Entonces Baihu comenzó a darse cuenta de algo. Notó el vínculo entre esta bestia y Bai Xifeng.
Parecía sorprendido. Esta mujer fue a conseguir otra bestia contratada antes que él. Baihu corrió hacia Bai Xifeng y saltó a sus brazos.
—¿Baihu? —Bai Xifeng estaba sorprendida.
Baihu lloró y lloró. Incluso sus lágrimas salieron.
—Eres una traidora. Me dijiste que esperara hasta ser mayor. ¿Por qué contratas a alguien más? Ya me tienes a mí —Baihu golpeó el pecho de Bai Xifeng con sus patas.
Bai Xifeng estaba confundida. ¿Por qué Baihu lloraba así?
—Maestro, déjame traducírtelo —dijo Gryffindor.
—Sí, por favor —Bai Xifeng asintió.
—Estaba enojado contigo por haberme convertido en bestia contratada. Le dijiste que esperara hasta que fuera mayor —declaró Gryffindor.
Bai Xifeng no esperaba que Baihu se enfadara por esto. Bueno, ella quería que Baihu creciera y fuera libre. Él era el rey de las bestias.
—Maestro, ¿es él el rey de las bestias? —preguntó Gryffindor.