Annette estaba molesta.
Obviamente, su cariño por Connor aumentaba, y ella dependía cada vez más de él.
Pero a veces, no podía convencerse a sí misma.
¿Qué podía hacer para estar a la altura de su relación y su futuro?
Connor se acercó a Annette y la abrazó por detrás.
Annette gradualmente se quedó dormida mientras pensaba.
Quizás durmió un poco tarde anoche. Se despertó a las ocho de la mañana siguiente.
Connor no estaba en la habitación.
Annette se arregló y bajó las escaleras, solo para ver a Alina desayunando en el comedor.
Annette se sintió incómoda.
Dwayne la vio y la saludó respetuosamente —Buenos días, Sra. Hall.
—Buenos días, Dwayne— respondió Annette.
Alina se volvió y miró a Annette —Sra. Hall, ya se levantó. Desayunemos juntas.
Annette asintió y caminó hacia la mesa.
Miró alrededor del salón pero no vio a Connor.
