—Oye, despierta, ¿Puls?
Mientras los pensamientos de Xiao se transmitían,
una voz masculina profunda y firme resonó en la mente de Xiao,
—¿Es hora de cenar, maestro?
—Sí, una muy deliciosa.
—¿Es esta la sensación después de liberar el tercer grillete?
—¡¿Este poder?!
—¡Es tan poderoso, tan maravilloso! ¡Esta sensación es indescriptible!
—¡Jaja~
—¡Jajaja~
—¡Jajajaja!
Por otro lado, Xue Tianao sintió un poder inmenso y aterrador surgiendo dentro de él. Esta nueva fuerza lo llenó de una sensación abrumadora de seguridad. Era como si hubiera alcanzado un nivel que nunca antes había conocido, lo que le hizo estallar en alegría y risas. Romper el tercer Grillete lo había acercado al alto octavo nivel, y estaba entusiasmado con este logro.
Con una fuerza de alto nivel combinada con la naturaleza formidable del poder divino, ¡incluso un experto de Octavo Rango en su apogeo encontraría imposible derrotarlo!
—¡JA JA JA, ahora soy invencible!
