El corazón de Shen Mianmian dio un vuelco.
—Maldita sea.
No bien se asentó el pensamiento, ella escuchó las voces de Su Xiaohong y Wang Jingjing detrás.
—Están peleando en el baño de hombres.
—Parece que alguien está golpeando a Lu Siyuan —dijo Su Xiaohong, algo asustada—. Por el sonido de ello, eran muchos contra solo Lu Siyuan.
—Definitivamente están golpeando a Lu Siyuan —confirmó Zhao Xinlan con certeza.
Sin tener idea de qué hacer, Su Xiaohong preguntó:
—Entonces, ¿qué hacemos ahora?
—Rápido, ve a buscar a un profesor.
Después de soltar esa frase, Shen Mianmian corrió directamente hacia el baño de hombres. Estaba preocupada de que, para cuando encontraran a un profesor, nadie se atrevería a romper la pelea, y tomaría varios minutos para que el profesor llegara. Para entonces, quién sabe cuánto habrían golpeado a Lu Siyuan.
Justo pasaron a estar allí en el momento adecuado.
—Encontrar a un profesor, sí, necesitamos encontrar a un profesor.