Emyr observaba cómo Arwen y Aiden se dirigían hacia el puesto de fideos, completamente desconcertado. Por más que lo intentara, no podía comprender la razón de este cambio de planes. ¿No se suponía que debían cenar en Demeter, el restaurante con estrella Michelin más exclusivo y conocido en Cralens?
Sus pensamientos se aceleraban. ¿Cómo habían cambiado tanto las cosas a favor de este humilde y viejo puesto? Si se descubría que alguien había cancelado una reserva en Demeter por esto, causaría una ola de asombro en todo el país. Demeter podría no ser capaz de soportar lo que esto haría a su reputación tan duramente ganada.
Emyr sacudió la cabeza, la frustración se colaba en su voz mientras miraba al conductor. —Neil, ¿qué te parece este lugar?
Al principio, Neil parecía confundido, pero luego, notando que Emyr miraba hacia afuera, siguió su mirada y respondió, —Parece decente. Lo han decorado bonito, y con tanta gente aquí, la comida debe ser bastante buena.