—Entonces, ¿cómo deberíamos dividir las responsabilidades para cuidar a los padres? —planteó Yun Lei.
—La responsabilidad de supervisión recae sobre la hija que ya se ha casado. En cuanto al cuidado de los ancianos, tanto como aporten mi hermano mayor y segundo hermano, yo igualaré. Si no tengo comida extra, simplemente convertiré eso en dinero y se lo daré a nuestra madre. Los regalos para festivales y demás deben calcularse por separado —dijo Meng Yunhan mientras los miraba a todos.
—Tú fuiste quien dijo que se encargaría de nuestros padres. ¿Por qué deberíamos hacerlo nosotros ahora? —Zhang Cuihua se desvinculó de Yun Hai, claramente reacia a asumir la responsabilidad.
—Cuñada, no me hagas exponer tus fallas —resopló fríamente Yun Men.
—No tengo fallas —Zhang Cuihua no creía tener nada que ocultar.