El mayordomo asintió —Sí, la señorita Quinn había venido más temprano para ver a Señora. Pero no se quedó por mucho tiempo.
La mandíbula de Ryan se tensó. Sabía que era ella —Señor James, puede volver a sus tareas. Yo iré a ver a mi madre por mi cuenta —dicho esto, dejó atrás al mayordomo y se dirigió al salón antes de ir directamente al comedor.
Beca estaba sentada en la mesa, como había dicho el mayordomo, pero con solo mirarla Ryan pudo decir que no estaba esperando la cena —estaba esperándolo a él.
—Madre —Ryan saludó.
Pero en vez de devolver el saludo, Beca preguntó sin rodeos —¿Delyth ha vuelto al país?
Ryan no respondió, y Beca ya conocía la respuesta —Así que ha vuelto —murmuró, lo suficientemente alto como para que su hijo la oyera.
—Esto no tiene nada que ver con Delyth, madre. Por favor, no la involucres. Ella es inocente —Ryan defendió, y eso fue suficiente para hacer perder el temperamento a Beca que le costaba contener.