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Habiendo iniciado sesión en el juego sin problemas, Wen Qinxi se preparaba para dejar la casa de la familia Lin rumbo a la capital. Aunque solo había estado ausente por dos semanas en el juego, habían pasado dos años y todo había cambiado. Lin Mingxu había crecido unos centímetros y experimentaba con sus recién aparecidos vellos faciales. La señora Lin había perdido algo de peso posiblemente preocupada por sus traviesos rufianes. El maestro Lin tenía evidentes líneas de estrés, lo que hacía que Wen Qinxi se preguntara qué había hecho Jolie con su personaje mientras él estaba ausente.
Toda la familia Lin y los sirvientes, excepto Lin Mingxu, estaban en el patio delantero despidiendo al joven maestro de la familia. Wen Qinxi fue arrastrado al pecho de la señora Lin mientras ella lloraba como una plañidera en un funeral. —Wuwuwuwu mi pequeño Jin Jin, ¿qué va a hacer mami sin ti? Wuwuwuwu no dejes a tu pobre madre con esta gente —dijo mientras aplastaba a un indefenso Wen Qinxi hasta que apenas podía respirar.
El maestro Lin, ofendido por su esposa, no pudo resistir defender su honor, —¿Esta gente? Cariño, ¿no he sido bueno contigo? con una expresión de agravio.
La señora Lin lloraba aún más fuerte diciendo, —Síiii, pero tú no puedes hacer fideos wonton como mi Jin Jin wuwuwuwu.
Todo el mundo, ...
«¿Así que todos sus lamentos eran por comida?», pensó Wen Qinxi mientras se liberaba y buscaba a Lin Mingxu que todavía no había regresado. Como no podía esperar más, Wen Qinxi decidió dejar un mensaje para él antes de subir al carruaje preparándose para partir.
Justo cuando el carruaje partió, el maestro Lin, que había estado de pie junto a la puerta, de repente notó que el baúl de almacenamiento se abría crujientemente un poco antes de cerrarse abruptamente. Se golpeó el muslo dándose cuenta de dónde estaba su segundo hijo y gritó al cochero que detuviera el carruaje. Un confundido Wen Qinxi sacó la cabeza por la ventana a punto de preguntar al maestro Lin si había olvidado algo, pero se contuvo cuando vio al hombre abrir el baúl de almacenamiento detrás del carruaje.
Curioso, Wen Qinxi bajó del carruaje y echó un vistazo a lo que el maestro Lin miraba con expresión sombría. Lin Mingxu estaba acurrucado en el espacio reducido cubriéndose la cara con uno de los libros de Lin Jingxie mientras conteniendo la respiración esperando no ser descubierto. —¡Niño tonto! —gritó el maestro Lin arrastrándolo fuera por la oreja.
—¡Ay ay ay me duele! Jin-ge, ¡sálvame! —dijo Lin Mingxu con expresión dolorida. Wen Qinxi no pudo evitar reírse, el polizón quería ir a la capital con él sin el consentimiento de sus padres. Era simplemente demasiado malditamente hilarante.
—Ming Ming, nos vemos en dos meses —gritó al pobre chico siendo arrastrado de la oreja de vuelta a la Mansión Lin. Wen Qinxi subió al carruaje mientras partían hacia la capital.
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Pensando en las líneas de estrés en el maestro Lin, simplemente tenía que preguntar qué hizo el sistema con su personaje mientras estaba ausente, así que preguntó y esta fue la respuesta de Jolie:
—No hice nada que tú no harías. Hice puenting, monté un toro una vez, construí un parapente y planeé alrededor de la ciudad, ya sabes, lo usual. ¡Fue muy divertido!
—¡Eso es jodidamente extremo y no de una buena manera! ¿Intentabas matar a Lin Jingxie y comenzar el mundo de nuevo? Qué cabrón —dijo Wen Qinxi reprendiendo al sistema.
—Aiyo... puedes regañarme todo lo que quieras pero mis fechorías no fueron tan malas como las de Qie Ranzhe. Ese hombre es cien veces más loco que yo jajaja —dijo un emocionado Jolie. No veía la hora de sacudir a Wen Qinxi hasta la muerte con las peligrosas escapadas de Qie Ranzhe. Como se le había instruido, Jolie había esparcido el rumor de que Lin Jingxie de la familia Lin estaba en una relación con Lee Jienjie de la familia Lee. Ese rumor no solo llegó a los oídos de Zhao Huangzhi, sino también a los de Qie Ranzhe.
Esta noticia llegó a sus oídos solo dos meses después de separarse de Lin Jingxie. Sintiéndose como un hombre patético que había sido obligado a llevar un sombrero verde, Qie Ranzhe quiso confrontar a Lin Jingxie y aclarar sus sentimientos hacia él, pero no pudo abandonar el gremio Ye Lang por más que lo intentara. Entró en un alboroto, venciendo consecutivamente a los mercenarios clasificados cuarto, tercero y segundo del gremio después de que se interpusieran en su camino impidiéndole salir.
Habiendo ganado la pelea, estaba a punto de salir, pero su camino pronto fue bloqueado por el Gran Maestro del gremio Ye Lang, también conocido como el Viejo Chen. Pensando que podría simplemente vencer al anciano y salir, lanzó un ataque pero pronto fue golpeado por la realidad, el anciano sometió a un furioso Qie Ranzhe como si no fuera nada.
El chico finalmente había encontrado a alguien más poderoso que él. Mientras no superara a este anciano, siempre habría alguien que tuviera suficiente fuerza para detenerlo. El anciano le dijo que dejara de usar su ira para luchar, de lo contrario nunca lo superaría. Como un buen estudiante, Qie Ranzhe tomó sus palabras en serio y mantuvo su ira bajo control.
Decidido a superar a su maestro, Qie Ranzhe se hizo más fuerte e inteligente a un ritmo alarmante dejando al resto del gremio impotente. Era un maestro estratega que abordaba cada tarea con gran sabiduría. Era un hecho bien conocido que mientras siguieras el plan de Qie Ranzhe nunca fallarías. En menos de un año, fue clasificado segundo solo por debajo del Viejo Chen.
Su mayor logro que finalmente captó la atención del emperador fue cuando se infiltró él solo en las fronteras de su enemigo del norte que había estado aterrorizando sus ciudades fronterizas intentando expandir territorio hacia el país Qingsong. Qie Ranzhe entró en su palacio, mató a su emperador haciéndolo parecer una muerte natural antes de destruir la reputación del Primer Ministro que había instigado el ataque a Qingsong.
Esto ayudó al príncipe que había hecho un trato con el emperador Qie a ascender al trono pacíficamente resolviendo el conflicto entre los dos países. Todo esto fue hecho en solo tres días. El emperador estaba fascinado por la persona de apellido Qie y por lo tanto invitó a Qie Ranzhe a la capital para finalmente hacerse cargo de la estación del gremio que servía directamente al emperador.
El sistema detalló todo excepto la parte de que Qie Ranzhe quería dejar el gremio debido al rumor. Wen Qinxi estaba atónito ante esta revelación, no esperaba que Qie Ranzhe llegara a la capital antes que él. Según la trama anterior, había calculado que llegaría a la capital un mes antes que él y le ayudaría a lidiar con el Príncipe Anzhie. Solo esperaba que no pasara nada grande antes de que él llegara.