Wei Wei se acomodó en la cama rosa y acarició gentilmente el suave cabello de seda de Tang Ning, se había dormido y su respiración sonaba pareja. Con suerte, mañana sería un día mejor para ellos.
—Puedes dormir en la cama, yo también te arrullaré para que duermas... —Se levantó de la cama rosa, tomó su mano mientras él estaba cerca y lo arrastró hacia la cama azul pero él sacudió la cabeza señalándole que estaba bien. Puede dormir sin ser arrullado.
Pero Su Wei Wei no le dio la oportunidad de rechazar, lo levantó y lo colocó en la cama antes de cantar una canción suave mientras lo acurrucaba. Tang Ying le sonrió cálidamente a Wei Wei con risitas suaves y ligeras resonando de vez en cuando.
Él tenía hoyuelos más profundos cuando sonreía y se podía decir que sus padres eran muy atractivos y tenía una madre hermosa, su cabello era negro azabache sedoso y sus ojos eran azul océano, eso debía ser por los genes de su madre ya que los otros dos tenían ojos avellana.