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Después de que Jahi despertó su núcleo, tuvimos los siguientes días libres, la razón era que la Marquesa y la Condesa querían que ella se acostumbrara a su nueva fuerza y aprendiera a controlar su magia.
Actualmente, Jahi estaba de pie en el centro de un campo de entrenamiento, vistiendo un top corto y pantalones sueltos. Frente a ella estaba la Marquesa, vistiendo algo similar.
Jahi se lanzó hacia adelante, balanceando su puño hacia la Marquesa. Bostezando ligeramente, ella agarró el puño de Jahi, antes de empujarla ligeramente. Gruñendo, Jahi cargó de nuevo, y otra vez...
Suspirando, tomé asiento, saqué un libro en blanco. Agarrando un bolígrafo, comencé a crear secuencias, etiquetándolas y creando la runa combinada. La runa para la luz era un sol naciente, que parecía la mitad superior de un círculo con cuatro líneas ramificándose desde los bordes. Suspirando de nuevo, fruncí los labios mientras pasaba de secuencia en secuencia.
La Magia de Luz era capaz de soporte y ofensiva, ya que era una poderosa magia curativa así como extremadamente destructiva. Sabiendo esto, empecé a sonreír, creando secuencias para curación propia así como un hechizo de curación normal. Después de eso, comencé una secuencia más complicada: una espada hecha de luz.
Suena simple, pero para que algo así funcione, necesitas ser capaz de condensar mana de luz, mantenerlo y dejarlo sólido durante un largo período de tiempo.
La runa de forma podría comenzar siendo simple; después de todo, una espada es, técnicamente, un rectángulo largo y delgado. Añadir la punta es simple, ya que simplemente manipularías el mana en un punto al final de la "espada".
Sin embargo, donde se complica es con las runas de apoyo.
Largo, ancho, poder, densidad, velocidad...
Estas son solo algunas de las runas que necesitas considerar, y también necesitas determinar qué runas tienen prioridad.
Golpeteando el bolígrafo contra mi mejilla, fruncí los labios, pensando. Mirando a Jahi continuar cargando hacia la Marquesa, comencé a crear una secuencia para una espada ancha y densa. Después de todo, crear la primera secuencia es la parte más difícil; una vez que tengo algo que funciona, puedo ajustarlo para crear algo completamente nuevo.
Toma una bola, por ejemplo. Un esfera elemental normal, uno de los hechizos más básicos, puede convertirse en algo loco. Añade runas para cantidad, densidad y poder, y de repente esa esfera inofensiva se convierte en un bombardeo de tu elemento. Por otro lado, añadir runas para velocidad, pequeño tamaño y poder podría crear un hechizo tipo bala.
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Sonriendo, continué la secuencia, creando tres variaciones diferentes que deberían, en teoría, crear mi resultado deseado de una espada grande.
Escuchando a alguien caminar detrás de mí, me giré y vi a la Condesa mirando las páginas, asintiendo.
—La segunda es la que tiene más posibilidades de éxito. Mira, la forma en que interactúan las runas de largo y ancho significa que, si son la base del hechizo, necesitan tener prioridad. El mana restante se puede usar para las otras runas, como poder o densidad. Mira.
Diciendo esto, empezó a trazar las runas en el aire, comenzando con el símbolo para relámpago, usando un triángulo hacia arriba para fuego y cuatro líneas horizontales para viento. Después de eso, dibujó el rectángulo, seguido por las runas para aumentar el ancho, densidad y poder.
Terminando la secuencia, una amplia espada de relámpago solidificado apareció en su mano. La sostuvo por unos segundos antes de dejarla desvanecerse en la existencia. Rápidamente copiando la secuencia que usó, miré hacia ella, preguntando —¿Cómo se vería la runa combinada?
Suspirando, ella lentamente la dibujó en el aire. Rápidamente copiándola, sonreí antes de levantarme. Caminando hacia ella, le di un pequeño abrazo.
Escuchando su risa, rápidamente fui envuelta en sus brazos, haciéndome inclinar la cabeza. Continuó riendo, antes de caminar hacia el campo. Mirando hacia allá, vi que Jahi estaba jadeante, sudando profusamente, mientras que la Marquesa estaba de pie, pareciendo como si acabara de llegar al campo.
Girándose hacia nosotros, la Marquesa sonrió antes de caminar hacia nosotros.
—Ja... Si solo Jahi tuviera tus agallas, niña. Ella simplemente se lanza sin la menor preocupación... —dijo.
Soltando un bufido, la Condesa miró con desdén a la Marquesa —Así que se parece a ti. Si recuerdo correctamente, la razón por la que ganaba nuestros combates era porque tú te lanzabas directo a cualquier trampa o hechizo que te tiraba.
—Bueno, aprendí, ¿no? Además, sé que hiciste esos hechizos más fuertes solo para hacer nuestras noches más intensas —respondió la Marquesa con una sonrisa.
—De todas maneras, Kat aquí ya creó varios hechizos para que pruebes, Jahi —comentó.
Tomando el libro de mi mano, lo lanzó a Jahi, quien lo atrapó. Aunque estaba mirando con enojo a la Condesa, abrió el libro y leyó la primera secuencia, que era el hechizo más simple, una bola de Magia de Luz.
Trazando las runas en el aire, parpadearon brevemente antes de desaparecer.
Frunciendo el ceño, Jahi intentó una vez más, esta vez presumiblemente usando menos mana. Las runas parpadearon, antes de que una pequeña bola de luz, del tamaño de una pelota de béisbol, apareció ante ella.
La agarró, apagando la luz. Trazando las runas de nuevo, creó una bola más grande, que producía más luz.
Sonriendo, miré entre la Marquesa y la Condesa. Ambas parecían ligeramente impresionadas, pero considerando que podían usar magias mucho más avanzadas, tomé eso como que Jahi lo había hecho bastante bien. Soltándome de los brazos de la Condesa, corrí hacia Jahi, riendo.
—¡Puedes hacer magia Jahi! —le dije.—Prueba la siguiente, prueba la siguiente.
Ella me dio una pequeña sonrisa antes de mirar de nuevo la página. Repitiendo la secuencia anterior, esta vez añadió una runa al final, una para hacer la esfera más grande.
Otra vez, le tomó algunos intentos ajustar el mana correctamente, pero eventualmente lo hizo, creando una esfera dos veces más grande que la anterior. Riendo de nuevo, miré a Jahi con ojos muy abiertos.
—¡Magia! —exclamé con asombro.—¡Es realmente magia!
Riendo entre dientes, le señalé el siguiente hechizo, pidiéndole que continuara.
Viéndola lentamente pasar por cada hechizo, sintiendo su mana, estaba eufórica. Ver las cosas de las que soñé en mi vida anterior me llenaba de emoción, y saber que solo me quedaba un año antes de poder hacer esto también, era tanto asombroso como frustrante.
Eventualmente, Jahi cerró el libro, devolviéndomelo. Poniendo un puchero ligeramente, lo tomé. Mirándola, ella tenía una mirada cálida en sus ojos, antes de que me despeinara las orejas.
—Haré toda la magia que quieras esta noche. Ahora, sin embargo, necesito practicar con Mamá...
Asentí, moviéndome de vuelta hacia mi asiento. Tanto la Marquesa como la Condesa rieron, antes de volver a sus lugares.
Abriendo el libro, lentamente pensé en todo lo que pude, pasando de ataques de área de efecto a ataques a un solo objetivo. Por alguna razón, realmente disfrutaba creando estas secuencias, y con la ayuda de la Condesa, logré, con suerte, hacerlas viables para que Jahi las pruebe eventualmente.
Lentamente llenando el libro con hechizos, levanté la vista. Jahi ahora estaba tomando el tiempo para pensar en diferentes estrategias, moviéndose de diferentes maneras para intentar aterrizar un golpe en la Marquesa. Aparentemente, habían hecho una apuesta, con la condición de golpear a la Marquesa en algún lugar que no fuera sus brazos o piernas.
Viendo a Jahi correr alrededor, lanzándose hacia arriba o hacia abajo, era cautivador. Después de todo, estaba moviéndose tan rápido como algunos atletas profesionales en mi vida pasada. Considerando que la Marquesa parecía desinteresada y aburrida, estaba tanto emocionada como temerosa de ver cómo era el combate en niveles más altos. Sin embargo, pensando en ello, me pregunté si incluso haría algo si alcanzaba ese nivel.
Después de todo, mientras pueda decir que estoy bien con la muerte o matar para proteger a los que me son queridos, en realidad verlo o hacerlo...
Bueno, esa es una historia diferente.
Frunciendo mis labios, seguí pensando en nuestro futuro.
De los varios libros y clases reales del Barón Jilk, pude reunir que el mundo está en una paz relativa. Nuestros vecinos tienen poca o ninguna enemistad hacia nosotros, y el Imperio no tiene deseo de adquirir más tierras. Entonces, en el frente externo, la única verdadera amenaza son los monstruos del Laberíntico.
Internamente, algunas casas y clanes han mostrado desdén por la Casa Asmodia. Sin embargo, considerando los libros que he leído, tanto la Marquesa como la Condesa tienen posiciones de tanto poder y prestigio que esa gente necesita tener cuidado. La Condesa es una consejera de confianza para la Emperatriz, mientras que la Marquesa es una de las cuatro personas que recibieron el honor de convertirse en los Caballeros de Ceniza de la Emperatriz, un pequeño grupo de guerreros sumamente talentosos y confiables.
Entonces, mientras puede haber pequeños problemas para lidiar, como la nobleza insignificante y los raros ataques de monstruos, esperemos que nuestras vidas sean pacíficas...
¿A quién quiero engañar? siempre que alguien es arrojado a un nuevo mundo, nada es jamás pacífico.