```
—¿Intentas lastimarme porque tú estás herido? —Algo acerca de esas palabras no le cayó bien a Zuri. Ella no estaba herida. Sí, la gente decía que estaba loca y ella lo creía. Incluso su propia pareja dijo que estaba loca, por el amor de Dios.
Bueno, técnicamente, Xaden ya no era su pareja, porque ella lo había rechazado. Simplemente estaban coliviendo por los beneficios que esta unión les proporcionaba; beneficios compartidos por las dos manadas, no individuales.
—Necesitas poder controlar tu expresión —Khaos soltó una risa de nuevo.
Entonces, hizo algo que Zuri no pensó que haría. Levantó su mano y le acarició la cabeza. ¡Le acarició la cabeza! Como si fuera uno de sus lobos mascota. Y luego se alejó.
Fue solo una pasada por su cabello, pero Zuri se encontró luchando por controlar sus emociones. No sabía por qué, pero la tomó por sorpresa y la abrumó.