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—¿Por qué todos me miran así? ¿Qué demonios hice ahora? Ayer hablé con mi madre y volví a casa una vez firmado el contrato. ¿Por qué todos me miran con esos ojos hostiles? —Rika se mordió el labio mientras hacía todo lo posible por no verse afectada. Pero toda esta presión a su alrededor le hacía cuestionar su decisión de estar aquí.
—Entonces, ¿en qué puedo ayudarte hoy? Por favor, sé rápida porque no tengo todo el día —la mujer en la recepción también le preguntó a Rika con una mirada fría. Sus ojos penetrantes hicieron que Rika se sintiera más pequeña de lo que era, lo cual era irritante.
Aun así, dado que nadie había 'realmente' hecho nada contra Rika, sabía que no podía armar un alboroto y decidió mantener la calma.
—Mi gafete de empleada no funciona. Cuando lo escaneo, no registra mi asistencia. ¿Puedes revisarlo por mí? —Rika preguntó con un casi tartamudeo en su voz. Se sentía nerviosa y agitada, pero no quería mostrarlo a los demás si podía evitarlo.