Los ojos de Wang Kang estaban cerrados y parecía alguien que estaba durmiendo profundamente. No se podía decir que estaba muerta. Wang Chen-Ho se acercó para comprobar su pulso, ¿y si aún estuviera viva? Pero no, no había pulso en absoluto.
—Estábamos esperando a que sus familiares firmaran algunos formularios antes de que se realizara la autopsia en su cuerpo, esa es la única manera de saber qué le pasó... —Mortician Pei habló antes de proceder con su trabajo. Tenía varios invitados que verificar y asegurarse de que se conservaran después de embalsamarlos.
—¿Y su esposo? ¿No debería estar aquí para firmar esos papeles porque estaban legalmente casados? ¿Por qué esperar por nosotros? ¿Por qué él no pudo hacer ese proceso? —Wang Chiang, la hermana de Wang Kang, preguntó mientras se secaba las lágrimas triste por la muerte de su hermana.
