Con el anuncio del juez, el público salió de su trance; el resultado fue inesperado. Bobby siempre lograba sorprenderlos, ya sea dominando a sus oponentes o volteando la situación en un aprieto. Tras haber vencido al tercer recluta más fuerte de la Ciudad, Brenton, Bobby se rió mientras se sentaba casualmente en el tercer asiento de la primera fila. A su derecha estaba Chi-Chi, que miraba a Bobby con incredulidad. Cuando el concurso de reclutas del pueblo había terminado, Chi-Chi había evaluado la fuerza de Bobby. En ese momento, las habilidades de Bobby eran basura comparadas con las de Chi-Chi.