—Ye Yin —dijo Zhang Menglong—, siempre he querido hacerte una pregunta.
—Señor Zhang, ¿se pregunta cuán fuerte es mi poder? —Ye Yin respondió con una sonrisa.
—Sí —respondió Zhang Menglong.
—Bueno, esos ocho superhumanos de América, matarlos es tan fácil para mí como matar pollos.
«Eso es tan Versalles», pensó Zhang Menglong, su suposición era similar, pero aún estaba asombrado cuando lo escuchó.
—Por cierto, Ye Yin, si tomara esa Píldora del Espíritu de Lucha, ¿también me volvería impresionante al instante?
—Eso no servirá —dijo Ye Yin—. Tu cuerpo en este momento es solo el de una persona ordinaria, y no puede soportar un efecto de droga tan poderoso. Además, este tipo de elixir es solo una ayuda. Para desarrollar el potencial de tu cuerpo, deberías usar un enfoque paso a paso.
—Gou Dan, ¿qué significa enfoque paso a paso? —preguntó Zhang Menglong, dándose cuenta de repente de algo—aunque Ye Yin podía leer su mente, parecía que no podía detectar la presencia de Gou Dan.
