—Ian les contó que Kevin acababa de enfrentarse a Lilith, la Diosa y creadora de todos los demonios, y les explicó por qué había intentado matarlos, también confesó que Kevin no era su objetivo, sino que era él.
—Mientras les contaba todo, estaba ayudando a Liam a recoger los cristales de los Elementales y había muchos, el hecho de que no estuvieran compartiendo su botín con una secta entera hacía que este tesoro fuera realmente invaluable.
—Pero sabía que esos cristales no eran lo que su hombre buscaba, así que una vez que terminó de contar todo lo que había sucedido, y que todos los cristales fueron recogidos, se arrodilló en el suelo y puso sus dos manos planas sobre él dejando que su elemento tierra buscara minerales en las rocas que los rodeaban.
—Liam, quien después de escuchar que esta Diosa, que por cierto había creado a Ian, quería eliminarlo porque ya no podía usarlo, se sintió por primera vez en mucho tiempo débil e impotente para proteger a su compañero.