En el pasaje del aeropuerto...
El hombre que parecía frío frunció el ceño lentamente.
Frankie, que estaba detrás, vio a una niña bloqueando el paso de Lance y rápidamente se adelantó.
Al ver que era una niña exquisita, dobló las rodillas y dijo suavemente —Niña, ¿no puedes encontrar a tu mamá?
La niña tenía un par de grandes ojos redondos y pestañas gruesas, vestida con un vestido de color cereza, haciendo que su piel pareciera clara.
A primera vista, era obvio que estaba bien protegida por su familia.
Ella asintió a Frankie.
Los dos moñitos se balanceaban. Era tan obediente que podía derretir los corazones de las personas.
La voz de Frankie era muy suave. Dijo —Te llevaré a encontrar a un miembro del personal del aeropuerto. Pídeles que te lleven a encontrar a tu mamá.
La niña negó con la cabeza. Se puso de puntillas y usó su rechoncha manita para tirar de los dedos de Lance. Dijo suavemente —Eres tan guapo. ¿Puedes prestarme tu teléfono celular? Quiero llamar a Mamá.