[¡Apresúrense! ¡Rapido!]
Habló Hanz en vosz alta al grupo que tenía detrás.
Corriendo entre los pinos familiares y saltando entre las raízes evitando tropezar como pudieran.
Por detrás, se escuchaban los ladridos de los sabuesos y las voces de gritos y sonídos del motor de motosicletas que serbían muy bien en este tipo de caminos boscosos.
Esta mañana se habían levantado, y como habían acostumbrado en todas las últimas semanas en que repetían el mismo patrón, comieron solo un poco, se encargaron de hacer sus necesidades y repusieron el agua en sus cuerpos, y tras hacer todo lo posíble para borrar cualquier rastro de su estadía en el lugar, siguieron su escape.
Anteriormente habían tenído una ruta en específico, pero esta vez habían tomado un nuevo camino con una ruta al azar, aunque la dirección siempre fue la misma para llegar a markov.
todo fue bien al inicio, pero mientras escapaban siguiendo un ave controlada por Paul, para encontrar un camino adecuado en el bosque y intentaban perderse entre la malesa, se escuchó el sonido de las motocicletas.
En algún momento, una vez mas, esas personas los habían rastreado y ahora parecían mucho mas preparados, sin ya no buscarlos encima de autos o a pie, que era muy estorboso por los caminos donde ellos usualmente tomában, Ahora usaban motocicletas que podían andar por estos caminos de cenderos, y todabía habían sabuesos de caza que los perseguían.
Habían estado corriendo por mas de una hora, intentando subirse en los caminos donde pensaron que las motocicletas no podrían seguírlos, sin embargo,era muy difícil lograr escapar y deshacerse de sus perseguidores que parecían saber perfectamente a donde se dirigían.
Hanz quería seguír corriendo hacia adelante, sin embargo, las personas que tenía detrás estaban debilitados y tras un periodo de gran esfuerzo físico ya no podían seguír adelante incluso si exprimían toda la energía que tenían, solamente algunos eran capaces de lograr mantener el paso, pero de los 20 solo eran unos 5.
Al final, no tuvieron mas remedio que detenerse en medio de una colina un poco alta.
Apretando los dientes, Hanz decidió quedarse en el lugar.
[Todos, pronto, continúen por delante, me quedaré a detener a esos tipos]
Los mutantes que lo rodeaban, al escuchar lo que decía, inmediatamente dudaron de si seguír o quedarse.
Rick, el hombre que podía convertírse en piedra, negó con la cabeza.
[Imposible, esos tipos tienen esas cosas, pueden alcanzarnos con facilidad, y tu solo no podrías detenerlos, yo tambien me quedo]
Entregando a la chica que cargaba en su espalda a otro miembro del grupo, tomó una de las armas que había tomado en la incurción anterior, preparado para usarla.
[Yo tambien me quedo]
Habló Peter,el hombre mono mientras sacaba su arma de igual forma que Rick, con una mirada dispuesta a quedarse.
Greta y Paul parecían querer quedarse de igual forma, sin embargo, Hanz los detuvo.
[Chicos, es bueno si nosotros nos quedamos, gracias.
Pero alguien siempre debe guiar el camino por delante, ambos son los mejores en persepción, estoy seguro que lo lograrán]
Hanz aceptó que Rick y Peter se quedaran, eran personas muy fuertes, pero no podía soportar que otras personas se quuedaran.
Paul frunció el seño queriendo refutar y quedarse, pero pensando en sus brazos y piernas delgados y que ahora su corazón latía como un tambor, incluso con el miedo de que en cualquier momento el corazón se le saliera del pecho, solo podía asentír.
Hanz sacó una pistola de su bolsillo y se la entregó a Paul.
[Toma esto, y úsalo si es necesario]
Apretando el arma entregada en sus manos, Paul asintió.
[Bien, irémos por el camino anterior, pero, los esperarémos fuera del bosque]
Varias personas tambien pensaban en querer ayudar, pero todos eran tan débiles que no podían hacer nada mas que lamentar su inutilidad.
Con solo tres personas quedándose en el lugar, Hanz dejó que los tres se organizaran en una emboscada desde la sima de los árboles.
Peter subió facilmente a lo alto de un pino, mientras que Rick y Hanz tardaron otro poco en subír y ocultarse en otros lugares.
La zona de emboscada era un entremedio de un par de colinas altas, donde bien no era imposible de pasar, pero para vehículos como motocicletas solo podrían tomar el camino facil, que consistía en pasar entre las colínas.
Aquí ellos esperaron.
Y no tuvieron que quedarse demaciado tiempo.
El sol ya había subído y pasado el centro del cielo, Justo en ese momento, los ladridos de los perros sonaron desde una zona sercana, y pronto se lograron ver como lo que parecían haber sido los que los rastreaban todo este tiempo, perros grandes que parecían aterradores se asercaban a gran velocidad.
Una docena de estos sabuesos corrían apresuradamente por delante, y siguiéndolos, una docena de personas montadas en motocicletas pesadas y anchas los seguían por detrás.
Hanz no dijo nada, solamente apuntando a las personas que benían desde lejos.
*¡Bang!*
El disparó sin inmutarse.
...
..
.
Al mismo tiempo, el grupo de Paul corrió por el bosque, el camino lleno de arbústos, y suelos desiguales.
[¡Corran!,¡Hanz y los demás estan deteniendo a nuestros enemigos no podemos detenernos, Vamos chicos!]
corrió y empujó a los que se quedaban atras, levantaba a los que caían y buscó por delante de el camino con cuidado.
sus piernas y brazos siendo arañados por ramas, su túnica rasgada y el aliento pesado que le enfriaba la nariz y garganta con cada respiración.
Pero mientras corrían todos, los sonídos de los perros que ladraban por delante sonaron, haciendo entrar a su grupo que había corrido durante solo un par de kilómetros entrar en pánico.
Al mismo tiempo, mas sonídos de motocicletas sonaron por delante.
Eran no tantos, apenas menor que el sonido que habían escuchado por detrás, pero para su grupo, eran demaciados.
*¡DaDaDA!*
Los sonídos de los disparos llegaron chocando contra el camino por donde estaban apunto de pasar, explotando el suelo y pedazos de madera con metralla y astíllas de madera.
[¡Ah!]
Un mutante gritó cuando una bala le atravezó la pierna y calló al suelo.
Como fichas de dominó, todos los que seguían por detras calleron al suelo.
El grupo fue rodeado de inmediato con varios soldados, y pronto, uno sacó un pedazo de metal largo y tosco con el que emitían chispas eléctricas, como un taser rudimentario, y lo empujaron contra varias personas para inmovilisarlos.
[¡Aah!]
La corriente eléctrica azul se entrelazó y con todos juntos, se repartió entre todos.
Pronto, 4 tasers mas se empujaron contra el grupo de mutantes débiles, que solo podían caer al suelo y gemír de dolor.
Paul sentía la electricidad correr por su cuerpo, su cabello se herizó y el hormiguéo y dolor lo hizo combulcionar sin poder moverse correctamente incluso cuando quería defenderse.
Quería tomar la pistola que Hanz le había entregado antes de irse, pero lo único que logró tocar fue un medallón familiar en forma triangular.
Mientras su conciencia se desvanecía, solo podía esperar que de alguna forma, el dios del que tanto Hanz les hablaba en la actualidad, hiciera un milagro.
Justo cuando estuvo apunto de desmayarse, pareció escuchar el sonído de la rotura del aire y una voz femenina se logró oír llegar de algún lugar.
[¡Alto ahí rufián!]
...
Hanz miró como Peter caía del árbol donde se posaba mientras que una linea de sangre chorreaba desde su cuerpo, esparciéndose en el aire.
Apretando los dientes, volvió a apuntar y disparó en el modo automático contra el grupo d hombres misteriosos que los seguían rodeando.
En ese momento, Hanz logró ver como uno de los tipos arrojaba una especie de piedra redonda hacia ellos, y al ver el objeto, las pupílas de Hanz se estrecharon al tamaño de agújas.
Quería gritar, pero antes siquiera de poder abrír la boca, la granada lanzada había explotado.
*¡Boom!*
Las llamas subieron junto con la honda de choque, solo podiendo intentar resguardarse detrás de una roca donde se ocultaba.
Agachándose, escuchó el grito de Rick, y al mismo tiempo, la honda expansiva chocó contra la piedra en su espalda, y el viento voló serca de sus orejas.
La exploción fue tan atronadora que sus oídos comenzaron a sonar con un pitido y su cerebro dio vueltas.
Solamente podía sostener la insignia en su pecho mientras rezaba a dios para que lo protegiera.
Sintiendo al mismo tiempo el calor del fuego que llegaba desde los lados, su cuerpo que parecía moverse en cámara lenta.
Su mente que aún estaba medio clara, solo pensaba en cuando el fuego lo envolvería y quemaría.
Pero mientras veía las lenguas de fuego llegar desde todos los lados, algo extraño ocurrió.
El fuego se detuvo en el aire, como si hubiera sido precionado con el botón de pausa.
para el Hanz aturdído, esto era casi como una escena de milagro lo que tenía frente a el.
[¿Como se atreven a tocar a mis creyentes?]
Pareció escuchar una voz femenina.
al mismo tiempo que escuchó esto, en el aire, un figura borrosa, como si fuera una ilución que se paraba en el aire.
Cabello rojo como las mismas llamas, un vestído elegante como hecho de los pétalos de rosas, y la arrogancia de una reina.
Y en su espalda, se habia iluminado una especie de halo en forma triangular familiar.
Sintiendo la señal de acólito que no había parado de apretar en su palma durante todo el tiempo, finalmente lo reconoció.
Era dios el que había benído a ayudar.
La figura arrogante en el cielo pareció ignorarlo todo, y desde su mano, controló las llamas como si fueran sus sirbientes.
*¡ban!*ban!*
Un par de disparos se escucharon de enfrente y se pudo ver como dos balas parecieron atravezar el cuerpo de la figura ilusoria, pero el resultado fue que solo la atravesaran, sin hacer ningún daño.
[La basura no merece pararse frente a mi]
dijo la chica, y con un control de llamas increíble, hizo una bola de fuego, como si fuera una ola de mar gigante que corría hacia el grupo de adelante.
Los disparos sonaron pero algunas balas no podían detener las llamas expansivas que corrían hacia ellos.
¡Exploción!
Lo que vio Hanz fue una escena en cámara lenta, pero desde que había llegado Driasyl, no pasaron ni 5 segundos, cuando el fuego envolvió al grupo enemigo, evitando casi perfectamente las motosicletas, solo quemando a las personas y perros.
En ese momento, mientras se encargaba de golpear a algunas cosas sucias, ella sintió una mirada furtiva que llegaba desde atrás.
Volteando, ahí pareció ver otra figura flotante en el viento.
Driasyl entrecerró los ojos.
Rojo, blanco y azul.
Ambas miradas se juntaron desde algúnos kilómetros como si pudieran verse cara a cara.
[Tch, solo puedo estar así durante unos segundos.
Te agradezco por salvar a mis seguidores, mujer de vestimenta extraña]
Saludó Driasyl cuando su habilidad para crear un avatar para ayudar a sus seguidores de fé se acababa.
Mirando a algunas personas tiradas, movió las manos y de estas, dos rayos de luz verde llena de vitalidad volaron hacia Rick y Peter, así como uno voló hacia lo lejos.
Luego de esto, varios rayos de luz dorada se exparcieron entre todas las personas.
[Regresaran a mi templo a salvo]
dijo esto, con una expreción digna, y depronto su habilidad corpórea pareció ya no aguantar, y desapareció de su lugar.
Al mismo tiempo que ella desaparecía, otra figura había llegado justo frente al lugar donde había ocurrido la exploción y donde había desaparecído Driasyl.
Una mujer.
Una mujer que volaba, rubia, ojos azules.
falda corta, y una llamativa capa roja junto con una estrella mas llamativa en el pecho.
La mujer se posó sobre el aire con una postura orgullosa, manos en las caderas y parecía ser su postura heroica practicada.
Si no fuera porque se paraba un poco mas lejos y usaba un par de mallas, era obvio que el trio de Hanz, Peter y Rick habrían visto todo lo que tenía debajo de ella.
[¡Hi! ¿Are you okay?
Where is that girl?
um, sorry, i´amMiss america!]