La Niñera Wei les sonrió cálidamente, entendiendo algunas de sus preguntas por cómo movía los labios al hablar —No se preocupen, ella está bien, solo tuvo una emergencia que atender y no pudo llevarlos consigo, esperaremos por ella en el hotel y pronto vendrá a reunirse con nosotros... Les revolvió suavemente el cabello mientras los miraba a los ojos, esperando una señal de comunicación, si habían entendido lo que decía.
Se apresuraron a asentir con la cabeza, comprendiendo, y le preguntaron qué podían hacer para ayudarla y ella señaló las piezas de joyería que podían empaquetar en sus pequeñas cajas de brocado y guardarlas.
Una vez entendieron su tarea, se inclinaron y comenzaron a empacarlas de los estantes a las cajas y en poco tiempo, terminaron y se movieron a trabajar con la Niñera Wei y la asistieron empacando otras cosas que Su Wei Wei necesitaría en la maleta.
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