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—¿Tasado en cuatrocientos millones? —Todos los presentes se sorprendieron al oír esto. Una pieza de piedra bruta aparentemente insignificante podría llegar a valorarse en cuatrocientos millones después de ser procesada, lo que resultaba asombroso.
—Increíble, esta persona es verdaderamente impresionante.
—Sin duda, extremadamente poderoso. Y lo más sorprendente no es su habilidad para tasar, sino para cortar. ¿Viste eso? Si el corte en esa piedra bruta hubiera estado incluso un poco desviado, el Verde Imperial de dentro se habría dañado, y entonces no valdría mucho.
—Exactamente, yo también lo vi. Entre las dos piezas de Verde Imperial, solo había una separación de menos de dos milímetros de ancho, y él cortó justo a través de ella. Es como si hubiera visto lo que había dentro antes de hacer el corte.
—Es increíble, ¿tendrá acaso un par de ojos dorados? ¿Capaz de verlo todo?
—¡Quién sabe!