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Alix era una de las madres más ruidosas y entusiasmadas en el estadio. Si uno no supiera mejor, asumiría que era la madre de Xiaobo y no su tía.
No queriendo quedarse atrás, su espíritu de entusiasmo contagió a los Zhang's, a Yura y sorprendentemente a Zhang An, quien se unió a ella.
Los mayores probablemente eran demasiado viejos para animar tan imprudentemente a los niños, así que solo observaban sonriendo.
Cuando el equipo de Xiaobo quedó segundo en la carrera de relevos, Alix incluso saltó una vez en el aire, realmente alto.
Casi aplastó el pie de Yura cuando sus pies tocaron el suelo de nuevo y se disculpó profusamente, extremadamente avergonzada.
—Está bien, estoy segura de que Zhang Bo estará feliz de ver que toda la familia está aquí apoyando a su hijo. También estará feliz de ver cuánto Xiaobo está floreciendo lentamente bajo tu cuidado —Yura tocó el brazo de Alix y la tranquilizó.
Alix se sonrojó y se rió de manera tonta. —Solo estoy ayudando a Caishen —dijo.