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La cabeza de Situ Qingyue voló alto en el aire con los ojos abiertos por la incredulidad.
Él no sabía. Aunque Jian Wushuang estaba solo en el Reino del Núcleo de Oro Profundo, su verdadera fuerza era mucho más aterradora. En la Fortaleza de Aguas Claras, luchó con dos asesinos de máscara púrpura al mismo tiempo y mató a uno directamente.
Aunque no estaba en el Reino Vacío Yin-Yang, era más poderoso que un guerrero normal de ese reino. ¿Cómo podría la jaula atraparlo?
—¡Maestro! —gritaron los guerreros de la Familia Situ en la zona.
—¡Maestro! —repitieron con miedo.
Al ver la cabeza de Situ Qingyue volando en el aire, todos los guerreros de la Familia Situ en la zona se asustaron enormemente y nadie se atrevió a avanzar.
Después de darse la vuelta, Jian Wushuang caminó hacia la jaula. Cortó los pilares de la jaula con su espada y apareció ante Ji Wuyue.
—Tía —la voz de Jian Wushuang temblaba.
