Los años pasaron en un parpadeo. Ahora, mi cuerpo por fin alcanzó los 20 años. Oficialmente, el meme de Nadie chiquito se acabó.
Muchas cosas sucedieron y por fin, ya no debería de faltar mucho para que empiece el canon del juego.
Si están curiosos acerca de mi poder... solo puedo decir que no cambió demasiado. En general, ya alcancé el tope de mis habilidades; mi principal problema es la resistencia y no porque sea físicamente débil sino porque mis habilidades en general funcionan a gran escala. ¿Entienden lo que quiero decir? Significa que consumen mucha energía.
Por alguna razón, adquirir el acceso a nuevas Vías no incrementa mis capacidades físicas, solo me dan nuevos poderes que están jodidamente rotos pero que no puedo abusar de ellos dado la resistencia que consumen.
-Ugh. ¿Qué hora es?
Siento que apenas dormí anoche y me duele la cabeza, mi memoria está un poco borrosa.
-Son las 11, solo dormiste 2 horas del sistema, cariño.
Me estaba levantando lentamente de la cama hasta que una suave voz me despierta de mi somnolencia por completo.
-Oh por dios, ¿desde cuándo estás aquí? Kafka.
A solo una cabeza de distancia, Kafka en cuclillas me está grabando con su celular y no muestra intención de detenerse aunque me haya despierto.
-¿Por qué me estás grabando con el celular? Más bien, ¿por qué hay un set de cámaras completo detrás tuyo?
Esta es la Estación Espacial Herta, si Kafka está acá significa que...
-No me digas...
Levanté mi sábana con un brusco movimiento. Estoy en bolas, sí, pero más importante, Silver Wolf está ahí abrazándome la cintura aun dormida, por cierto ella también desnuda. Para mi desgracia, las sorpresas no acaban ahí. En el otro lado de la cama, varias marionetas de Herta se encuentran esparcidas por todos lados; por supuesto también desnudas pero la real no se encuentra, ella está en un viaje de negocios.
Ay no, ya recuerdo. Herta me obligó a ingerir afrodisiacos y luego Silver Wolf apareció. Y todo terminó hecho un caos...
-K-Kafka, por favor no me digas que...
Mostrándome la pantalla de su celular con una suave sonrisa, ahí me encontraba yo... haciendo un ahegao...
-¡Ahhhhhhhhh! ¡Borra eso!
-Nop, ya guardé varias copias de seguridad e incluso tengo un chip con más de un terabyte preparado para implantárselo a alguien.
-¡¿Cuántos videos y fotos míos tienes para que pese tanto?!
Mis gritos hizo que Silver Wolf se despertase y ella se levantó suavemente de mi regazo.
-*Bostezo*~ ¿Ya es de mañana? Nadie, ¿quieres otra ronda más o ya estás satisfecho?
-Oh, buena idea Silver Wolf, prepararé más cámaras.
-¡Diablos, no! ¡¿Acaso ustedes dos no tienen cosas más importantes que hacer?!
Cuando pregunté eso, Kafka y Silver Wolf me miraron con genuina confusión.
-¿Existe algo más importante que complacerte?
-¿Existe algo más importante que acosarte?
Estas dos ya no tienen esperanza...
Sin aliento, suspiré rendido...
-El guion, ¿acaso no tienen un guion que seguir?
-Ah~ Ahora que lo dices~
-Fufu~ Qué despistada de tu parte Silver Wolf, ¿cómo pudiste olvidarte del guion?
-Tú también Kafka, ignoraste por completo tu papel y viniste directamente a la habitación de Nadie para instalar todo este equipo fotográfico.
Ignoré a las dos y procedí a vestirme.
Las muñecas de Herta están completamente desconectadas. Al igual que el juego, parece que ella no regresará a tiempo para ayudar contra el ataque de la Legión Antimateria.
Pero está bien, a diferencia del juego, yo estoy aquí.
-¿Hm?
Solo pude ponerme la camisa y los boxers, cuando quise ponerme los pantalones, mami Kafka me detuvo de repente.
-¿Qué crees que estás haciendo querido?
-¿V-vestirme?
¿Por qué su sonrisa parece tan aterradora?
-Hijo querido, ese trabajo le pertenece a tu madre. Ahora desnúdate de inmediato.
-Eso es demasiado irrazonable...
-Hm... tienes razón. Debería ser yo quien te desnude. Pero primero, te haremos un chequeo de cuerpo completo.
-¿Tiene sentido hacer eso? Estoy completamente sano.
-Lo sé, sé que tu salud es bueno. Pero es el deber de una madre monitorear el crecimiento de su hijo. Voy a desnudarte así que abre las piernas.
-¡Por favor, los boxers no! ¡Más bien, ¿no es el orden un cuanto extraño...?! ¡Comienza con la camisa al menos!
Mis palabras fueron completamente ignorados, Kafka me desnudó sin piedad.
Asustado, salté a la cama y me cubrí con la sábana.
-¡M-mami, por favor cálmate! ¡Silvie, ¿soy yo o la obsesión de Kafka por mí ha empeorado?!
Miré a Silver Wolf en busca de ayuda y una respuesta desesperada.
-No es tu imaginación, es la realidad.
Contestó Silver Wolf mientras se vestía, ignorando por completo mis súplicas de ayuda.
-Desde que dejaste el grupo, Kafka ha mostrado tener síntomas de abstinencia. Si vieras cómo es su habitación ahora, apuesto a que tendrías pesadillas.
-¡¿Qué diablos?! ¡Explícalo con más claridad!
-Lo siento pero yo tampoco quiero recordarlo. Incluso si te amo, Nadie, la vista de esa habitación es demasiada aterradora... Incluso Elio no se atrevió a hablarle a Kafka por un mes entero luego de verlo...
Ahora sí me estoy asustando mucho.
-¿Sabes qué Kafka? Creo que mejor me voy a...
-Escúchame Nadie, no te resistas.
¡¿Encantadora de Espíritus?! ¡No me jodas!
-Ríndete Nadie, cuando Kafka se pone así, no hay nadie quien la detenga.
-¡A-auxilio! ¡Herta, Asta, Arlan, Peppy! ¡Peppppyyyyyy!
...
..
.
-Sniff. ¿Qué clase de madre le hace esas clases de cosas a su hijo?
-Gracias por la comid... quiero decir, has crecido bien.
Comentó Kafka con una voz seductora mientras se limpiaba la comisura de los labios con su pulgar.
-Sniff... Ya no podré casarme...
-Ya estás casado conmigo, idiota.
Comenté Silver Wolf con los ojos en blanco mientras me mostraba el anillo en su dedo anular.
Mi cuerpo está completamente marcado ya sea con chupetones o marcas de dientes... También me duele el culo, ouch...
Mami Kafka empezó a vestirme con cuidado. A este punto, ni siquiera tenía las fuerzas para resistirme, le permití hacer lo que quisiese conmigo.
Hey, no, espera, ¿dónde crees que estás tocando? Sé que te estás aprovechando de mí. Diablos, si entierras mi rostro en tus pechos, ¿cómo diablos abriré la boca?
-Bien, listo.
Ahora estaba completamente vestido, pero a qué costo...
Rendido a cualquier intento de resistencia, me levanté con apenas fuerzas y me puse la campera con ayuda Kafka...
-Ahora sí, por favor salgamos de aquí.
Ya no quiero seguir en esta habitación...
-Espera un momento.
Acercándose a mí, Kafka reacomoda el cuello de mi camisa.
-Así está mejor. No puedo permitir que mi querido hijito se vea desalineado, ¿verdad~?
-Kafka...
Con una suave sonrisa, Kafka me acaricia la mejilla con su toque.
-Kafka, si crees que no me di cuanta de la cámara oculta que acabas de poner en mi camisa, estás muy equivocada.
-Tsk. Mi niño crece tan rápido, ahora no puedo ni acosarte con normalidad.
-¿Qué diablos es acosarme con "normalidad"?
Seriamente hablando, no puedo creer que haya estado ignorando todas esas cámaras ocultas que puso Kafka en mis cosas. Ahora estoy empezando a dudar cuál es el verdadero significado de privacidad.
Solo Firefly es una santa conmigo, no me acosa ni me hace nada extraño... fuera de la cama.
-No entiendo cuál es el punto de estas cámaras, Kafka. Literalmente les estoy permitiendo monitorearme a través del celular; rastreador, cámara, lo que sea, ustedes son libres de acceder a lo que sea...
Menos mi historial de búsqueda por supuesto.
-No lo entenderías, hijo. Se trata de mi orgullo como acosadora.
-¿Hay orgullo para eso...?
Mi visión del mundo se encuentra gravemente distorsionada ahora...
-E-estás bien, dejemos de perder tiempo con más temas innecesarias. Entonces, ¿cuánto falta para que la Legión Antimateria ataque?
-Según el guion, aun falta una hora para que lleguen.
Kafka contestó a mi pregunta mientras ayudaba a acomodar mi cama. Por cierto, todas las muñecas Herta, Kafka simplemente las tiró a un lado sin cuidado.
-¿Tanto? Si ese es el caso, ¿quieren que les de un tour por la Estación Espacial?
-Oh~ ¿Mi lindo hijo quiere actuar de guía para su mami?
-Bueno, sí.
-¿Entonces a qué esperamos~?
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