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—Yejun-ssi, si me convierto en tu Guía Exclusivo, entonces ya no podrás recibir tratamiento de otros Guías —le recordó Wonhee a Yejun—. Era como si el 'manual' para su nuevo empleo como Guía se le hubiera implantado repentinamente en la cabeza tras hablar con el Hada Mandarina. —Por otro lado, yo todavía puedo guiar a otras Personas Despertadas.
—Bueno, no puedes guiar a otras Personas Despertadas si ya están muertas.
—Yejun-ssi.
—Es broma —dijo Yejun, luego abrió sus ojos naranjas que comenzaban a aclararse cada momento que pasaba—. Sé que un Guía no puede ser monopolizado. Pero aún así quiero que seas mi Guía Exclusivo, Wonhee. Intentaré no ser demasiado celoso. Confío en que solo yo puedo tener una tasa de compatibilidad perfecta contigo de todas maneras.
—Me pregunto de dónde viene tanta confianza.
—¿De mi corazón?
—Eso da mucha pena.
Él solo se encogió de hombros.
—¿Estás seguro de que quieres que sea tu Guía Exclusivo, Yejun-ssi?
—Sí, Wonhee-ya. Al 100%.