—Jenna... —llamé su nombre suavemente.
—Sí, Mi Señora —respondió ella mientras se volvía a mirarme.
—Umm... ¿Bradon ha estado llegando tarde a casa últimamente? —pregunté tratando de no sonar demasiado sospechosa.
—Debe estar ocupado con el trabajo... —respondió ella, mirando apenada aunque no había hecho nada malo.
—Entonces, supongo que también regresará tarde esta noche... —dije antes de sonreírle un poco.
Probar un poco las aguas no debería ser mala idea...
—Me temo que podría ser así —respondió Jenna tristemente.
Ella debió haber pensado que quería ver a Bradon desesperadamente y que odiaba el hecho de que llegara súper tarde cada noche. Eso no podría estar más alejado de la verdad. Por supuesto, estaba preguntando precisamente para verificar que hoy sería como cualquier otro día y eso significaría que Bradon no volvería a casa hasta muy tarde en la noche. Mejor aún, esperaba que solo regresara al amanecer o que no regresara en absoluto.