Henry confió a Amy al cuidado de Mary y se fue a la sala de reuniones vacía que el hospital había proporcionado para él y su equipo de seguridad. Como aún era temprano en la mañana, decidió esperar unas horas más para llamar a Rei y pedirle una actualización.
Para sorpresa de Henry, Rei ya estaba allí junto con Ava y Dave, y no tenían buen aspecto.
—Se ven terribles. Sé lo importante que es este caso, pero todos necesitan dormir un poco. No podrán resolver el caso si están enfermos, o peor aún, muertos —exclamó Henry, sin apreciar las ojeras bajo sus ojos y lo agotados que se veían todos.
—Hay malas noticias. Ya lo sabía desde ayer pero no quería molestarte anoche ya que informarte no cambiaría nada —dijo Rei, mostrando una mirada de derrota.