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Considera esto como mis capítulos (Extra); lenguaje más intenso y todo eso, así que no te sorprendas demasiado.
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PdV de Jillian Sariel
Recostada en mi cama, eché un vistazo a Ayla mientras se sentaba, su piel suave y besada por el sol brillaba a la luz de la luna, mientras peinaba su largo cabello verde.
Observándola, asentí para mí misma mientras contemplaba su figura, teniendo que contenerme para no volver a arrastrarla a la cama conmigo.
Ayla Kameiel, mi amiga de la infancia convertida en prometida...
Cruel, malvada, astuta, inteligente...
Muchas palabras la describían, pero en la que más coincidían era en hermosa.
Habiendo crecido con ella, sabía que cada una de esas palabras la describía perfectamente; era una perra intrigante que hacía lo que quería para conseguir lo que deseaba.