—Lo que quiero es que te recuperes —murmuró él, sus palabras eran suaves, pero llenas de significado—. Cuando estés lista, necesito que me digas cómo quieres lidiar con aquellos que te han hecho daño. Tú lo pides, y se hará exactamente como tú quieras.
Se enderezó—. Además, una compañera se supone que debe quedarse con su pareja. Sé que no quieres estar aquí, es natural ya que ves a los de nuestra especie como 'diferentes'. No tienes que quedarte si no quieres, pero dale unos días, es todo lo que pido. Recupera tus fuerzas y cuando finalmente seas capaz de hacer un viaje exitoso con tu hermano, entonces podrás irte —el tono de Donovan cambió repentinamente cuando añadió:
— Pero no te dejaré regresar a esa casa de locos disfrazada de palacio. La finalidad en su voz era inconfundible.