Tiffany estaba llorando silenciosamente mientras miraba a Alyssa. Parecía que se había sentado en algún momento.
—¿Qué pasa? —preguntó Alyssa con urgencia mientras se sentaba y se acercaba a la cama de Tiffany.
Tiffany no respondió y solo siguió sollozando profusamente.
—Me estás preocupando, Tiff. Dime qué pasó. ¿Hablar de tu familia te trae malos recuerdos? Lo siento, Tiff. No sabía que te afectaría tanto o te habría detenido para que no recordaras eso. No llores más —dijo Alyssa mientras extendía la mano para acariciar la espalda de Tiffany.
—¡Tonta! —de repente Tiffany maldijo a Alyssa.
Alyssa se sorprendió.
—¡Ah! ¿Qué hice? —preguntó Alyssa confundida.
Tiffany sollozó e hizo una mueca a Alyssa.