—Si te dijera que me vi obligado a terminar mi compromiso matrimonial con Xin Xin, ¿me creerías? —dijo Tang Zizheng levantando la cabeza.
—Zizheng, ¿estás bromeando? ¿Quién puede obligarte a hacer algo que no quieres hacer? —preguntó Jiang Haolin levantando las cejas.
—No, estoy muy serio —respondió Tang Zizheng mirándolo seriamente.
—Pero no vi que te obligaran a romper el compromiso matrimonial. Ese día, parecías realmente odiarla y no querías tener nada que ver con Xin Niang nunca más. También le dijiste esas palabras hirientes en público —dijo Jiang Haolin pensando por un momento.
—Sé que puedes pensar que estoy loco, pero en ese momento alguien realmente me controlaba. Lo que quería decir cambiaba cuando lo decía. Cuando dije esas palabras, estaba controlado por alguien, y no pude detenerlo —dijo Tang Zizheng con las manos apretadas siendo recordado por Jiang Haolin.