco te dejaste vencer 34 veces? Que humildad, señorita.
—¡P-por supuesto que sí, y te lo voy a demostrar!
—Ya veremos.
El juego comenzó.
Ah, sí, admito que esta clase de cosas las disfruto bastante.
Me la paso leyendo y estudiando todo el tiempo, mientras Yuki juega videojuegos o ve la televisión. Tener un tiempo libre para disfrutar de una tarde, jugando videojuegos con Yuki, es bastante relajante y divertido.
Me preocuparía por ser detectado por alguna clase de tecnología, dándose cuenta de que alguien juega conmigo, a pesar de estar solo en casa, pero gracias a algunos contactos que conseguí en el pasado, puedo usar mi computadora, consolas y teléfono sin miedo alguno. Hasta me di el lujo de comprarle un teléfono propio a Yuki, con la única condición de que no use redes sociales, o al menos no crearse alguna cuenta. Eso sí sería sospechoso.
Ah, bueno, estoy a punto de ganar. Primer lugar. Creo que la humilde Yuki sigue igual de humilde, ¿eh?
—¡Uwaaaah! ¡¿Qué es eso?!
¿Eh?
Yuki apuntó algo a mi lado derecho. ¿Un fantasma? Que raro, no sentí su presencia.
Volteé a mi derecha. No veo nada. ¿Se habrá ocultado?
—¿Qué viste, Yuki? Describe al fantasma.
—¡Hahahahahaha! ¡Gané!
¿Qué?
Ah, ganó la carrera. ¿Acaso fui engañado por Yuki?
—Fufu. Lo sé, lo sé, soy genial. Puedes arrodillarte ante mí y besarme los pies, plebeyo.
—Se dice "lamerme los zapatos". Besar los pies se convierte en algo sexual y erótico, en lugar de algo humillante. Los plebeyos son humillados, Yuki.
—¡Entonces lame mis zapatos, plebeyo! ¡Hahahahahaha!
—Estás descalza, y prefiero no hacerlo, no tengo ese fetiche, mucho menos hacerlo con una niña pequeña.
—¡N-no te lo tomes tan literal, idiota! ¡Es una frase para humillar al perdedor, en este caso, tú! ¡Hahahahahaha!
—¿Y ganar haciendo trampa es motivo de celebración?
—Fufu. No, no, no. Saik, que inocente eres. No importa el método, ¡solo importan los resultados! Eso te pasa por distraerte tan fácilmente! ¡Hahahahahaha!
—Ah, ya veo. Ganar sin importar el método. Sí, estoy de acuerdo con eso. 1-34. De todas maneras, voy ganando. Buena suerte logrando superarme.
—¿N-no me regalas 33 de tus victorias? Porfis.- Dijo, acostada en el sofá, en una posición que me recuerda a los perros cuando quieren que le acaricien la barriga.
Vaya, vaya. Que adorable, pero no caeré en ese truco.
—¿Intentando manipularme? ¿Te aprovechas de que eres adorable? Que malvada eres, Yuki.
—Si me acaricias, lo tomaré como un sí.
Juntó sus dedos índices y... ¿sus ojos se pusieron llorosos?
—Hazlo por tu hermanita, hermano mayor. No seas cruel.
Que gran actriz eres, Yuki. Creo que tu madre era una clase de espía o agente secreto. ¿Ella te enseñó a usar tu encanto para manipular a las personas?
Yuki, acostada en el sofá, en una posición de perrito queriendo que le acaricien la barriga, mientras junta sus dedos índices y me mira a los ojos con sus ojos llorosos de cachorro triste.
No, Saik, soporta, debes soportarlo. Te costó mucho esfuerzo ganarte esas victorias, no puedes regalarlas.
Eres mucho más fuerte que ella. Resiste a sus encantos. Vamos, confía en ti. Solo resiste. Cree en tu fuerza de voluntad.
—¡¡Sí, gané!!- Gritó Yuki, ¿festejando?
¿Por qué festeja...? Ah, mi mano le está acariciando la cabeza.
Mano traicionera.
Le estoy acariciando la cabeza, pues mi cuerpo me desobedeció y actuó por puro instinto, un instinto de querer acariciar algo adorable.
Es como encontrarse con un pequeño perrito en la calle, que salta alrededor de ti. Es imposible no detenerse y acariciarlo.
Yuki es como un pequeño perrito, y lo comparo con un perrito porque Yuki prefiere a los perros que a los gatos.
Le iba a comprar un perro, pero mejor después, cuando aprenda más sobre ellos y sepa cómo cuidarlos.
Pero, dejando eso de lado, Yuki es increíble. Logró que mi cuerpo no me obedezca y le acaricié la cabeza, logrando manipularme a su antojo usando lo adorable que es. Que poder tan aterrador posees, Yuki.
—Sí, sí, ganaste. Tienes suerte de ser adorable.
Me apretó la nariz con los dedos de su pie derecho.
—Fufu. Dilo de nuevo, perdedor.
—Eres adorable, Yuki. ¿Feliz?- Dije, con mi voz diferente, pues Yuki me tapó la nariz con los dedos de sus pies.
—Lo sé, lo sé, no hace falta que me adules tanto, perdedor. ¡Hahahahahaha!
—Pero tú fuiste la que me dijo que lo dijera de nuevo.
—¿Es por eso o porque tu corazón quería decirlo de nuevo? Sé honesto conmigo, Saik, no muerdo.- Dijo, guiñando un ojo.
Realmente a veces no entiendo el comportamiento de Yuki.
Ella se levantó del sofá y me acarició la cabeza.
—Lo siento, debo rechazar tus sentimientos hacia mí, eres demasiado frío. Regresa con una sonrisa en tu rostro y lo pensaré.
—¿Eh? ¿Acabo de ser rechazado sin haberte pedido nada? Te estás comportando más raro de lo usual, Yuki. ¿Te sientes bien?
—¡Es un chiste, Saik, un chiste! ¿En serio no sabes diferenciar los chistes y el sarcasmo, de lo real?
—Ah, un chiste... ¿Las personas normales dicen chistes?
—Por supuesto que sí. ¿Acaso nunca has dicho ninguno?
—Ya veo... Gracias por la información, Yuki.
Chistes, ¿eh? Me pregunto si soy capaz de decir un chiste gracioso.
—Bueno, iré a bañarme. Mira lo cansada y sudorosa que estoy después de humillarte tanto. Uffffff. Necesito un buen baño.
—Está bien.
Ella se fue al baño y yo me acosté en el sofá.
Veamos... Las personas normales dicen chistes. Anotado. ¿En qué contexto debo decir los chistes? Supongo que lo averiguaré con pruebas y errores.
Ser una persona normal es muy difícil, más de lo que me imaginé. ¿Seré capaz de lograrlo? Espero que sí.
... Me acaricio la nariz.
Sentir los pequeños dedos de Yuki en mi nariz, me recordó a alguien, pero ¿a quién? No a mis padres, me recordó a una pequeña niña que conocí en el pasado, pero no recuerdo su nombre ni su rostro.
Que extraño... ¿Hana? Sí, creo que su nombre era Hana... Creo... Ah, como sea, si no la recuerdo, no debió de ser tan importante para mí.
Ah... Bueno, una pequeña siesta no me vendría nada mal.
•
•
(Pov- Yuki.)
Dejé mi ropa en el suelo. Después de todo, ¡es ropa fantasmal, no puede mojarse ni ensuciarse! ¡Hahahahahaha! Ser un fantasma tiene sus ventajas, aunque...
—Uffffff. Que frío hace.
Ser un fantasma que parece estar viva, tiene desventajas como esta, de sentir frío.
Cuando era un fantasma normal, antes de conocer a Saik, siempre sentía la misma temperatura, nunca sentí ni mucho frío ni mucho calor.
—Pero al menos el frío me hace sentir viva.
Ay...
Me miré en el espejo y me acaricié el pecho.
Tan plano. ¡Hasta Saik tiene pechos más grandes que yo! Bueno, pectorales, ¡pero son más grandes que los míos!
Ojalá los fantasmas pudiéramos crecer, o al menos controlar nuestra apariencia.
Ser una pequeña niña es tan incómodo, pero no puedo hacer nada.
Ay, mi trasero también es tan pequeño. Mis pies, mis manos, mi... Cof, cof. Todo es tan pequeño.
Creo que ahora que entré en contacto con otras chicas de mi edad, me di cuenta de lo mucho que perdí desde que morí. Entre las chicas que espié en la escuela, me encontré con algunas que iban en mi primaria. ¡Y todas ellas tenían muslos grandes, pechos grandes y un trasero...! Bueno, no tan grandes, ¡pero más grandes que el mío sí!
No puedo evitar sentirme tan inferior e insignificante en comparación a ellas, pues crecí con una madre mega ultra super mega sexy. Y hasta le agregué dos "mega", porque sí, ¡mi madre era tan sexy! La llamaban: La princesa de las nieves, por su elegancia y belleza. Oh, y por nuestro cabello, pestañas y cejas blancas. Bueno, el suyo, pero como yo heredé su apariencia, fufu, ese apodo también era para mí.
Yuki, en algunos países significa "nieve", así como también es el nombre del espíritu de la nieve. Un nombre perfecto para mí, una chica que estaba destinada a ser la futura princesa de las nieves.
Siempre soñé con llegar a ser igual a mi madre, madura, inteligente, hermosa y sexy. Ella podía hacer que los hombres hagan lo que ella quería, usando sus encantos. Fufu. Hasta recuerdo que una vez, un hombre nos pagó las compras de todo un mes, y el único pago que recibió de mi madre, fue un beso en la mejilla, y eso era más que suficiente para hacerlo feliz.
Me pregunto si yo fui producto de una violación. Digo, mi madre solo veía a los hombres como objetos, nunca la vi enamorada de un hombre, y cuando le preguntaba sobre mi padre, cambiaba de tema, nunca me habló sobre él.
¿Acaso seré la hija de un famoso líder de un grupo criminal? ¡Si es así, exijo mi parte del negocio! ¡Reuniré un escuadrón y sacaré a mi madre de la cárcel a la fuerza!
O eso haría, si no tuviera moral. ¡Tienen suerte de que sea una chica buena y hermosa!
—Me pregunto si habrá alguna manera de crecer, aunque sea un fantasma.
Abrí la llave de la bañera. ¡Kya! ¡Caliente, caliente!
D-debo ponerle más agua fría.
... Bien... ¡Perfecta!
Me metí a la bañera.
Ah, esto es vida... Aunque, bueno, ya estoy muerta. ¡Hahahahahaha!
Me lavo mi cabello, mis brazos, mis partes censurables y mis piernas.
La, la, la, la.
Ah...
—Tengo hambre.
•
•
Después de un buen baño, me puse la ropa que Saik me compró para estar en casa y bajé, para seguir jugando.
¿O debería ver algo en la tele? A Saik no le gusta el anime, pero creo que una película de terror o comedia le gustaría.
Oh, que lindo. Está dormido... Eso creo. Su cabello no me permite saber si está dormido o solo está acostado, esperándome.
Me acerqué a él y le levanté el cabello.
Sí, parece estar dormido. Que lindo... Vaya... A veces olvido lo guapo que es.
Vi fotografías de sus padres. Su madre era muy, pero muy, muy hermosa, casi tanto como mi madre, y Saik heredó los ojos de su madre. Y su padre era muy lindo y adorable, casi tanto como yo, y Saik... Mmm... Veamos... Heredó... ¿La figura? Creo que sí. Su padre se parece a él en cuanto a su apariencia, pero tienen diferencias, como que Saik tiene el cabello negro y largo, y sus ojos son idénticos a los de su madre. Su padre tenía el cabello algo largo, pero no tanto, y sus ojos eran adorables, no hermosos. Era como ver a un cachorrito. Su rostro era afeminado, y Saik tiene una expresión más varonil. Si su padre hubiera tenido el cabello un poco más largo, cualquiera lo podría confundir con una mujer.
Saik es hijo de un hombre muy adorable y una mujer muy hermosa. Tiene genes poderosos, que desperdicia tapando su rostro.
Tantos hombres desearían tener tu aspecto, Saik, y te das el lujo de desperdiciarlo. Bueno, es tu vida, tú decisión. Solo soy una mantenida, no tengo derecho a criticarte.
—Que descanses.
Le di un beso en la frente.
Wow, que piel tan suave... Esto... Ah...
Le di otro beso, pero esta vez en la mejilla.
Fufu. Tengo una idea... Ah, no tengo lápiz labial. Que lástima... Bueno, uno más y ya.
Le di un beso en la barbilla.
Fufu. Tengan envidia de mí, chicas del mundo, ya quisieran ustedes besar a un chico como Saik... Bueno, en cuanto a chicos con la apariencia de Saik, porque si de personalidad hablamos, este chico es más inexpresivo que una roca.
... Mmm... Ay...
Le acaricié los labios. Son tan... suaves... Tal vez... Quizás... Un poquito no haría daño... ¡Nooooooo!
Golpeé mi mano y me alejé de él.
¡Soy una dama decente, no una pervertida! M-mejor veo la televisión para distraerme.
... Distraerme... Espera, ¡¿Saik no ha estudiado?!
No lo he visto estudiar desde que llegó, y dijo que estudiaría todo el tiempo.
Veamos... Desayunamos juntos, se va a su habitación mientras yo lavo los platos, veo la televisión, comemos juntos, se va a su habitación mientras lavo los platos, jugamos videojuegos juntos, se va a su habitación mientras veo la televisión, y finalmente cenamos juntos y se va a dormir.
¿Estudiará en su habitación? No entro a su habitación para no molestarlo, pero no lo he verificado.
Estoy comenzando a sospechar de su promesa.
•
•
Saik me dijo que estudiaría mucho, pero...
—Eres un flojo.
Él todavía estaba acostado en el sofá, durmiendo. ¡Se la pasó todo el día durmiendo! Intenté despertarlo varias veces, pero no pude, tiene el sueño bastante pesado.
Lo siento, Saik, pero me obligaste a usar la fuerza bruta. Lo despertaré saltando sobre él. La cena ya está lista, no quiero que se enfríe. Fufu. Hasta alguien como yo puede freír las chuletas de puerco.
Floté sobre él y me dejé caer.
Caí de lleno sobre él y nuestras cabezas chocaron. ¡Ay, ay, ay! ¡Debí haber pensado mejor esta parte del plan! ¡Me dolió!
—¡O-oye, despierta, princesa, y sin beso porque los besos de este príncipe todavía no te los mereces!
Saik bostezó y me acarició la frente. ¡O-oye, no hagas eso sin avisar, idiota!
—¿Eh? ¿Qué pasa? ¿Y por qué tienes un chichón en la frente?
—¡¿Eh?!
¡Kyaaaaaa! ¡Es cierto, tengo un chichón! ¡¿Por qué hice esa tontería?! ¡Soy una tonta!
—Te ves graciosa.
—¡P-pues tú también tienes un chichón!
Le levanté el cabello, para burlarme. ¡¿Eh?! ¡¿Por qué él no tiene un chichón?!
—Buena suerte para la próxima, mi cuerpo no es tan fácil de dañar.
—¡No es justo!
—Espera... Listo, ya lo quité.
¿Eh? ¡Es cierto, ya no lo tengo!
—¡¿Cómo lo hiciste?!
—Simplemente dejé de usar mi poder sobre ti, y al quitarte mi poder, regresas a ser un fantasma común y corriente. Ya te lo regresé, no te preocupes.
Oh, es cierto, cuando estoy bajo los efectos del poder de Saik, sigo siendo un fantasma, pero un fantasma con un cuerpo parecido a un cuerpo vivo, capaz de digerir alimentos y sentir las cosas. Por eso se me hizo un chichón, pues era como si estuviera viva, y se me quitó al regresar a ser un fantasma sin cuerpo físico. ¡Tan conveniente!
—¡La hermosa Yuki ha regresado! Lo sé, lo sé, seguía siendo hermosa incluso con un chichón, pero no lo digas, Saik, o me harás sonrojar. Fufu.
—Pero yo no dije nada.
—No te pongas tímido, Saik. ¡Ahhhhhhhh! ¡Es cierto! ¡No seas flojo, son las 8 de la noche! ¡Despierta!
—Sí, mamá.
Bostezó y se levantó.
—Oye, ¿no ibas a estudiar? En vez de dormir todo el día, usa tu tiempo para estudiar, al menos una hora al día.
—Sí. Lo siento.
—Debes tomarte los estudios con más seriedad, Saik. No te quedes dormido.
—Ah... Sí... Lo siento.
—Vamos a cenar.
Ay, este chico es difícil de entender. ¿En serio se está esforzando por estudiar? No lo creo.
•
•
Ay. Soy un fantasma, pero también necesito ir al baño. Es una de las desventajas de volver a comer. ¡Ojalá la comida desapareciera de mi estómago como lo hizo el chichón!
Salí de mi habitación y me dirigí al baño. De puntitas, para no despertar a Saik. O, bueno, flotando. Fufu.
¿Eh? Que extraño.
—¿La luz está encendida?
Saik aún tiene la bombilla encendida. Son las 3 de la mañana, seguramente se le olvidó apagarlo.
¡Oye, Saik, no desperdicies luz, está muy cara! Ya no eres más un millonario, no vivas como uno, Saik.
Entré a su habitación para apagarlo.
¿Eh? ¿Q-qué?
¿Esto es real? ¿No lo estoy soñando?
—¿Se te ofrece algo, Yuki?
—Ah... Esto... N-no... Lo siento, pensé que estabas dormido.
—¿Querías verme dormir? ¿Debería sentirme acosado?
—¡N-no...! Lo siento.
Cerré la puerta y tomé aire... ¿Qué es lo que acabo de ver? ¿Saik sigue estudiando...? Son las 3 de la mañana, ¿y Saik sigue estudiando? Entonces, ¿realmente él estudiaba todo el tiempo mientras estaba en su habitación?
"Debes tomarte los estudios con más seriedad, Saik. No te quedes dormido."
... Yo le dije eso... Me siento mal... Él estaba dormido por el cansancio. Soy una idiota... Saik no es el tipo de persona que no cumple con lo que dice.
... Debo darle una recompensa por su esfuerzo... Y también me disculparé con él... Lo consideré un flojo, pero no lo es.
¡Debo recompensar su esfuerzo...! Ay, pero después pienso en eso, ¡debo ir al baño!
•
•
—Ah, ya veo... ¿Podrías repetirlo?
—¡Siéntete afortunado, tendrás una cita con la linda Yuki!
—No, gracias. No me gustan las niñas pequeñas. Prefiero evitar problemas con la ley.
... ¡¿Dijo un chiste?!
Vaya, me agarró de sorpresa. ¡Bien hecho. Saik! Poco a poco dejarás de ser un chico frío y sin sentimientos. ¡Te volveré alguien extrovertido y emocional!
—¡¿Dijiste un chiste en el momento justo?! Estás progresando, Saik.
—¿Dije un chiste?
... Ah, ¿acaso lo que dijo lo dijo en serio, sin intención de bromear? Mejor no le tomo importancia a eso, por el bien de mi salud mental.
—¡Vamos, no seas aguafiestas! ¡Vamos a divertirnos!
—Pero... ¿Por qué? Que repentino.
—Necesitas descansar, Saik. Vamos al parque de diversiones.
—Hay demasiadas personas. No, gracias.
Es cierto, Saik es un chico antisocial... ¿Asocial? Como sea.
No le gusta estar rodeado de personas.
Veamos, un lugar divertido, que le podría gustar a Saik. Mmm...
—¿Al cine?
—Mmm... Claro, vamos. Será silencioso.
—¡Yupi! ¡Vamos!
Ya estudiaste bastante, mi estimado caballero, cabello de casco. ¡La diversión también es necesaria para el progreso!
•
•
Y aquí estamos, en el cine.
Respiré profundamente. Ah, el olor a palomitas de maíz, dulces... Ah, esto es tan cómodo.
Parejas, grupos de amigos, padres con sus hijos. Un entorno familiar tan agradable.
... Creo que esa chica no está con su padre, pues lo besó en la boca. ¡¿Cuántos años de diferencia tendrán?! ¡¿30?! Seguramente tiene muchísimo dinero ese viejo.
Pero dejando esa escena de lado, es un lugar muy agradable.
¡Y quiero mejorar mi estadía, estafando a este lugar! ¡Muahahahaha!
—¡Sí, ahí, vamos, vamos!
Me metí dentro de una máquina de garra, para hacer trampa y ganar este peluche de oso. Fufu. ¡Me vengaré por tantos años, jugando sin ganar nada! Bueno, sí me llevaba peluches, pero porque mi madre los ganaba por mí. ¡Les devolveré mi sufrimiento!
¡Sí, ganamos!
Saik sacó el peluche y lo guardó en su mochila.
—¡Una vez más!
—Ya gané 5, creo que es suficiente.
¡Oye, quería más...! Aunque creo que sería sospechoso seguir ganando. Sí, mejor nos retiramos con lo que tenemos.
—Señor, señor, ¿podría ganar uno por mí? ¡Por favor! ¡Usted siempre gana!
Una niña, como de 7 años, se acercó a Saik junto con su madre y le mostró una moneda, para que él juegue por ella.
—Por favor, se lo agradeceríamos. Ya llevamos muchos intentos y siempre fallamos.- Dijo su madre.
C-conozco a Saik, así que se negará. ¡Debo evitarlo! ¡No seas tan cruel, Saik!
—Por supuesto.
... ¿Eh? ¡¿Aceptó?!
Saik tomó la moneda y la metió a la máquina.
Bueno, supongo que es mi turno.
Me metí dentro de la máquina.
—¿Cuál quieres, niña?
—¡El delfín, por favor!
—Está bien.
El delfín está... aquí.
Coloco mis dedos en los costados del delfín, desde abajo, para que nadie sospeche que una mano invisible lo tomó. Al colocar dos dedos, cuando la garra lo toma, solo se necesita de la fuerza mínima para asegurar que la garra lo sostenga y no lo suelte.
Listo.
La garra lo toma y comienza a subir, y sostengo el delfín para que no caiga.
Bien, vamos bien... ¡Ganamos!
Recogió el delfín y se lo dio a la pequeña.
—¡Muchas gracias, señor!
—De nada.
Saik se alejó caminando y floté a su lado.
—Fufu. Hoy andas de buenas, ¿eh? ¿Tanto te emocionó que te haya invitado a una cita? Fufu.
—Una madre siempre se preocupará por sus hijos. Me es difícil negarme a la petición de una amorosa madre. Me recuerda a la mía.
—Sí, comprendo ese sentimiento.
Aunque parezca alguien frío, Saik también tiene sentimientos.
—¡Oye, oye!
¿Eh? ¡¿Una chica abrazó a Saik por el brazo?! ¡No arruines nuestra cita...! Aunque, espera, Yuki. ¡¿Una chica coquetea con Saik?! ¡Saik, es tu oportunidad de conseguir novia! ¡Muestra tus ojos!
Esta chica es... ¡¡perfecta!! ¡¡Pechos gigantes, labios carnosos, nalgona y un rostro hermoso!! ¡¡Saik, te sacaste la lotería!! ¡¡Rápido, muestra tus ojos!!
—Vi que ganaste muchos peluches. ¿Podrías ganar uno por mí? Porfis.
—No quiero. Adiós.
—¿Eh?
¿Eh?
Quitó el brazo de la chica de su brazo y se alejó de ella.
... ¡¿Qué?!
—¡Saik, literalmente puso tu brazo entre sus pechos! ¡Le gustaste!
—No me importa. Me da flojera.
¡¿Flojera?!
Ah, este chico no tiene remedio alguno.
•
•
Saik ya compró sus palomitas y sus dulces.
Solo pidió un combo, pues sería sospechoso meter dos al cine.
—Ah, solo hay una película de terror, y dicen que es muy aterradora. ¿Estás segura de que la soportarás?
—Fufu. No juzgues un libro por su portada. No soy una miedosa.
Ya quiero ver una reacción de miedo de Saik. ¡Es imposible que él no sienta miedo!
¡Vamos, Saik, muéstrame una expresión, chico inexpresivo!
—¡Cris, deja de abrazarme!
—¡Tengo miedo, Kei! ¡Esa película me dio mucho miedo!
—¡L-las personas pensarán que somos pareja! ¡No me abraces así!
Wow... Dos chicos guapos, abrazándose. Acabo de ver algo hermoso.
¡¿Serán pareja?! ¡Que lindos!
—Ya comenzó. Vamos.
Adiós, chicos guapos. Les deseo suerte en su relación. ¡Usen protección! ¡Hahahahahaha!
•
•
Ay... ¡Me arrepentí de ver esta película!
—¡Kya! ¡Eso se ve demasiado real!
N-no soy la única que tiene miedo. He escuchado a muchas personas gritar de miedo. ¡Todos tenemos miedo...! Bueno, casi todos.
Aquí solo hay un raro que no dice nada.
Saik sigue con la misma expresión... ¡Me desespera!
—¡¡Ahhhhhhhh!!
¡Ese fantasma salió de la nada...! Aunque los fantasmas reales son menos aterradores. ¡No representen a mi raza de esa manera, racistas! ¡No somos feos ni grotescos! ¡Mírenme, soy perfecta!
Fufu. Aprovecharé la situación para ponerlo nervioso. ¡Cualquier chico se pondría nervioso o tímido si una hermosa chica como yo lo abraza!
Abracé con fuerza el brazo de Saik.
—D-da mucho miedo.
—¿Miedo...? Sí... Supongo.
Buuuuu. Chico frío. ¿En serio nada te da miedo...? ¡Kya! ¡Malditos screamers!
•
•
La película terminó y salimos del cine.
Salí bastante satisfecha, ¡pues la película cumplió su función...! Bueno, al menos conmigo.
—¡Uwaaaah! ¡Aún siento escalofríos!
Saik se sentó en una banca y me senté a su lado.
—Vaya... Es la primera vez que vengo al cine con un amigo... Gracias, Yuki.
—¿Tu primera vez con un amigo? Eso es demasiado deprimente de escuchar.
Aunque... también fue mi primera vez... ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué eso sonó tan pervertido?!
—¿Lo siento?
—No, lo siento, dije algo ofensivo... ¡Pero no te preocupes, no será la última vez! ¡Vendremos más veces en el futuro! ¡Cuenta con la compañía de la linda Yuki!
Levanté el pulgar y le guiñé el ojo.
—Gracias.
... Esperaba ver una sonrisa, pero su gracias es sincero.
—Vámonos.
No pude ver ninguna reacción divertida, pero al menos logré hacer feliz a Saik... Aunque Saik no puede expresarlo con su rostro.
•
•
(Pov- Saik.)
Siempre vengo al cine solo. Nunca sentí pena por eso. Y ahora, por primera vez, vengo con un amigo.
... Debo admitir que se siente raro. ¿Esto es la amistad? Se siente raro.
Se siente agradable tener a una amiga de confianza como Yuki... No me siento cómodo con humanos vivos.
Espero tener más días así en el futuro.